Los dem¨®cratas del Congreso tienen la llave del acuerdo con Ir¨¢n

El verdadero blanco de la ofensiva del presidente Barack Obama para convencer al Congreso sobre el pacto con Ir¨¢n son sus compa?eros de partido. Los legisladores dem¨®cratas tienen la llave que puede hacer descarrilar un acuerdo definitivo sobre el programa nuclear iran¨ª. La oposici¨®n es mayor entre los republicanos, que ostentan la mayor¨ªa del Congreso, pero necesitan de apoyo dem¨®crata para que prosperen los proyectos de ley que podr¨ªan revocar un pacto final e imponer nuevas sanciones a Teher¨¢n.

Los c¨¢lculos han empezado. Tras las elecciones de noviembre, los republicanos mantuvieron su mayor¨ªa en la C¨¢mara de Representantes y se hicieron con la del Senado. El dem¨®crata Obama puede vetar las leyes que apruebe el Congreso, como ha avanzado que har¨¢ con cualquier que pueda afectar al pacto nuclear. Pero si ambas c¨¢maras aprueban una norma con dos tercios de votos a favor, el veto presidencial queda anulado. Es una empresa dif¨ªcil -hist¨®ricamente el Congreso ha anulado menos del 10% de los vetos-, pero al fin y al cabo posible, como recuerdan ahora los conservadores a la Casa Blanca.

Obama puede vetar las leyes que apruebe el Congreso, siempre que no cuenten con dos tercios de votos de ambas c¨¢maras

El aviso lo dio el domingo el republicano Bob Corker, presidente del Comit¨¦ de Relaciones Exteriores del Senado, que dijo que est¨¢n cerca. ¡°No s¨¦ si tenemos 67 votos [...] Tenemos 64 o 65 que conozcamos hoy. Hay muchos m¨¢s que est¨¢n considerando esto¡±, se?al¨® en una entrevista a la cadena Fox News.

Corker se refer¨ªa a los 67 votos necesarios para que el Senado invalide un veto presidencial. Los republicanos controlan 54 esca?os del Senado, frente a 46 dem¨®cratas (dos de ellos independientes). Es decir, si mantuviesen la unidad de toda su bancada, necesitar¨ªan el apoyo de 13 senadores dem¨®cratas para anular un bloqueo de Obama. Algo parecido har¨ªa falta en la C¨¢mara de Representantes, pero te¨®ricamente ser¨ªa m¨¢s sencillo dado que el dominio conservador es superior.

Corker impulsa, junto a senadores dem¨®cratas, un proyecto de ley que permitir¨ªa al Congreso revisar un acuerdo nuclear definitivo -que se debe alcanzar en junio-, prohibir¨ªa la retirada de sus sanciones contra Ir¨¢n durante un periodo de 60 d¨ªas posterior al pacto final y requerir¨ªa al presidente certificar cada 90 d¨ªas si Teher¨¢n cumple. Durante los 60 d¨ªas, el Congreso podr¨ªa aprobar, rechazar o no valorar el acuerdo. Y en caso de falta de verificaci¨®n en 90 d¨ªas, volver¨ªa a imponer penalizaciones.

Legisladores de ambos partidos impulsan un proyecto de ley que permitir¨ªa al Congreso revisar y rechazar un acuerdo nuclear, prohibir la retirada de sanciones a Teher¨¢n e imponer nuevas

Obama puede anular unilateralmente todas las sanciones impuestas a Ir¨¢n, pero para acabar definitivamente con las del Congreso necesita un voto. La Casa Blanca insisti¨® este lunes en que quiere que ese sea el ¨²nico papel del Capitolio, seg¨²n dijo el portavoz, Josh Earnest, en su rueda de prensa diaria.

Pero, tras el acuerdo del jueves, legisladores de ambos partidos coinciden en exigir ser escuchados. La inc¨®gnita es cu¨¢n lejos est¨¢n dispuestos a ir los dem¨®cratas. El presidente y su equipo han hablado en los ¨²ltimos d¨ªas con destacados legisladores para tratar de aplacar su inquietud.

El tiempo juega a su favor. Corker dijo que su comit¨¦ votar¨¢ la ley la semana que viene, pero no ser¨¢ hasta finales de abril o a principios de mayo cuando se debata en el pleno del Senado. Muchos dem¨®cratas recelan de cualquier acercamiento a Ir¨¢n y quieren ser valorados, pero la inc¨®gnita es si, a la hora de la verdad, querr¨¢n impedir el que posiblemente ser¨ªa el mayor hito en pol¨ªtica exterior del tambi¨¦n dem¨®crata Obama.