La triple brecha educacional latinoamericana
Los pa¨ªses de la regi¨®n deben aplicar un men¨² variado y complejo de medidas para reducir la diferencia en el desempe?o educacional respecto al mundo
La primera brecha educacional, la absoluta, es la que muestra el porcentaje de estudiantes que est¨¢ bajo el nivel b¨¢sico m¨ªnimo de conocimientos. La prueba PISA (2015) muestra para ocho pa¨ªses latinoamericanos (Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Costa Rica, M¨¦xico, Per¨² y Uruguay) que entre el 50% y el 70% de los estudiantes latinoamericanos quedan bajo el nivel b¨¢sico en matem¨¢ticas. Por otra parte, en el tramo de los niveles m¨¢ximos solo alrededor del 1% de los estudiantes logra estar en los niveles superiores.
?Qu¨¦ han aprendido m¨¢s de la mitad de los escolares respecto a los que no han ido a la escuela?
La prueba PISA muestra que a medida que aumenta el nivel de ingresos, aumenta el puntaje
La brecha educacional interna es la que concentra el foco del debate en los pa¨ªses latinoamericanos, es decir, la diferencia en el desempe?o educacional entre los estudiantes de las familias de altos y bajos ingresos. La prueba PISA con los puntajes promedios a nivel de decil para los ocho pa¨ªses latinoamericanos muestra que a medida que aumenta el nivel de ingresos, aumenta el puntaje. Hay pa¨ªses latinoamericanos en los que este diferencial educacional entre el decil m¨¢s rico respecto del m¨¢s pobre es superior a 135 puntos.
La brecha educacional externa constituye un factor crucial para el futuro de los j¨®venes y la competitividad de los pa¨ªses. En consecuencia, la comparaci¨®n educacional relevante para saber ¡°cu¨¢n bien o cu¨¢n mal¡± est¨¢ el nivel de la educaci¨®n local es la ¡°distancia¡± existente respecto al nivel de los pa¨ªses l¨ªderes en educaci¨®n escolar.
Singapur supera a los ocho pa¨ªses latinoamericanos por un rango de 142 a 187 puntos (matem¨¢ticas). A¨²n m¨¢s, ni siquiera los mejores estudiantes latinoamericanos (percentil 95) logran niveles similares al de la mitad inferior de los estudiantes de Singapur. Dado el desempe?o hist¨®rico observado, reci¨¦n en el a?o 2047 varios pa¨ªses latinoamericanos lograr¨ªan el nivel actual de Singapur.
El debate latinoamericano se focaliza fundamentalmente en la brecha educacional interna. El foco de la discusi¨®n ha estado orientado en elaborar propuestas para cerrar esta brecha entre los escolares de las familias de altos y bajos ingresos. Se calcula el monto de recursos que cuesta la educaci¨®n de los estudiantes de altos ingresos y se sugiere que bastar¨ªa gastar montos similares en los estudiantes de bajos ingresos para aumentar el nivel educacional.
Este razonamiento supone que el nivel educacional de las escuelas latinoamericanas de altos ingresos es el ¨®ptimo a alcanzar. Hemos visto que los mejores estudiantes latinoamericanos ni siquiera alcanzan el nivel que tiene el promedio de los estudiantes de Singapur.
Esta perspectiva es incorrecta, por cuanto no capta el fondo del problema. Vivimos en un mundo global; entonces, el enfoque tiene que ser global y no local. Los escolares latinoamericanos tienen un desempe?o que est¨¢ muy por debajo de los escolares de los pa¨ªses desarrollados y asi¨¢ticos. Esto significa que hay una falla fundamental en la metodolog¨ªa de ense?anza de toda la educaci¨®n b¨¢sica y media latinoamericana.
?Cu¨¢les ser¨ªan las medidas que habr¨ªa que utilizar para cerrar las tres brechas? Obviamente, no hay una sola medida que resuelva las tres brechas simult¨¢neamente. A nuestro juicio, la brecha absoluta respecto a alcanzar los niveles b¨¢sicos m¨ªnimos de LEA (Lectura, Escritura y Aritm¨¦tica) podr¨ªa abordarse con la metodolog¨ªa sugerida por la Academia Khan; esto requiere orientaci¨®n y supervisi¨®n de profesores.
En el caso de la brecha interna de educaci¨®n, se requiere un men¨² variado y complejo de medidas. Idealmente, los mejores profesores debieran ense?ar a los ni?os y j¨®venes que tienen mayores dificultades de aprendizaje; incluso, se puede requerir una educaci¨®n personalizada para que efectivamente ¡°nadie se quede atr¨¢s¡±. No es f¨¢cil implementar estas sugerencias. La econom¨ªa pol¨ªtica requerida para reducir la brecha educacional interna enfrentar¨ªa severos conflictos ideol¨®gicos y sociales.
Sin embargo, la brecha educacional externa es la m¨¢s dif¨ªcil y compleja de resolver. En este siglo XXI lograr los niveles b¨¢sicos m¨ªnimos de LEA tiene un efecto marginal sobre la reducci¨®n de la brecha externa; debido a las permanentes innovaciones tecnol¨®gicas, los j¨®venes est¨¢n expuestos a resolver problemas complejos y desconocidos. Para esto requieren dominar las habilidades necesarias para el mundo actual; pensamiento cr¨ªtico, creatividad, trabajo en equipo, y comunicaci¨®n oral y escrita. ?Cu¨¢ntos profesores latinoamericanos podr¨ªan ense?ar estas habilidades?
Patricio Meller es profesor titular de la Universidad de Chile, presidente de Fundaci¨®n Chile e investigador s¨¦nior de la Corporaci¨®n de Estudios para Latinoam¨¦rica (CIEPLAN).
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