Hidr¨®lisis, compostaje y cad¨¢veres pulverizados para la nueva ley funeraria holandesa
Los liberales de izquierda, miembros de la coalici¨®n de centro derecha en el poder, quieren actualizar los entierros para que sean sostenibles y decidan los familiares
Un entierro no consiste solo en dar sepultura a un cad¨¢ver con dignidad. Mientras los funerales se suelen preparar, y hay quien los planea minuciosamente, la inhumaci¨®n presenta dos modalidades principales: en tierra y con un ata¨²d, o mediante incineraci¨®n. Apenas hay variaciones, y en Holanda, los liberales de izquierda, miembros de la coalici¨®n de centro derecha en el poder, sostienen que es preciso actualizar la ley funeraria, de 1869. Quieren que sea sostenible desde el punto de vista ambiental, atienda los deseos de la gente y refleje los ¨²ltimos avances del sector: desde la hidr¨®lisis alcalina, al compostaje y la criomaci¨®n del cad¨¢ver.
Monica den Boer, la diputada liberal holandesa partidaria de modernizar los enterramientos, indica en su nota remitida al Parlamento que ¡°tanto la sociedad como el sector funerario desean innovar¡±. Los familiares del fallecido, porque ¡°tener mayor capacidad de decisi¨®n les ayudar¨¢ a superar el duelo¡±. Con el apoyo de las funerarias, por otra parte, ¡°se podr¨¢ garantizar una inhumaci¨®n sostenible, sin emisi¨®n de di¨®xido de carbono, como ocurre al incinerar, y habr¨¢ m¨¢s espacio y menos f¨¦retros¡±. En 2017, fallecieron en total en Holanda 150.000 personas (hay 17 millones de habitantes). En 2010, fueron 135.000, seg¨²n la Oficina Central del Estad¨ªstica.
Entre otras cosas, propone permitir que los allegados ¡°mezclen en una sola urna las cenizas de sus seres queridos, o los sepulten juntos¡±. Quiere acelerar las inhumaciones e incineraciones, para que se efect¨²en a las 20 horas, y no a las 36, seg¨²n marca hoy la ley. De este modo, ¡°todas las religiones [en particular jud¨ªos y musulmanes que entierran a sus muertos en seguida] podr¨¢n hacerlo sin pedir un permiso especial al Ayuntamiento, como ahora¡±. Tambi¨¦n plantea ¡°enterrar en la naturaleza, con ropajes y materiales biodegradables¡±. Pero lo m¨¢s llamativo son otras tres modalidades tal vez menos conocidas.
La hidr¨®lisis alcalina como alternativa a la cremaci¨®n, es la primera. El cad¨¢ver se introduce en un cilindro de acero a presi¨®n con una mezcla de hidr¨®xido de potasio y agua, a altas temperaturas. Unas dos horas despu¨¦s, ¡°solo quedan los huesos que pueden entregarse, en polvo, a los parientes, y caben en una urna¡±, dice Den Boer. Es legal en algunos lugares de Estados Unidos y en Canad¨¢, pero no as¨ª en Europa, porque el l¨ªquido restante del proceso presenta dudas ambientales. En Holanda, la Organizaci¨®n para la Investigaci¨®n de las Ciencias Aplicadas (TNO, en sus siglas en neerland¨¦s), se?al¨® en junio pasado que esas aguas ¡°son est¨¦riles, no hay rastro de ADN humano y pueden ir al desag¨¹e¡±. Un 25% de los ciudadanos lo elegir¨ªa, y dos tercios ver¨ªa bien que se aprobara por ley, asegura la diputada, apoy¨¢ndose en datos de una encuesta publicada en 2017.
Den Boer propone a continuaci¨®n explorar el compostaje de los difuntos, para su descomposici¨®n de forma natural hasta que solo queda un humus que sirve de fertilizante. Y por ¨²ltimo, la criomaci¨®n, donde el cuerpo es congelado y sumergido en nitr¨®geno l¨ªquido en una m¨¢quina. Se congela de nuevo, y al cristalizar, se vuelve quebradizo. Una vez pulverizado con ayuda de vibraciones, y liberado de implantes dentales o pr¨®tesis diversas, es enterrado en una caja ecol¨®gica que se degrada de forma natural.
Nada de todo ello es posible en estos momentos en el pa¨ªs, pero ¡°es hora de modernizar la Ley Funeraria, cuya ¨²ltima enmienda se remonta a 1991, y que el ciudadano aporte su toque personal¡±, concluye la diputada.
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