Europa se polariza; el centro se pulveriza

En Alemania, los socialdem¨®cratas (SPD) viran a la izquierda y la conservadora Uni¨®n Dem¨®crata Cristiana (CDU), a la derecha. Es una nueva muestra de c¨®mo el centro, habitual caladero de votos para lograr la alternancia en el poder, se va desdibujando en el mapa pol¨ªtico europeo coincidiendo con el ascenso de los partidos populistas de extrema derecha y antisistema. Las nuevas presidentas de ambas formaciones, la socialdem¨®crata Andrea Nahles y la conservadora Annegret Kramp-Karrenbauer, est¨¢n decididas a deshacerse de la herencia recibida que les ha restado votos en recientes elecciones y penaliza en las encuestas, especialmente y de forma calamitosa en el caso del SPD. As¨ª lo cuenta Ninon Renaud en el diario Les Echos.

La primera ha logrado el apoyo del partido a su ambiciosa agenda social, con la que aspira a enterrar el pol¨¦mico programa de reformas del excanciller Gerhard Schr?der y recuperar el liderazgo de la izquierda. Un espacio disputado por los Verdes, a quienes las encuestas dan hoy ventaja, y fragmentado por el partido de extrema izquierda Die Linke. Seg¨²n Tobias Buck, del Financial Times, el impacto que tenga en las encuestas este giro a la izquierda del SPD servir¨¢ de referencia al resto de la resentida familia socialdem¨®crata europea, cuya popularidad y n¨²mero de votantes han descendido vertiginosamente en la ¨²ltima d¨¦cada y colocado a algunos, como es el caso de Grecia e Italia, al borde de la extinci¨®n. Al SPD los sondeos le dan solo un 15% de intenci¨®n de voto. Un porcentaje humillante para un partido que hasta 2002 obten¨ªa consistentemente alrededor del 40% de los votos.

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?Y que pasar¨¢ con la Groko? Esa gran coalici¨®n entre los dos grandes partidos que ha sustentado el Gobierno de Berl¨ªn entre 2005 y 2009 y desde 2013 fue renovada tras las ¨²ltimas elecciones generales en 2017. En todos esos a?os las diferencias ideol¨®gicas se difuminaron y ahora parece que toca reivindicarlas. Y no solo por parte del SPD. La nueva l¨ªder de la CDU ha decidido girar a la derecha para unir al partido. ?La raz¨®n? La imparable ascensi¨®n del partido xen¨®fobo y de extrema derecha Alternativa para Alemania. Kramp-Karrenbauer ha anunciado esta semana que pone fin a la pol¨ªtica migratoria de fronteras abiertas de su antecesora y madrina Angela Merkel.

A las dos les une el af¨¢n de movilizar a sus votantes ante las elecciones europeas de mayo y pararle los pies a las fuerzas de extrema derecha y antisistema que amenazan con subir con fuerza en esos comicios y cuyas dos familias representadas en el Parlamento Europeo amenazan incluso con desbancar del segundo puesto a los socialdem¨®cratas. La desaparici¨®n de los representantes brit¨¢nicos, de consumarse el Brexit, les pone en una situaci¨®n a¨²n m¨¢s comprometida. Esa es la raz¨®n por la que el profesor de Oxford Charles Enoch pide a Jeremy Corbyn, l¨ªder del Partido Laborista, en un art¨ªculo publicado en Social Europe, que defienda la convocatoria de un segundo refer¨¦ndum. Y que no deje de hacerlo por las razones equivocadas, pues tres de los pilares de su programa electoral, las nacionalizaciones, los subsidios p¨²blicos y un aumento del d¨¦ficit fiscal, ¡°son compatibles con la pertenencia a la UE¡±. Y le pide que sea responsable, pues si el l¨ªder laborista lograra avanzar esta agenda social dentro de la UE, ayudar¨ªa de forma definitiva a poner en marcha un programa de izquierdas paneuropeo.

Un programa que, con o sin los brit¨¢nicos, es necesario para parar los pies a los populistas que arrasan en algunos pa¨ªses y tensan la cuerda ideol¨®gica en la Uni¨®n Europea. En Italia, Matteo Salvini, representante del partido de extrema derecha la Liga, que gobierna en coalici¨®n con el Movimiento Cinco Estrellas (M5S), arrasa en popularidad. Hasta el punto de eclipsar al primer ministro, Giuseppe Conte. En una entrevista a Politico, Conte afirma que ser antisistema no equivale a ser antieuropeo. Reconoce que la gesti¨®n de la inmigraci¨®n en Italia ha podido provocar malentendidos con alg¨²n otro pa¨ªs socio, como es el caso de Francia. Ambas potencias viven una crisis diplom¨¢tica sin precedentes en la Europa de la posguerra. La gota que ha colmado el vaso ha sido la reuni¨®n del l¨ªder del M5S, Luigi Di Maio, con el m¨¢ximo representante de los chalecos amarillos, como analiza Luigi Scazzieri en la publicaci¨®n digital Centre for European Reform. Politico destaca que la entrevista ocurre en la regi¨®n de Abruzzo, donde el d¨ªa anterior las elecciones regionales le dieron la mayor¨ªa (48%) a la alianza de derechas formada por la Liga, Los Hermanos de Italia y Forza Italia de Silvio Berlusconi. El M5S qued¨® tercero, con el 20% de los votos. Otra muestra de la polarizaci¨®n pol¨ªtica que se extiende por Europa.

Arrepentidos por la austeridad

Preocupados por esta deriva, desde las instituciones europeas se multiplican los gestos para intentar compensar las nefastas consecuencias sociales de las pol¨ªticas de austeridad practicada durante los ocho a?os que dur¨® la Gran Recesi¨®n. En el 20 aniversario de la puesta en marcha del euro, la UE corre el riesgo de entrar de nuevo en crisis. Los cuatro a?os de crecimiento posteriores a la crisis han sabido a poco, especialmente a los ciudadanos m¨¢s golpeados por la misma. El Banco Central Europeo ha retirado ya sus est¨ªmulos. Es el momento de que la pol¨ªtica fiscal tome el relevo de la monetaria para evitar una nueva crisis, como recoge Chris Giles en el Financial Times.

Las tres grandes econom¨ªas europeas, Alemania, Francia e Italia, incluyen en sus presupuestos un est¨ªmulo fiscal por valor del 0,4% de su renta nacional. Que se gaste es un cambio de tendencia, pero la cantidad representa solo una cuarta parte del est¨ªmulo fiscal aplicado por Estados Unidos en el periodo de 2017 a 2019.

Que el cambio de direcci¨®n de la socialdemocracia alemana sea seguido o no por otros partidos hermanos en Europa est¨¢ por ver. Pero esa opci¨®n pol¨ªtica sigue despertando esperanzas m¨¢s all¨¢ del viejo continente. Tal es el caso del Bloque Nacionalista liban¨¦s. Una formaci¨®n que se abstuvo de tomar partido en la Guerra Civil de 1975 a 1990 ha sido relanzada hace escasos d¨ªas en Beirut.

Econ¨®micamente independiente, lo que significa que renace con los medios suficientes para mantenerse a salvo de la influencia que ejercen los pa¨ªses que rodean al pa¨ªs y contaminan su fr¨¢gil Gobierno, la iniciativa aspira a situarse al margen de las divisiones regionales que condicionan la acci¨®n pol¨ªtica. ¡°Los partidos libaneses tienden a poner el foco en las divisiones y problemas regionales para no tener que rendir cuentas a los ciudadanos cuyas necesidades no atienden¡±, dice uno de sus l¨ªderes. De origen cristiano, se comparan con la socialdemocracia alemana. ?Cu¨¢l? La de Schr?der o la que est¨¢ intentando reformar Nahles?

Y volviendo a Alemania. La canciller en retirada, Angela Merkel, reivindica en una entrevista a Die Zeit?la necesidad de cuotas para fomentar la presencia de las mujeres en los ¨®rganos de gobierno. La propuesta es opuesta al af¨¢n de algunos m¨¢s a la derecha, que se empe?an en perpetuar la funci¨®n de la mujer como reproductora de la especie para contrarrestar la ca¨ªda de la natalidad, ya sea v¨ªa subvenciones econ¨®micas, como propone Viktor Orb¨¢n, cuyo gran objetivo es prescindir de los inmigrantes, o en lares m¨¢s cercanos, coartando la libertad para decidir sobre los cuerpos. El d¨ªa en que una mujer responda a la pregunta de qu¨¦ hace en la vida y diga que es madre y se valore, podremos dejar atr¨¢s estas irritantes propuestas.