Bruselas plantea una norma para borrar en una hora contenidos que promuevan el terrorismo en Internet
La Comisi¨®n Europea pide que las plataformas eliminen los mensajes radicales si lo solicitan los Estados
Con los recientes atentados en Francia, Austria y Alemania frescos en la memoria, y menos de un mes despu¨¦s del quinto aniversario del terror¨ªfico ataque a la sala Bataclan en Par¨ªs, la Uni¨®n Europea avanza en su estrategia frente al fanatismo violento con una nueva agenda antiterrorista. El texto, aprobado este mi¨¦rcoles en Bruselas por el Colegio de Comisarios, aglutina una larga bater¨ªa de propuestas con el fin de dar una ¡°respuesta colectiva¡± ante un ¡°peligro real y presente¡± y salvaguardar as¨ª las ¡°sociedades plurales¡±, los ¡°valores comunes¡± y el ¡°estilo de vida europeo¡±, afirma el texto aprobado.
La nueva estrategia busca reforzar la cooperaci¨®n policial entre pa¨ªses, aprovechar las herramientas de inteligencia artificial y rastreo de datos para agilizar investigaciones y plantar cara al terrorismo en el mundo virtual, ese en el que ¡°la difusi¨®n de ideolog¨ªas radicales y de material de orientaci¨®n terrorista se acelera mediante el uso de la propaganda en l¨ªnea¡±. La medida estrella pretende contrarrestar esta radicalizaci¨®n dando la posibilidad de suprimir de Internet contenidos terroristas en menos de una hora, con la colaboraci¨®n de las plataformas y redes sociales. Esta propuesta se remonta a 2018, pero su regulaci¨®n se ha ido enquistando en el debate con el Parlamento Europeo, por las dudas que plantea el excesivo papel que podr¨ªa concederle a los pa¨ªses para solicitar a las compa?¨ªas tecnol¨®gicas que supriman contenidos. Y porque se adentra en ese terreno pantanoso en el que la seguridad choca con la privacidad y la libertad de expresi¨®n.
¡°Por supuesto que hay que proteger la privacidad, pero no debemos ser na¨ªf¡±, replica la comisaria europea de Interior, la sueca Ylva Johansson, en una entrevista realizada este martes. ¡°Tambi¨¦n tenemos que proteger la seguridad de las personas. Y eso significa que si queremos ir tras los terroristas, tenemos que estar en Internet. Es importante que encontremos a las comunidades que difunden mensajes de odio¡±.
La comisaria Johansson conf¨ªa en poder llegar a un acuerdo ¡°antes de Navidad¡± para que si un Estado pide a una plataforma de Internet que elimine un contenido terrorista, este desaparezca en menos de 60 minutos. ¡°Necesitamos poder eliminar este material r¨¢pidamente¡±, asegura. La regulaci¨®n se complementar¨¢ con la llamada Ley de Servicios Digitales, que exigir¨¢ a las compa?¨ªas actuar de forma responsable y a proporcionar a los usuarios la forma de denunciar contenidos.
Algunas organizaciones de defensa de derechos fundamentales han hecho o¨ªr sus quejas. A la Comisi¨®n Internacional de Juristas, que aglutina a jueces y abogados de diferentes pa¨ªses, le preocupa que se bordeen con la nueva regulaci¨®n algunos principios b¨¢sicos del Estado de derecho. ¡°Se corre el riesgo de una supresi¨®n inadecuada y exagerada de contenidos que socavar¨ªa la libertad de expresi¨®n y otros derechos en l¨ªnea¡±, protesta en un comunicado. Tambi¨¦n preocupa la posibilidad de que la nueva normativa permita a los gobiernos abrir puertas traseras a las comunicaciones encriptadas de servicios como WhatsApp, algo que la Comisi¨®n describe en el texto presentado como una b¨²squeda de ¡°soluciones jur¨ªdicas, operativas y t¨¦cnicas para el acceso legal¡± a estas comunicaciones.
La Comisi¨®n desmarca este nuevo pacto antiterrorista de la cruzada del presidente franc¨¦s, Emmanuel Macron, contra lo que este denomina ¡°separatismo islamista¡±. La propuesta ni siquiera lleva en su texto la palabra islam. Pero s¨ª se pretende actuar frente a las ra¨ªces del problema de la radicalizaci¨®n. Aunque la mayor¨ªa de medidas sociales en esta materia se anunciaron hace un par de semanas, con un plan de integraci¨®n de migrantes para frenar los cantos de sirena que ofrece el extremismo a los m¨¢s vulnerables, la agenda antiterrorista propone intensificar, por ejemplo, los programas en prisiones, uno de los grandes focos de contagio de ideas terroristas en el mundo f¨ªsico.
El margen de actuaci¨®n de la UE en el campo antiterrorista es limitado, ya que la mayor¨ªa de competencias recaen sobre los Veintisiete. A¨²n as¨ª quedan ¨¢reas en las que puede actuar. Para proteger el espacio Schengen, Bruselas propone ¡°reforzar¡± la seguridad en la frontera a trav¨¦s del llamado Sistema Europeo de Informaci¨®n y Autorizaci¨®n de Viajes (Etias, por sus siglas en ingl¨¦s), con el fin de chequear con unos d¨ªas de antelaci¨®n a los viajeros procedentes de pa¨ªses extracomunitarios a los que no se requiere visado. Tambi¨¦n busca actuar sobre el urbanismo de las ciudades, para promover espacios p¨²blicos seguros frente al terrorismo; y fomentar y financiar iniciativas tecnol¨®gicas que ayuden a identificar de forma r¨¢pida posibles amenazas en la calle.
La Comisi¨®n tambi¨¦n propone establecer una red de investigadores de movimientos financieros que involucre al Centro de Cr¨ªmenes Econ¨®micos y Financieros de Europol, la agencia policial europea, para poder tener acceso transfronterizo a la informaci¨®n bancaria en los distintos Estados miembros.
De hecho, la presentaci¨®n de la nueva agenda antiterrorista viene acompa?ada de un fortalecimiento del mandato de Europol, que le permita incrementar su papel en este tipo de casos transfronterizos en los que se mezclan tecnolog¨ªa y servicios de banca o de comunicaciones y los Estados encuentran un freno; y tambi¨¦n dando apoyo a las investigaciones de los pa¨ªses mediante el an¨¢lisis de voluminosos y complejos conjuntos de datos a trav¨¦s de herramientas de inteligencia artificial. La Comisi¨®n propone para ello un incremento de personal de 160 personas (en estos momentos tiene algo m¨¢s de 1.000) y presupuestario (unos 180 millones de euros adicionales), junto a un mayor escrutinio y supervisi¨®n de la agencia.
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