Putin acorrala a los opositores con una ley que permitir¨¢ etiquetarlos como ¡°agentes extranjeros¡±
El Kremlin impulsa varias iniciativas para sofocar la disidencia y limitar las manifestaciones con vistas a las legislativas de 2021


Con la popularidad del partido del Gobierno, Rusia Unida, bajo m¨ªnimos a 10 meses de unas elecciones legislativas cruciales y alertado por las protestas ciudadanas que calientan el Lejano Oriente ruso y parte del espacio postsovi¨¦tico, el Kremlin no est¨¢ dispuesto a dejar resquicios para la oposici¨®n. Varios proyectos de ley que han iniciado su andadura parlamentaria proponen endurecer las ya r¨ªgidas leyes electorales rusas y restringir m¨¢s el derecho de manifestaci¨®n. Aludiendo a la prevenci¨®n de ¡°injerencias exteriores¡±, buscan ampliar la infame etiqueta de ¡°agente extranjero¡±, asociada desde el estalinismo a la subversi¨®n y el espionaje, a candidatos electorales que reciban cualquier tipo de apoyo de fuera; lo que podr¨ªa alejarles de la pol¨ªtica. Las medidas, suficientemente abstractas para abarcar a un buen n¨²mero de personas, dar¨ªan m¨¢s herramientas a las autoridades para vaciar las listas de candidatos peligrosos y aspirantes independientes.
La ley rusa ya contempla desde 2012 declarar ¡°agente extranjero¡± a organizaciones no gubernamentales y de defensa de los derechos humanos que reciban financiaci¨®n desde el exterior. Una f¨®rmula que las entidades sociales llevan a?os denunciando como una manera de impedir su trabajo. En 2017, se incluy¨® tambi¨¦n a medios de comunicaci¨®n y hace un a?o a periodistas y blogueros. No es solo un s¨ªmbolo o una frase ¡ªbastante t¨®xica y muy relacionada con el concepto de ¡°enemigo del Estado¡± de los tiempos sovi¨¦ticos¡ª, los etiquetados as¨ª deben someterse a m¨¢s controles, registros y auditor¨ªas estatales.
La propuesta ahora es extender el t¨¦rmino a ¡°personas involucradas en actividades sociales o pol¨ªticas¡± que hayan recibido ¡°apoyo material u organizativo¡± del exterior, ¡°beneficios inmobiliarios¡±, e incluso abre la puerta a usarlo con personas que hayan asistido a un evento organizado o patrocinado desde fuera de Rusia o por alguien extranjero. Tambi¨¦n podr¨¢n ser declaradas ¡°agentes extranjeros¡± las personas que recopilan informaci¨®n sobre las actividades militares de Rusia y candidatos electorales afiliados o relacionados con una persona declarada ¡°agente extranjero¡±.
El prominente opositor Alex¨¦i Navalni, que se recupera en Alemania del envenenamiento sufrido este verano en Siberia del que acusa directamente al presidente Vlad¨ªmir Putin, suele ser vetado ya por otras y diversas circunstancias, como las condenas judiciales. Pero la nueva legislaci¨®n, sumada a la bater¨ªa de medidas que la Administraci¨®n usa habitualmente para bloquear a la disidencia, podr¨ªa poner muchas dificultades ahora tambi¨¦n a su equipo o a cualquiera relacionado ¡°directa o indirectamente¡± con sus iniciativas, cree la polit¨®loga Tatyana Stanovaya.
El Fondo Anticorrupci¨®n fundado por Navalni, que se dedica a divulgar esc¨¢ndalos de las ¨¦lites pol¨ªticas y econ¨®micas del pa¨ªs, ya recibi¨® la etiqueta de ¡°agente extranjero¡± en 2019. Ahora podr¨ªa usarse contra las personas relacionadas con su iniciativa Smart vote, dise?ada ese mismo a?o, para las elecciones locales de Mosc¨², que estudia y publica qu¨¦ candidatos registrados tienen m¨¢s posibilidades de ganar a Rusia Unida. La iniciativa ayud¨® este a?o a que candidatos independientes se hicieran un hueco en varias regiones de Siberia.
Adem¨¢s, si un candidato declarado ¡°agente extranjero¡± logra la aprobaci¨®n para ir en las listas, tendr¨¢ que llevar bien visible esa etiqueta en las papeletas, la propaganda electoral e incluso se propone que los medios que informen sobre ellos tengan que usarla. Algo que, dado las connotaciones negativas del t¨¦rmino podr¨ªa disuadir del voto. Ser ¡°agente extranjero¡± cerrar¨¢ tambi¨¦n la posibilidad de ocupar ciertos puestos de Gobierno, como en los municipales. ¡°Estamos ante un intento de ampliar el concepto de influencia exterior y el cat¨¢logo de condiciones propuestas es tan amplio que se podr¨ªa emplear casi con cualquiera. Es b¨¢sicamente un intento m¨¢s de prohibir una oposici¨®n liberal en Rusia¡±, remarca Stanovaya, colaboradora del Centro Carnegie de Mosc¨² y fundadora de la consultora R.Politik.

La abogada Liubov Sobol, aliada de Navalni, ya se prepara para postularse como independiente en las elecciones de la Duma estatal del pr¨®ximo septiembre. Lo intent¨® para los comicios locales de Mosc¨², el a?o pasado, pero recibi¨® el veto de la Administraci¨®n. Lleg¨® a ponerse en huelga de hambre para reclamar su derecho a concurrir, pero no lo logr¨®. Comenta que, pese a que sabe que para el a?o que viene ¡°todo ser¨¢n trabas¡±, est¨¢ preparada para luchar por un puesto en las listas. ¡°Estoy segura de que si a Navalni o a m¨ª se nos permitiera postularnos y se nos dieran las mismas oportunidades leg¨ªtimas que los candidatos en el poder tienen para hacer campa?a, ganar¨ªamos con una puntuaci¨®n aplastante. Putin y [el l¨ªder bielorruso Aleksandr] Lukashenko se ven obligados a recurrir a medidas represivas contra la disidencia porque entienden que disponen de pocas medidas para mantener el poder de otra forma¡±, dice.
El Kremlin y su entorno, se?alados precisamente por la injerencia en las elecciones presidenciales estadounidenses de 2016 y otras, son ahora quienes deslizan cada vez m¨¢s habitualmente en su discurso la idea de la amenaza de interferencia exterior en los pr¨®ximos comicios rusos. ¡°No es ning¨²n secreto que los Gobiernos extranjeros y las ONG asignan sumas impresionantes para apoyar cierta actividad pol¨ªtica en Rusia. De hecho, esta es una forma de injerencia grave en los asuntos internos¡±, ha dicho Dmitri Vyatkin, destacado parlamentario de Rusia Unida.
El trasfondo de todo es que el partido del Gobierno no parte de una buena situaci¨®n para las elecciones a la Duma estatal, se?ala Abbas Gallyamov, antiguo escritor de discursos para el Kremlin dedicado ahora al an¨¢lisis y consultor¨ªa pol¨ªtica. Durante m¨¢s de medio a?o, la calificaci¨®n de Rusia Unida ha fluctuado entre el 31% y el 34%. En agosto, vivi¨® su m¨ªnimo hist¨®rico con el 30,5%, seg¨²n la encuestadora estatal VCIOM. Y las perspectivas de crecimiento no son visibles, con una previsi¨®n de contracci¨®n del PIB del 6% para Rusia, seg¨²n el Banco Mundial, y los bolsillos de la ciudadan¨ªa rusa resentidos por la palpable ca¨ªda en los ingresos reales ¡ªm¨¢s acentuada a¨²n debido a la pandemia¡ª.
Con datos as¨ª, Rusia Unida se ver¨¢ en dificultades para mantener la supermayor¨ªa en el Parlamento. Esa fortificaci¨®n actual, unida a que la oposici¨®n que ocupa el resto de asientos ¡ªcom¨²nmente denominada ¡°oposici¨®n sist¨¦mica¡±¡ª acumula los votos del descontento pero luego apoya a Putin en los momentos determinantes, como el populista y ultranacionalista Partido Liberal Democr¨¢tico o los comunistas, le garantiza el control sobre la aprobaci¨®n de leyes.
La p¨¦rdida de apoyo de Rusia Unida no es nueva. La marca se ha vuelto de alguna manera algo venenosa y el verano pasado no pocos miembros del partido optaron por concurrir a las listas como independientes para alejarse de su imagen, pero eso no funcionar¨ªa para las elecciones legislativas. En otras ocasiones el presidente ruso, Vlad¨ªmir Putin ¡ªcuya popularidad, seg¨²n las encuestas, tambi¨¦n ha ca¨ªdo este a?o sin embargo¡ª tuvo que intervenir y reasociar su imagen al partido. Aunque aquella estrategia no hizo crecer el apoyo ni garantiz¨® una remontada sino que b¨¢sicamente detuvo la ca¨ªda, explica Abbas Gallyamov. Ahora, el plan es mantenerse y seguir vendiendo esa imagen de estabilidad. Y jugar con herramientas antiguas, como la habitual de alejar del espacio p¨²blico y los medios a la disidencia para evitar ofrecer la imagen de que est¨¢n surgiendo alternativas, y nuevas, como esta ampliaci¨®n de la etiqueta de ¡°agente extranjero¡± que puede poner m¨¢s palos en las ruedas de candidatos opositores.

Ese veto a la disidencia probablemente suceder¨¢. Y se desencadenar¨¢n protestas, adelanta el analista Gallyamov, como ya ocurri¨® en las elecciones locales de Mosc¨² el a?o pasado, que se rodearon de las mayores manifestaciones en casi una d¨¦cada para reclamar unas elecciones abiertas. Con los antecedentes de Bielorrusia, que vive protestas hist¨®ricas desde las elecciones presidenciales de agosto que Lukashenko reclama con el 80% de los votos pese a las denuncias de fraude, o Kirguist¨¢n, donde las movilizaciones que denunciaron la adulteraci¨®n de los comicios derribaron al Gobierno en octubre, el Kremlin quiere cubrir todas las bases. As¨ª, se han incluido en el paquete tambi¨¦n m¨¢s instrumentos para limitar las reuniones p¨²blicas y las manifestaciones, adem¨¢s de establecer m¨¢s reglas a los periodistas que las cubren.
La ciudadan¨ªa rusa suele sortear las estrictas reglas que obligan a obtener una autorizaci¨®n administrativa para manifestarse con f¨®rmulas creativas como los denominados piquetes solitarios, una protesta de una sola persona, que a menudo se hace por turnos y que puede desencadenar enormes colas para alzar una pancarta durante unos minutos. Un m¨¦todo cada vez m¨¢s popular (entre marzo y agosto se hicieron 774 piquetes solitarios en los que en realidad participaron miles de personas, seg¨²n la ONG Apology of Protest) que estar¨¢ tambi¨¦n muy restringido.
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