Donald Trump se pone el traje antiabortista
El republicano se convierte en el primer presidente estadounidense en participar de la ¡°Marcha por la vida¡±, una protesta en contra del derecho al aborto
Donald Trump, el hombre que a?os antes de llegar a la Casa Blanca se declaraba ¡°pro-elecci¨®n¡± (a favor del derecho al aborto),?al que investigan por pagos ilegales a dos mujeres para silenciar supuestas relaciones extramatrimoniales, -una de ellas una exactriz porno-, y el que un d¨ªa presumi¨® de su poder con la frase: "Cuando eres una estrella, ellas te dejan hacerles cualquier cosa. Agarrarlas por el co?o. Lo que sea", se ha convertido este viernes en el primer presidente estadounidense en participar en la ¡°Marcha por la Vida¡± de los antiabortistas. La maniobra del mandatario busca consolidar el apoyo de los evang¨¦licos de cara a las elecciones de noviembre. "Todos los que estamos aqu¨ª hoy comprendemos una verdad eterna: cada ni?o es un regalo precioso y sagrado de Dios", ha sostenido en el National Mall de Washington ante miles de familias, estudiantes, monjas y curas, pr¨¢cticamente todos blancos.
Los manifestantes dejaron claro que el evento convocado anualmente en protesta por la decisi¨®n del Tribunal Supremo conocida como Roe vs. Wade (1973), que despenaliz¨® el aborto, tambi¨¦n era un acto a favor de Trump: "Voto a favor de la vida primero", "Hagamos que los beb¨¦s no nacidos vuelvan a ser grandes" y ¡°Trump-Pence por la vida¡±, se le¨ªa en las consignas. El presidente no ha desperdiciado la oportunidad de inspirar a sus bases. ¡°Los dem¨®cratas abrazan posiciones radicales respecto al aborto desde hace d¨¦cadas¡±, ha afirmado. Para argumentar, ha mencionado la legislaci¨®n de Nueva York, afirmando falsamente que permite ¡°arrancar al beb¨¦ del vientre momentos antes del nacimiento¡±, ante el estupor de algunas de las madres que han dejado escapar un ¡°?Oh, Dios m¨ªo!¡±. Lo que permite la normativa es la posibilidad de abortar hasta la semana 24 de gestaci¨®n o m¨¢s adelante si el feto es inviable o la vida de la madre corre peligro. M¨¢s del 90% de los abortos se practican en el primer trimestre.
¡°Desde el primer d¨ªa en la Casa Blanca he tomado medidas para proteger a los no nacidos¡±, ha apuntado Trump entre los v¨ªtores de los manifestantes. Cuatro d¨ªas despu¨¦s de asumir el cargo firm¨® un decreto que proh¨ªbe a las ONG y proveedores sanitarios utilizar fondos del Gobierno estadounidense en el extranjero para asesor¨ªas a favor del aborto. Tambi¨¦n anul¨® una ley que obligaba a los empleadores a cubrir los m¨¦todos anticonceptivos de sus empleados y ha bloqueado parte de los fondos al T¨ªtulo X, un programa de planificaci¨®n familiar financiado federalmente destinado a las mujeres de bajos ingresos. A fines del a?o pasado cre¨® una oficina de libertad religiosa para manejar los casos de los proveedores de salud, como el aborto, para la que contrat¨® a Paula White, una famosa telepredicadora evang¨¦lica.
¡°Tambi¨¦n hemos incorporado a dos jueces conservadores en el Tribunal Supremo: Neil Gorsuch y Brett Kavanaugh¡±, ha recordado. Cuando ha mencionado a Kavanaugh, los manifestantes han aplaudido y gritado v¨ªtores de celebraci¨®n. El nombramiento del magistrado fue enormemente pol¨¦mico despu¨¦s de que una profesora universitaria lo acusara de haber intentado violarla tres d¨¦cadas atr¨¢s. Los dos magistrados culminaron el giro a la derecha del m¨¢ximo tribunal, que tiene la ¨²ltima palabra en temas como el aborto. En los ¨²ltimos a?os una serie de Estados conservadores ha promulgado leyes restrictivas del aborto -hasta pr¨¢cticamente prohibirlo- a la espera de que sus iniciativas, bloqueadas en tribunales menores, se resuelvan en la m¨¢s alta instancia judicial estadounidense.
El Supremo se pronunciar¨¢ sobre el primer caso relacionado con el aborto el pr¨®ximo junio. Los nueve magistrados revisar¨¢n la normativa aprobada en 2014 en Luisiana, que obliga a los m¨¦dicos que practican abortos a hacerlo en cl¨ªnicas que est¨¦n ubicadas a menos de 48 kil¨®metros de un hospital general, en el que el doctor debe tener autorizaci¨®n expresa y licencia para poder usar los quir¨®fanos. La medida puede entorpecer seriamente el acceso de las mujeres que quieran interrumpir su embarazo, ya que el Estado tiene una extensi¨®n de 134.000 kil¨®metros cuadrados. ¡°Vamos a pelear por los que no tienen voz y vamos a ganar, porque ustedes, como nosotros, sabemos ganar¡±, ha dicho el mandatario.
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