Los autoritarismos vuelven a marcar el paso en Centroam¨¦rica

Nayib Bukele apareci¨® sonriente frente a centenares de sus simpatizantes en un enorme escenario levantado junto al mar en la playa Mizata, localizada en las costas del Pac¨ªfico de El Salvador. Su entrada en escena fue espectacular, con la proyecci¨®n de luces l¨¢ser y videos que lo mostraban como un personaje de la realidad virtual. Cuando se marc¨® en una gigantesca pantalla la palabra ¡°El presidente¡±, Bukele sali¨® a escena vestido de blanco para hablar ante un auditorio embobado sobre el que es su nuevo gran proyecto: la construcci¨®n de una Ciudad del Bitcoin, primera en el mundo, que, seg¨²n su Gobierno convertir¨¢ a ese peque?o y atrasado pa¨ªs centroamericano en la Singapur de Am¨¦rica Latina. ¡°Invierta aqu¨ª y haga todo el dinero que quiera¡±, profetiz¨® el mandatario.

La comparaci¨®n con Singapur es un gui?o cuidadosamente elegido, que habla mucho de c¨®mo el presidente y su equipo de tecn¨®cratas ven la gobernanza de un pa¨ªs. Bukele aspira a impulsar el desarrollo econ¨®mico de El Salvador en detrimento del Estado de derecho, la democracia y las libertades civiles. Tal y como ha pasado con el tigre asi¨¢tico, una econom¨ªa con garra regida por un r¨¦gimen autoritario.

Debido a las medidas que ha tomado contra la liberta de expresi¨®n, los medios de comunicaci¨®n, programas contra la corrupci¨®n, voces cr¨ªticas y oeneg¨¦s, la comunidad internacional ha criticado duramente a Bukele, hasta el punto de que Washington ha decidido ¡°pausar¡± las relaciones con San Salvador. El lunes, cuando la encargada de negocios de Estados Unidos, Jean Manes, anunciaba que dejar¨¢ el pa¨ªs centroamericano esta semana debido a las que Washington considera decisiones antidemocr¨¢ticas de Bukele, la fiscal¨ªa controlada por el mandatario allanaba las sedes de seis oeneg¨¦s, varias de ellas relacionadas con el movimiento feminista.

El presidente salvadore?o se mofa abiertamente de las cr¨ªticas sobre su deriva autoritaria y en Twitter ¡ªsu red social preferida¡ª hasta ha dicho con sorna que es ¡°el dictador m¨¢s cool del mundo¡±. Una controvertida broma en una regi¨®n llena de heridas por su pasado sangriento, donde la democracia vive sus horas m¨¢s bajas y con varios gobernantes ¡ªDaniel Ortega, en Nicaragua; Juan Orlando Hern¨¢ndez, de Honduras; Alejandro Giammattei, en Guatemala y el mismo Bukele¡ª que toman medidas que recuerdan a las viejas dictaduras que gobernaron la regi¨®n. ¡°El retroceso democr¨¢tico en Centroam¨¦rica es es de enorme gravedad. Lo que estamos viendo en cada uno de los pa¨ªses es muy preocupante. Cada pa¨ªs, con excepci¨®n de Costa Rica, tiene una historia propia de deterioro democr¨¢tico, en la que no quiere que nadie se meta¡±, explica Kevin Casas, ex vicepresidente de Costa Rica y secretario general de IDEA ¡ªun organismo que promueve la democracia con el asesoramiento de l¨ªderes de varias partes del mundo. Los autoritarismos vuelven a marcar el paso en Centroam¨¦rica.

Guatemala: La justicia perseguida

Juan Francisco Sandoval ha sufrido en carne propia la persecuci¨®n de la justicia bajo el Gobierno del presidente Alejandro Giammattei. Sandoval fue fiscal anticorrupci¨®n de Guatemala, pero debido a sus investigaciones, la fiscal general, Consuelo Porras, lo destituy¨® del cargo. ?l afirma que se trata de un despido ilegal, hecho para proteger a ¡°amigos¡± del poder potencialmente afectados por las investigaciones que ¨¦l encabezaba en la Fiscal¨ªa Especial Contra la Impunidad (FECI). Sandoval tuvo que dejar Guatemala rumbo a El Salvador casi de manera clandestina el 23 de julio, en un coche diplom¨¢tico, escoltado por el procurador de derechos humanos y el embajador de Suecia. ¡°Van a tratar de destruirme moralmente, aunque ya estoy muy afectado. La cuesti¨®n es casi darle la muerte civil a uno, desprestigiarlo, criminalizarlo. No ha sido suficiente la expulsi¨®n sino que quieren mi detenci¨®n¡±, dijo Sandoval en una entrevista con EL PA?S desde Washington, donde se ha refugiado junto a otros a cuatro juristas ¡ªjueces y fiscales¡ª reconocidos a nivel internacional por su lucha anticorrupci¨®n, que tuvieron que huir de Guatemala por presiones y amenazas. En Washington buscan protecci¨®n tambi¨¦n la exfiscal general Thelma Aldana, la exmagistrada de la Corte de Apelaciones Claudia Escobar, el exfiscal de la FECI Andrei Gonz¨¢lez y la magistrada electa de la Corte de Constitucionalidad (CC) Gloria Porras.

La persecuci¨®n de estos juristas preocupa a Estados Unidos, que a finales de julio decidi¨® congelar ¡°temporalmente¡± la cooperaci¨®n con el Ministerio P¨²blico de Guatemala. Washington ya hab¨ªa expresado su malestar ante la destituci¨®n de Sandoval, a quien las autoridades estadounidenses hab¨ªan elogiado su papel en la lucha contra la corrupci¨®n, un mal end¨¦mico dentro del sistema pol¨ªtico de Guatemala. La portavoz adjunta del Departamento de Estado, Jalina Porter, ha explicado que, con la salida de Sandoval, su pa¨ªs ha ¡°perdido la confianza en la fiscal general [Mar¨ªa Consuelo Porras] y en sus decisiones e intenciones de cooperar con el Gobierno de Estados Unidos y luchar contra la corrupci¨®n de buena fe¡±.

Porter record¨® las recientes visitas a Guatemala de altos funcionarios estadounidenses, entre ellos la vicepresidenta Kamala Harris, como iniciativas para estrechar las relaciones entre ambos pa¨ªses. Durante su visita a Guatemala a inicios de junio, Harris, afirm¨® que la postura de la Administraci¨®n Biden es clara sobre la corrupci¨®n: ¡°Hay que erradicar la corrupci¨®n de ra¨ªz¡± para que los recursos no se desv¨ªen de las personas que lo necesitan. Su Gobierno ha vinculado los esfuerzos para tratar de frenar la migraci¨®n irregular de centroamericanos, uno de los principales problemas que ha tenido que enfrentar el Gobierno de Biden hasta ahora, a la lucha anticorrupci¨®n. Esa relaci¨®n sobre la corrupci¨®n es la baza que juega la Administraci¨®n Giammattei para mantener contenta a la potencia norteamericana, dado que su Gobierno ha creado una pol¨ªtica de contenci¨®n de la migraci¨®n que beneficia a Washington.

¡°Guatemala ha intentado presentarse como el socio m¨¢s confiable de Estados Unidos y hasta ahora ha logrado mantenerse en bajo perfil, a pesar de las medidas que ha tomado contra la prensa y la obstaculizaci¨®n de las investigaciones contra la corrupci¨®n¡±, explica Tiziano Breda, analista para Centroam¨¦rica del Crisis Group, un organismo centrado en la resoluci¨®n de conflictos. Breda hace referencia a la decisi¨®n de la fiscal¨ªa de Guatemala de investigar a El Peri¨®dico, uno de los referentes del periodismo de investigaci¨®n en el pa¨ªs, a su director, Jos¨¦ Rub¨¦n Zamora, y al periodista independiente Juan Luis Font. ¡°Son hechos que han perjudicado al Estado de derecho y la separaci¨®n de poderes en Guatemala, pero mientras el Gobierno guatemalteco responde a los intereses de Estados Unidos, principalmente en el tema migratorio, igual Washington no har¨¢ mucha presi¨®n¡±, agrega Breda.

Honduras: El presidente y el ¡®narco¡¯

Los hondure?os asisten a las urnas este domingo para elegir a un nuevo presidente, tras el mandato del controvertido Juan Orlando Hern¨¢ndez, quien mantuvo el poder en 2018 bajo fuertes protestas que se desarrollaron en las principales ciudades del pa¨ªs. Sobre Hern¨¢ndez pesan fuertes acusaciones de un fiscal de Nueva York, que lo se?ala de haber recibido en 2013 sobornos de narcotraficantes para financiar su primera campa?a presidencial. En las acusaciones se afirma que Hern¨¢ndez ha dado protecci¨®n a l¨ªderes ¡°narcos¡± e incluso publican una supuesta cita del mandatario en la que afirma que quer¨ªa ¡°meter la droga en las narices de los gringos inundando los Estados Unidos de coca¨ªna¡±.

El juez Kevin Castel, de la corte federal de Manhattan, dict¨® a finales de marzo una sentencia de cadena perpetua m¨¢s otros treinta a?os de c¨¢rcel contra Juan Antonio Tony Hern¨¢ndez, hermano del presidente. En octubre de 2019, un jurado popular de Nueva York hall¨® culpable a Tony Hern¨¢ndez de cuatro cargos que present¨® el Departamento de Justicia de Estados Unidos relacionados con narcotr¨¢fico, incluyendo el env¨ªo de toneladas de coca¨ªna a territorio estadounidense. Desde que fue declarado culpable su hermano, el presidente ha sido fuertemente cuestionado en Honduras y a nivel internacional y las acusaciones presentadas por los fiscales en Nueva York aumentan las dudas del compromiso del mandatario con la lucha contra el crimen organizado.

Uno de los principales cr¨ªticos de Hern¨¢ndez es el presidente Bukele, quien abiertamente ha hablado sobre las acusaciones de v¨ªnculos con el narco del hondure?o. Hern¨¢ndez ha buscado apoyo al sur de la frontera, con el r¨¦gimen de Daniel Ortega, con quien se reuni¨® sorpresivamente a finales de octubre para firmar decretos para delimitar las fronteras de ambos pa¨ªses en el Mar Caribe y Golfo de Fonseca. Esa nueva alianza ha generado resquemores en la regi¨®n y hay analistas que la ven como una posible salida de Hern¨¢ndez a Nicaragua en caso de que un nuevo Gobierno en Honduras inicie una investigaci¨®n en su contra. ¡°Hern¨¢ndez busca mantener varios escenarios abiertos, incluso antes de las elecciones, y por lo tanto esta alianza de facto con Nicaragua alimenta tensiones en el Golfo de Fonseca con El Salvador. Podr¨ªa ser parte de un juego para crear incertidumbre y dejar la puerta abierta para una especie de de crisis que podr¨ªa desviar la atenci¨®n. Aunque El Salvador no ha ca¨ªdo en esta trampa¡±, explica Breda.

El Salvador: Bukele, ¡°el CEO de El Salvador¡±

En su cuenta de Twitter el presidente Nayib Bukele se ha autonombrado como el CEO de El Salvador, lo que da una idea de c¨®mo el mandatario espera priorizar la econom¨ªa en detrimento de la democracia. De hecho, Bukele ya demostr¨® su desprecio a las instituciones a inicios de febrero de 2020, a solo unos meses de haber asumido la presidencia, cuando irrumpi¨®, arropado por oficiales de la polic¨ªa y militares, en la Asamblea Legislativa, se sent¨® en la silla del presidente parlamentario y orden¨® el inicio de una sesi¨®n, amparado, dijo, por un derecho divino. Tras hacer una oraci¨®n dej¨® la c¨¢mara para saludar a centenares de sus seguidores. El mandatario llam¨® a una insurrecci¨®n popular, mientras la oposici¨®n exigi¨® la intervenci¨®n de la Organizaci¨®n de Estados Americanos (OEA) para frenar lo que han considerado un ¡°autogolpe de Estado¡±. Tras esa maniobra que cre¨® una crisis institucional, Bukele ha aprovechado el poder que los salvadore?os le han dado para golpear al sistema de justicia, con la destituci¨®n de magistrados de la Sala Constitucional de la Corte y su sustituci¨®n por jueces leales. Adem¨¢s, ha intentado callar a las voces cr¨ªticas con la persecuci¨®n contra medios independientes, principalmente la revista El Faro, a la que la fiscal¨ªa le ha abierto varias investigaciones. La misma fiscal¨ªa recientemente ha ordenado el allanamiento de las sedes de seis oeneg¨¦s, lo que ha generado preocupaci¨®n entre los socios extranjeros de El Salvador, principalmente Estados Unidos.

¡°Todos conocemos que hay una especie de manual del nuevo aut¨®crata que se ha aplicado en todas las regiones del mundo. Se ha aplicado en Turqu¨ªa, en Hungr¨ªa y se est¨¢ aplicando en este momento en El Salvador y ese manual empieza por la persecuci¨®n contra los jueces independientes, contra la prensa independiente, por el intento de sofocar toda forma de oposici¨®n a la voluntad presidencial¡±, explica Kevin Casas. ¡°Me llama la atenci¨®n que el presidente Bukele parece tener una opini¨®n de s¨ª mismo como un tipo muy ingenioso e innovador, pero no tiene nada de ingenioso ni de innovador, porque est¨¢ siguiendo un manual aplicado en much¨ªsimos pa¨ªses. La deriva autoritaria del presidente es enteramente predecible¡±, agrega Casas.

Nicaragua: El comandante lo controla todo

El pa¨ªs de Centroam¨¦rica donde la democracia ha sufrido su peor deterioro es Nicaragua, donde el presidente Daniel Ortega, tras imponerse en unas elecciones seriamente cuestionadas, ha lanzado una dura represi¨®n contra las voces cr¨ªticas. Tras apresar a decenas de opositores, incluyendo siete candidatos a la presidencia por la oposici¨®n, Ortega ha decidido sacar al pa¨ªs de la OEA, que en una resoluci¨®n hist¨®rica desconoci¨® con una mayor¨ªa de votos de 25 pa¨ªses los resultados electorales. De esta manera Ortega a¨ªsla a su pa¨ªs y demuestra que no est¨¢ dispuesto a una negociaci¨®n que termine en un proceso electoral justo. El mandatario regir¨¢ el pa¨ªs centroamericano por cinco a?os m¨¢s con mano de hierro y un poder compartido con su esposa y vicepresidenta, Rosario Murillo, y sus hijos como asesores m¨¢s cercanos. Se trata de un sistema muy parecido a la dinast¨ªa somocista que Ortega ayud¨® a derrocar en 1979.

¡°Lo que estamos viendo en Centroam¨¦rica es un retroceso tr¨¢gico¡±, argumenta Casas. ¡°El proceso de consolidaci¨®n democr¨¢tica en la regi¨®n ha sido muy fr¨¢gil. La regi¨®n ha avanzado bastante bien en el aspecto electoral y se ha mostrado capaz de convertir a las elecciones en la ¨²nica v¨ªa leg¨ªtima para acceder al poder, pero no ha avanzado en otros aspectos claves de la democracia como la construcci¨®n del Estado de derecho y la capacidad de tener instituciones capaces de resolverle problemas a la gente. Entonces, en una situaci¨®n de crisis como la que estamos viviendo en este momento, la disposici¨®n de la poblaci¨®n es m¨¢s abierta a escuchar los cantos de sirena de la autoritarismo¡±, concluye el analista.

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