Espa?a tendr¨¢ un papel clave en la estrategia europea frente a un corte de suministro de gas ruso
Los puertos cuentan con capacidad para almacenar combustible transportado por barco desde EE UU, Qatar y otros grandes productores
Espa?a es uno de los pa¨ªses europeos con menor capacidad de producci¨®n de gas natural: lo que extrae del subsuelo apenas alcanza para cubrir el 0,4% de su consumo. Sin embargo, Bruselas ¡ªque detallar¨¢ la semana que viene su plan de contingencia¡ª ve en la Pen¨ªnsula un punto clave para el suministro del resto de pa¨ªses de la Uni¨®n en caso de que la escalada b¨¦lica en torno a Ucrania pase a mayores y cortocircuite el cauce m¨¢s usado para el suministro del Viejo Continente: los gasoductos que traen este combustible desde Rusia, el segundo productor mundial.
La respuesta a por qu¨¦ Espa?a es tan fundamental a ojos de la Comisi¨®n est¨¢ en su notable capacidad de recepci¨®n y regasificaci¨®n del combustible que, en el escenario m¨¢s extremo, suministrar¨ªan por barco de Estados Unidos ¡ªprimer productor mundial y pieza clave en el engranaje de emergencia que est¨¢ organizando el Ejecutivo comunitario¡ª y Qatar para evitar una crisis energ¨¦tica de grandes proporciones en la UE. Tambi¨¦n en su experiencia previa como importador, en los ¨²ltimos a?os, de gas natural licuado (GNL) de pa¨ªses tan diversos como Trinidad y Tobago, Guinea Ecuatorial o Argentina, lo que ha permitido alumbrar que es clave en un periodo de m¨¢xima tensi¨®n como la actual.
La operaci¨®n ser¨ªa m¨¢s o menos como sigue: una gran flota de metaneros llegar¨ªa a los puertos peninsulares procedente de estos dos pa¨ªses y de otros grandes exportadores como Argelia ¡ªque tambi¨¦n manda gas por tubo¡ª o Nigeria. Los buques descargar¨ªan el gas para ser posteriormente reexportado a otros pa¨ªses del entorno como Francia o Alemania. Seg¨²n la media docena de fuentes consultadas, el concurso de Espa?a en la operaci¨®n podr¨ªa ayudar a paliar parcialmente ¡ªmuy parcialmente¡ª el golpe. Pero ser¨ªa a todas luces insuficiente para cubrir ¨ªntegramente el agujero que dejar¨ªa el gigante euroasi¨¢tico, que hoy suministra el 40% del gas que consume Europa y casi la totalidad del que requieren los pa¨ªses del centro y el este de la Uni¨®n.
¡°Estamos hablando de otro orden de magnitud¡±, apunta el economista Miguel ?ngel Lasheras, al que respalda una s¨®lida trayectoria en el sector gasista. ¡°Imagino que es una forma de mandar una se?al de amenaza a Rusia. Pero es poco cre¨ªble, al menos a corto plazo. M¨¢s a¨²n cuando la propia Comisi¨®n Europea nunca le ha dado mucha importancia a las conexiones de gas entre Espa?a y el resto del continente, que no ha considerado ni estrat¨¦gicas ni prioritarias¡±, critica.
La pen¨ªnsula Ib¨¦rica cuenta con siete puertos con capacidad de regasificaci¨®n ¡ªseis en Espa?a y uno m¨¢s en Portugal¡ª que est¨¢n estrat¨¦gicamente distribuidos: tres en la costa mediterr¨¢nea y otros tres en la atl¨¢ntica. Es mucho para un pa¨ªs de su tama?o: m¨¢s del doble, por ejemplo, que los dos que le van a la zaga en Europa, Francia e Italia. Los seis puertos espa?oles cuentan con sus respectivas plantas de almacenamiento y regasificaci¨®n con capacidad ociosa suficiente como para procesar y reenviar a otros pa¨ªses del entorno una cantidad significativa de gas. Toda una rareza en un mercado, el europeo, que en los ¨²ltimos meses vive una situaci¨®n de tensi¨®n permanente.
Sin embargo, las d¨¦biles interconexiones con Francia ¡ªdos tubos de escasa capacidad para los est¨¢ndares de los gasoductos modernos, ubicados en Ir¨²n (Pa¨ªs Vasco) y Larrau (Navarra)¡ª suponen un importante ¡°cuello de botella¡± ¡ªen palabras de Georg Zachmann, del centro de estudios bruselense Bruegel¡ª que limita la cantidad de gas que se podr¨ªa reexportar al resto del continente. Lo que podr¨ªa transportar Espa?a por tubo es, por tanto, apenas una gota en un oc¨¦ano de consumo europeo.
¡°La capacidad de Espa?a es grande y podr¨ªa ser de ayuda en una situaci¨®n de emergencia como la que se plantea, pero la interconexi¨®n es la que es¡±, explica Gonzalo Escribano, director del Programa Energ¨ªa y Clima del Real Instituto Elcano. Con todo, este experto ¡ªcomo pr¨¢cticamente todas las fuentes consultadas¡ª descarta el escenario m¨¢s extremo y cree que Rusia, incluso si llegase a producirse una confrontaci¨®n b¨¦lica, cumplir¨¢ sus contratos de suministro. En gran medida, porque supone una fuente de financiaci¨®n y de divisas de la que no puede prescindir en condiciones normales y menos a¨²n en un escenario de guerra abierta.
Un ¡°portaaviones¡± del gas para el resto de Europa
La segunda opci¨®n ser¨ªa que Espa?a hiciese las veces de ¡°portaaviones¡± del gas para el resto de socios europeos, en palabras de una voz destacada del sector gas¨ªstico. Dada su posici¨®n geogr¨¢fica ventajosa ¡ªm¨¢s cercana a Am¨¦rica y a los principales exportadores africanos¡ª y su capacidad de almacenamiento en puerto, podr¨ªa recibir gas por barco y guardarlo en sus instalaciones antes de distribuirlo, de nuevo por mar, al resto de pa¨ªses vecinos.
¡°La experiencia del pasado nos indica que, efectivamente, el sistema ib¨¦rico tiene capacidad para reexportar gas natural¡±, apunta Jorge Fern¨¢ndez, coordinador del Laboratorio de Energ¨ªa del Instituto Vasco de la Competitividad, adscrito a la Universidad de Deusto, que recuerda que en 2014 se lleg¨® a almacenar y poner de nuevo en el mercado un volumen respetable. En aquella ocasi¨®n, con Asia como destino mayoritario. ¡°Hist¨®ricamente, los tanques de gas licuado de los puertos espa?oles han tenido una tasa de utilizaci¨®n relativamente baja y sigue habiendo mucha capacidad de almacenamiento¡±, a?ade.
Esta operaci¨®n convertir¨ªa a la Pen¨ªnsula en un hub en el que se ir¨ªa guardando una cantidad razonable de combustible ¡ªaunque, de nuevo, peque?a respecto a las necesidades totales del continente¡ª ya en suelo comunitario. Pero tiene una gran pega: el coste. ¡°Ser¨ªa car¨ªsimo y, adem¨¢s, el resto de Europa no est¨¢ precisamente sobrada de plantas de regasificaci¨®n¡±, apostilla Escribano. ¡°Los agentes privados no tendr¨ªan ning¨²n incentivo econ¨®mico a hacerlo, as¨ª que habr¨ªa que cubrir ese coste de alguna manera¡±, agrega Fern¨¢ndez. ¡°Ser¨ªa posible, s¨ª, pero tambi¨¦n muy ineficiente. Adem¨¢s, ?qu¨¦ sentido tendr¨ªa dejarlo aqu¨ª y no llevarlo directamente a destino? Puede que se haga puntualmente, pero no le veo mucho sentido¡±, apunta un directivo del sector bajo condici¨®n de anonimato.
La tercera alternativa, a¨²n m¨¢s compleja, pasar¨ªa por utilizar las centrales de ciclo combinado ¡ªque tambi¨¦n est¨¢n lejos de operar a pleno rendimiento¡ª para quemar el gas importado de EE UU o Qatar y obtener electricidad. Pero, de nuevo, la gran barrera es la interconexi¨®n con el resto del continente: el cable actual que une Espa?a y Francia dista mucho de tener la capacidad necesaria para transportar toda la energ¨ªa que se requerir¨ªa. ¡°Adem¨¢s, la mayor parte del gas que se est¨¢ consumiendo en el resto de Europa es para calefacci¨®n e industria¡±, recuerda Lasheras. ¡°Ninguna de las alternativas servir¨ªa para reemplazar todo el gas que se importa de Rusia. Otra cosa ser¨ªa que la UE se tomase en serio el tema de las interconexiones para romper esa dependencia energ¨¦tica. Pero ser¨ªa cuesti¨®n de muchos a?os, no de unos meses¡±.
Relativa relajaci¨®n de precios
Además del compromiso estadounidense, con sus vastos recursos de gas de lutita, Europa cuenta con otra baza a su favor para garantizar el suministro en los próximos meses incluso si Rusia cierra el grifo completo: la relativa distensión de los mercados gasísticos globales en las últimas semanas. Tras un periodo de altísimo voltaje —en el que los precios se han llegado a triplicar— y a poco más de mes y medio vista del final del invierno, el aumento abrupto de la demanda en varios países asiáticos ha desaparecido tras el acopio acometido durante el otoño y la primera parte del invierno. Y la competencia por los metaneros es mucho menor que unas semanas atrás. Aunque los precios actuales siguen siendo muy altos, sin parangón en perspectiva histórica y disparatados respecto a solo un año atrás, empiezan a dar las primeras señales de relajación. "Las reservas están en niveles más bajos que otros años, pero creo que dará para que Europa pase lo que resta de invierno", resumen un directivo del sector. "En España lo doy por garantizado".
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.