Margaret MacMillan: ¡°Putin ha ca¨ªdo en la trampa de creer a los que le daban la raz¨®n¡±
La eminente historiadora canadiense considera que la paz que ponga fin a la guerra actual debe diferenciar entre el pueblo y el Gobierno de Mosc¨², y acometer una reconstrucci¨®n de Ucrania para evitar la inestabilidad
Profesora em¨¦rita de las universidades de Toronto y de Oxford, la historiadora Margaret MacMillan (Toronto, 78 a?os) ha centrado sus investigaciones en las relaciones internacionales de los siglos XIX y XX, con un foco especial en la I Guerra Mundial y en el inestable acuerdo que puso fin a aquel conflicto. A ese periodo dedic¨® 1914. De la paz a la guerra (Turner) y Par¨ªs, 1919 (Tusquets), y m¨¢s recientemente ha defendido la importancia del estudio de los conflictos armados como clave para entender nuestras sociedades en La guerra. C¨®mo nos han marcado los conflictos (Turner). Desde su domicilio en Canad¨¢, MacMillan habla por tel¨¦fono sobre el conflicto en Ucrania, lo que ella llama ¡°la guerra de Putin¡±, en alusi¨®n al presidente ruso.
Pregunta. ?Qu¨¦ similitudes advierte entre lo que ocurre en Ucrania y otros conflictos del pasado europeo?
Respuesta. Todas las guerras son actos organizados de violencia, y esta es un acto de invasi¨®n provocada por una de las partes. En la I Guerra Mundial, Austria-Hungr¨ªa trat¨® de invadir Serbia, mientras que Alemania entr¨® en B¨¦lgica y Luxemburgo; tambi¨¦n la II Guerra Mundial empez¨® con la invasi¨®n alemana de Polonia. Como ocurre hoy en Ucrania, la resistencia militar y el combate con fuerzas irregulares fue la respuesta cuando Alemania entr¨® en Rusia en 1941. Y, como pas¨® entonces, los invasores recurren a la brutalidad contra los civiles.
P. Se est¨¢n tratando de documentar las atrocidades para juzgar esos cr¨ªmenes. ?Ser¨¢ posible?
R. Es muy importante que quede registro de esa brutalidad, aunque ser¨¢ muy dif¨ªcil, si no imposible, llevar al banquillo a los responsables. Dejar constancia de los cr¨ªmenes de guerra es fundamental, porque hay que tratar de proteger a los civiles.
P. En su ¨²ltimo libro se refer¨ªa a esa larga paz que dominaba en gran medida las ¨²ltimas d¨¦cadas, y tambi¨¦n alud¨ªa a los estudios que apuntan a que cada vez habr¨¢ menos conflictos armados, pero con m¨¢s bajas. ?Nada de esto se sostiene ya?
R. Esa larga paz no ha sido para todo el mundo, afectaba a Europa, exceptuando los Balcanes. Ahora nos estamos dando cuenta de que la guerra no es una cosa que le pasa a otra gente, sigue aqu¨ª, y puede ocurrir en esta zona del mundo. Lo de Ucrania ha sido una agresi¨®n que no respond¨ªa a ninguna provocaci¨®n, y las excusas endebles de Rusia, sobre la desnazificaci¨®n y el r¨¦gimen de drogadictos en Kiev, cada vez son m¨¢s demenciales. En cuanto al n¨²mero de conflictos, no creo que veamos grandes guerras, como un choque entre China y Estados Unidos; ser¨¢n de menor escala. Con respecto a las bajas, las armas de precisi¨®n de las que tanto se habla son muy potentes y hemos visto que Rusia las ha usado de forma indiscriminada en Siria, Georgia o Chechenia contra objetivos civiles. Creo que veremos m¨¢s de esas t¨¢cticas.
P. ?Por qu¨¦ se refiere al conflicto actual como ¡°la guerra de Putin¡±?
R. Es su guerra, aunque ¨¦l sea producto de su sociedad. ?l, y nadie m¨¢s, ha tomado las principales decisiones, y sigue tom¨¢ndolas. Aunque cuente con apoyos internos, [Vlad¨ªmir] Putin ha lanzado esta guerra porque piensa que Ucrania es un Estado ileg¨ªtimo. Adem¨¢s, le mueven motivos econ¨®micos, ya que ese pa¨ªs es muy rico agr¨ªcolamente y cuenta con una importante industria.
P. ?Es tambi¨¦n una guerra contra Occidente?
R. Putin era un joven miembro de la KGB cuando cay¨® la URSS, y aquello lo pill¨® en Alemania. Ha dicho que la ca¨ªda del Muro fue la cat¨¢strofe geopol¨ªtica m¨¢s importante del siglo XX. Le fue bien en la nueva Rusia, pero tiene un gran resentimiento y ve a la Uni¨®n Europea como el enemigo; no soportaba que Ucrania mirase al Oeste y no al Este, y piensa que deber¨ªa ser parte de Rusia. Es importante conocer su historia y su pensamiento para entender lo que est¨¢ pasando.
P. La historia parece obsesionar a Putin, as¨ª como el recuerdo de la brutalidad de la II Guerra Mundial ha marcado a Rusia, ?no?
R. El Gobierno de Putin ha convertido esa guerra en el principal nervio patri¨®tico, pero cabe preguntarse cu¨¢n militarizada est¨¢ realmente esa sociedad. Aunque hay servicio militar obligatorio, el n¨²mero de suicidios entre los reclutas parece ser alto, y no est¨¢ clara cu¨¢l era la postura de la opini¨®n p¨²blica antes de la guerra. Van quedando menos de quienes vivieron la II Guerra Mundial, y, a juzgar por las prebendas que ofrece el Ej¨¦rcito, no parece que haya una avalancha de gente dispuesta a alistarse.
P. ?Hasta qu¨¦ punto la expansi¨®n de la OTAN ha sido la semilla del conflicto?
R. La OTAN es el enemigo para Putin, como lo es la UE. Ucrania ha sido un pa¨ªs mucho m¨¢s abierto que Rusia y esto ha sido visto como una amenaza. Pero eso que dicen los rusos de que les dijeron que la Alianza Atl¨¢ntica nunca se ampliar¨ªa fue una promesa que nunca se hizo; seg¨²n parece, fue un comentario de un diplom¨¢tico estadounidense en una reuni¨®n. La expansi¨®n no fue inconsciente. Polonia, la Rep¨²blica Checa y Hungr¨ªa desesperadamente ped¨ªan integrarse en la OTAN, porque se sent¨ªan muy vulnerables ante Rusia. Nada de esto es excusa para lo que Rusia est¨¢ haciendo hoy.
P. ?Cu¨¢l es el mayor error que rodea este conflicto?
R. Como les ocurre a muchos aut¨®cratas, Putin ha ca¨ªdo en la trampa de creer a los que le daban la raz¨®n y dec¨ªan que los ucranios aceptar¨ªan la invasi¨®n. Se ha visto que los soldados rusos llevaban los uniformes de desfile en sus bolsas, pensaban que ser¨ªa una cosa r¨¢pida, sin apenas resistencia, que ser¨ªan bienvenidos. Cabe preguntarse por el trabajo de la inteligencia rusa: ?no sab¨ªan de los campos de entrenamiento de los ucranios, de su determinaci¨®n, y de c¨®mo se preparaban para defenderse?
P. ?Un fallo garrafal de c¨¢lculo?
R. No tuvieron en cuenta lo que Clausewitz llam¨® ¡°fricci¨®n¡± y los anglosajones llaman la ley de Murphy: eso de que todo lo que puede ir mal, ir¨¢ mal. Y luego se ha visto que su log¨ªstica es tremenda, usaban camiones civiles, estaban mal preparados, no pensaron en la resistencia, y Ucrania ha demostrado tener unas fuerzas muy efectivas.
P. ?D¨®nde deja eso ahora a Putin?
R. Ha puesto todo su prestigio en juego con la campa?a de Ucrania y esa idea rid¨ªcula de reconstruir el imperio. Est¨¢ sufriendo una humillaci¨®n por la resistencia y, ¨²ltimamente, a¨²n m¨¢s con el hundimiento del Moskv¨¢. Pero el 9 de mayo se celebra el Desfile de la Victoria, y ha dicho que seguir¨¢ adelante con esa celebraci¨®n, as¨ª que necesita una victoria de alg¨²n tipo. Las pr¨®ximas semanas son muy peligrosas, causar¨¢ mucha m¨¢s destrucci¨®n. Y en el desfile no s¨¦ qu¨¦ mostrar¨¢, porque los tanques y aviones est¨¢n en Ucrania.
P. ?Qu¨¦ opina de las sanciones impuestas a Rusia por Occidente?
R. Se ha demostrado que es posible hacerlo de manera r¨¢pida y que se puede castigar a los bancos y rastrear las fortunas de los oligarcas. Tambi¨¦n queda claro que la dependencia energ¨¦tica puede ser usada como un arma, porque el dinero sigue llegando a Rusia por su gas y su petr¨®leo, y hay que cortar esto tan pronto como se pueda.
P. ?Saldr¨¢ la UE reforzada de esta guerra o la presi¨®n por asuntos como el corte del gas y el petr¨®leo rusos agrandar¨¢ las grietas?
R. La UE puede reforzarse, pero mucho de esto depende de qu¨¦ pase tras las elecciones presidenciales francesas. En el caso de Hungr¨ªa, es un pa¨ªs peque?o que ha recibido mucho dinero de Europa y desde Bruselas deben ser estrictos.
P. ?Qu¨¦ deber¨ªa contemplar el acuerdo de paz que ponga fin a este conflicto?
R. San Agust¨ªn dijo aquello de ¡°aun con la guerra se busca la paz¡±, hay que pensar en ella, no solo en la victoria. Ser¨¢ fundamental marcar una distinci¨®n entre el pueblo ruso y el Gobierno ruso, aunque se intente buscar castigo por los cr¨ªmenes cometidos. Habr¨¢ que tratar de integrar en la comunidad internacional a la poblaci¨®n rusa, porque un d¨ªa, m¨¢s tarde o m¨¢s temprano, Putin ya no estar¨¢. Otro objetivo fundamental de la paz deber¨¢ ser la reconstrucci¨®n de Ucrania mediante una especie de Plan Marshall, porque si no, ser¨¢ inestable. Y la OTAN debe dejar muy claro que no aceptar¨¢ futuros ataques de Rusia que desestabilicen Ucrania u otros pa¨ªses de la zona. T¨¢cito ya dijo que si quieres paz, prepara la guerra.
P. En su ¨²ltimo libro escribe que las guerras ocasionan tambi¨¦n aspectos positivos. ?Y esta?
R. Hay muy poco positivo, pero ha revitalizado y dotado de una nueva relevancia a la OTAN. Tambi¨¦n habr¨¢ que pensar c¨®mo mejorar el orden internacional y sus instituciones para prevenir los conflictos armados, y eso puede traer algo bueno.
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