Dinamarca da un abrumador respaldo a su integraci¨®n en la pol¨ªtica de defensa de la UE

Dinamarca renunciar¨¢ a la cl¨¢usula de exclusi¨®n voluntaria que la ha mantenido al margen de la pol¨ªtica europea de defensa durante 30 a?os. La poblaci¨®n danesa vot¨® este mi¨¦rcoles en un refer¨¦ndum a favor de sumarse a las estructuras y proyectos comunitarios de ¨¢mbito militar. Con el escrutinio completado, el s¨ª gan¨® con el 66,9% de los votos, m¨¢s del doble que los del no, una brecha mayor que la que anticipaban las ¨²ltimas encuestas. La opci¨®n a favor fue la mayoritaria en todas las circunscripciones, lo que supone un resultado contundente en un pa¨ªs que tradicionalmente se ha opuesto a una mayor integraci¨®n con la Uni¨®n Europea. La consulta se convoc¨® en marzo, dos semanas despu¨¦s del inicio de la invasi¨®n rusa de Ucrania. La decisi¨®n de Copenhague se produce despu¨¦s que Finlandia y Suecia desafiaran la amenaza del Kremlin al iniciar el proceso de adhesi¨®n a la OTAN.

La excepci¨®n danesa en la pol¨ªtica com¨²n de seguridad y defensa de la UE se acord¨® en 1992 entre Copenhague y Bruselas. Unos meses antes, el resultado de un plebiscito celebrado en Dinamarca hab¨ªa bloqueado el proceso de ratificaci¨®n del Tratado de Maastricht. En 1993 se celebr¨® otro refer¨¦ndum en el pa¨ªs n¨®rdico en el que se aprob¨® un nuevo texto que inclu¨ªa la cl¨¢usula de exclusi¨®n sobre defensa, y otras tres relativas a distintas materias: uni¨®n monetaria y econ¨®mica, cooperaci¨®n judicial, y el concepto de ciudadan¨ªa europea.

Christine Nissen, analista del Instituto Dan¨¦s de Estudios Internacionales, explica que hace tres d¨¦cadas la ciudadan¨ªa danesa se mostr¨® contraria a sumarse a los futuros planes europeos en el ¨¢mbito militar al considerar que era innecesario. ¡°En Dinamarca siempre se ha valorado muy positivamente la membres¨ªa de la OTAN. La poblaci¨®n pens¨® que no aportar¨ªa nada formar parte de otra estructura militar¡±, sostiene por tel¨¦fono Nissen.

Debido a la cl¨¢usula de exclusi¨®n voluntaria, Dinamarca no ha podido durante estos a?os participar en las discusiones ni negociaciones relacionadas con la seguridad y defensa, ni en las misiones militares de la UE (aunque s¨ª en las civiles). El pa¨ªs escandinavo es el ¨²nico de los Veintisiete que no es miembro de la Agencia Europea de Defensa. Y, junto a la neutral Malta, tampoco forma parte de la llamada Cooperaci¨®n Estructurada Permanente (o Pesco, su acr¨®nimo en ingl¨¦s), el proyecto comunitario de mayor envergadura en el ¨¢mbito de la cooperaci¨®n militar.

Durante los a?os noventa, las implicaciones pr¨¢cticas de la cl¨¢usula de exclusi¨®n fueron pr¨¢cticamente nulas, ya que la UE todav¨ªa carec¨ªa de una pol¨ªtica com¨²n de seguridad y defensa que fuese efectiva. Copenhague empez¨® a notar las consecuencias de su excepcionalidad hace un par de d¨¦cadas. ¡°Dinamarca ten¨ªa mucho inter¨¦s en algunas operaciones militares de la UE, como la de Bosnia o la del Cuerno de ?frica contra la pirater¨ªa, pero no exist¨ªa la posibilidad de participar en ellas¡±, comenta por tel¨¦fono Kristian Soby Kristensen, investigador del Centro de Estudios Militares de la Universidad de Copenhague.

¡°Una abrumadora mayor¨ªa de daneses ha votado s¨ª a eliminar la excepci¨®n en defensa. Eso significa que ahora Dinamarca podr¨¢ participar en la cooperaci¨®n europea sobre defensa y seguridad. Estoy muy contenta¡±, declar¨® este mi¨¦rcoles Mette Frederiksen, la primera ministra. La socialdem¨®crata sostuvo que su pa¨ªs ha enviado una se?al ¡°muy clara¡± a sus aliados y al presidente ruso, Vlad¨ªmir Putin.

Un rearme paralelo al alem¨¢n

La consulta de este mi¨¦rcoles ¡ªen la que el dato de participaci¨®n se elev¨® al 65,8%¡ª fue anunciada el 6 de marzo, tras un acuerdo alcanzado entre el gobernante Partido Socialdem¨®crata y las otras cuatro principales fuerzas parlamentarias. El mismo d¨ªa tambi¨¦n se pact¨® que el pa¨ªs escandinavo incrementar¨¢ su inversi¨®n en defensa durante los pr¨®ximos a?os hasta alcanzar el 2% del Producto Interior Bruto (PIB) en 2033, el m¨ªnimo acordado por la OTAN, aunque bastantes de sus pa¨ªses miembros todav¨ªa no lo cumplen. El rearme planificado en Copenhague va en paralelo al de Berl¨ªn ¡ªsu principal aliado en cuestiones militares¡ª, que esta semana aprob¨® el mayor incremento de gasto en d¨¦cadas. ¡°El giro de Alemania ha tenido una profunda influencia en la clase pol¨ªtica danesa¡±, considera Nissen.

Los acontecimientos de los ¨²ltimos meses en Suecia y Finlandia tambi¨¦n han tenido su repercusi¨®n en Dinamarca. El brutal ataque de Rusia a Ucrania provoc¨® un vuelco en la opini¨®n p¨²blica y en la clase pol¨ªtica de los dos pa¨ªses n¨®rdicos, que ha llevado a Estocolmo y a Helsinki a solicitar su ingreso en la OTAN a marchas forzadas. De entre las 14 fuerzas parlamentarias de Dinamarca, las ¨²nicas tres que instaron a votar no en el refer¨¦ndum de este mi¨¦rcoles ¡ªdos de ultraderecha y una de izquierdas¡ª argumentaron que los casos de Suecia y Finlandia eran un claro ejemplo de que la pol¨ªtica de defensa comunitaria resultaba irrelevante, y que la seguridad est¨¢ garantizada bajo el paraguas de la Alianza Atl¨¢ntica ¡ªde la que Dinamarca es miembro fundador, desde 1949¡ª. Los defensores del s¨ª resaltaron que era el momento de que la cooperaci¨®n militar entre los pa¨ªses n¨®rdicos fuera absoluta.

¡°Los eventos en los tres pa¨ªses son parte de la misma historia¡±, recalca la investigadora Nissen. ¡°A pesar de que la magnitud de la decisi¨®n de Suecia y Finlandia no es comparable a la de Dinamarca¡±, agrega. Kristensen, de la Universidad de Copenhague, opina que el resultado favorable en la consulta de este mi¨¦rcoles es ¡°una se?al para la UE de que hasta la esc¨¦ptica Dinamarca est¨¢ decida a participar plenamente en la pol¨ªtica com¨²n de seguridad y defensa¡±. Ursula von der Leyen, la presidenta de la Comisi¨®n Europea, reaccion¨® este mi¨¦rcoles dando la bienvenida en su cuenta en Twitter al ¡°fuerte mensaje de compromiso con nuestra seguridad com¨²n enviado por el pueblo dan¨¦s¡±, mientras que el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, calific¨® en esa misma red social el resultado de ¡°elecci¨®n hist¨®rica¡±.

La guerra en Ucrania tambi¨¦n ha acelerado los planes europeos en el ¨¢mbito militar. En marzo se aprob¨® la creaci¨®n de una fuerza de intervenci¨®n r¨¢pida que contar¨¢ con 5.000 soldados y que deber¨ªa estar operativa en 2025. Y este martes se lleg¨® a un acuerdo en la cumbre extraordinaria de Bruselas para buscar ¡°con car¨¢cter de urgencia¡± medidas para coordinar a nivel comunitario el aprovisionamiento de armamento.

El refer¨¦ndum sobre la exenci¨®n en materia de defensa ha sido el noveno que se ha celebrado en el pa¨ªs escandinavo en el ¨²ltimo medio siglo, desde que en 1972 se aprobara con el 63,3% de los votos a favor el ingreso en la Comunidad Econ¨®mica Europea. Las ¨²ltimas dos consultas populares que hab¨ªan tenido lugar trataron, como la de este mi¨¦rcoles, sobre las cl¨¢usulas de exclusi¨®n pactadas hace tres decenios. En 2000, la poblaci¨®n danesa dio un nuevo golpe a la UE al rechazar el ingreso en el euro, a pesar de que pr¨¢cticamente la totalidad de la clase pol¨ªtica, adem¨¢s de los sindicatos y la patronal, hab¨ªa reclamado el voto a favor. En 2015, la ciudadan¨ªa prefiri¨® mantener la excepci¨®n sobre la cooperaci¨®n judicial y asuntos internos, que garantiza cierta autonom¨ªa en inmigraci¨®n y control de fronteras. En los dos referendos gan¨® el no con poco m¨¢s del 53% de los sufragios. La cuarta enmienda al Tratado de Maastricht que pactaron Copenhague y Bruselas hace tres decenios, la relativa al concepto de ciudadan¨ªa europea, se convirti¨® en intrascendente tras la entrada en vigor del Tratado de ?msterdam, en 1999.

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