La futura incorporaci¨®n de Suecia refuerza la OTAN: submarinos sofisticados y un mayor control del B¨¢ltico y el ?rtico
La isla de Gotland se convertir¨¢ en uno de los bastiones de la Alianza y la poderosa industria militar sueca reforzar¨¢ el desarrollo de aviones, tanques o sistemas de defensa antia¨¦rea
Tras dos siglos de neutralidad militar, y m¨¢s de un a?o plagado de inesperados obst¨¢culos para formalizar su adhesi¨®n, Suecia est¨¢ m¨¢s cerca que nunca de convertirse en el miembro 32? de la OTAN. El compromiso del presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, de levantar el bloqueo al ingreso del pa¨ªs escandinavo allana finalmente el camino para completar a corto plazo la transformaci¨®n del marco de seguridad del norte de Europa derivada de la invasi¨®n rusa de Ucrania. La Alianza Atl¨¢ntica ganar¨¢ profundidad estrat¨¦gica con la integraci¨®n del nuevo socio, al reforzar notablemente sus capacidades en el ?rtico y, sobre todo, en el mar B¨¢ltico, donde la isla de Gotland y la potente flota de submarinos de la Armada sueca ¡ªun activo estrat¨¦gico de valor incalculable¡ª suponen una garant¨ªa para la defensa de Polonia y los pa¨ªses b¨¢lticos.
Suecia no es una gran potencia militar. Estocolmo adopt¨® una pol¨ªtica de neutralidad cuando finalizaron las guerras napole¨®nicas, en el siglo XIX. Tras la conclusi¨®n de la Guerra Fr¨ªa, el pa¨ªs n¨®rdico emprendi¨® un proceso de desmilitarizaci¨®n en el que de manera progresiva se redujo dr¨¢sticamente el gasto militar y se disolvieron regimientos por todo el territorio. En 2005 abandonaron Gotland los ¨²ltimos soldados suecos; la isla, considerada ¡°un portaviones imposible de hundir¡± por m¨²ltiples analistas, hab¨ªa dejado de ser una prioridad estrat¨¦gica para Estocolmo ante la aparente desaparici¨®n de la amenaza rusa. Algunos pa¨ªses ba?ados por el B¨¢ltico imploraron a Suecia que no desmilitarizara Gotland, ante el riesgo que implicaba una potencial ocupaci¨®n de la isla en una ofensiva rel¨¢mpago lanzada por las tropas del Kremlin.
Todo volvi¨® a cambiar en 2014, tras la anexi¨®n rusa de la pen¨ªnsula ucrania de Crimea y el inicio de los combates en la regi¨®n de Donb¨¢s. En los a?os siguientes, Suecia restableci¨® el servicio militar obligatorio para hombres y mujeres, reinstaur¨® el regimiento de Gotland e instal¨® un sistema de defensa antia¨¦rea en la isla ¡ªde una extensi¨®n similar a Mallorca o Rodas¡ª, adem¨¢s de enviar veh¨ªculos de combate de infanter¨ªa y tanques Leopard 2. En enero de 2022, cuando m¨¢s de 100.000 militares rusos aguardaban ¨®rdenes en la frontera de Ucrania, casi un millar de soldados suecos se desplazaron a Gotland para reforzar la seguridad del territorio estrat¨¦gico, y poco despu¨¦s el Gobierno anunci¨® la inversi¨®n de 1.600 millones de coronas suecas (unos 140 millones de euros) para ampliar las infraestructuras militares en la isla.
Con la futura entrada de Suecia en la OTAN, Gotland se convertir¨¢ en uno de los bastiones de la Alianza. En 2017, durante una visita, Ben Hodges, entonces comandante del ej¨¦rcito de Estados Unidos en Europa, asegur¨® que ¡°no existe una isla en el mundo con mayor importancia estrat¨¦gica¡±. Gotland dista menos de 300 kil¨®metros de Kaliningrado, un enclave ruso situado entre Polonia y Lituania que alberga la Flota Rusa del B¨¢ltico. Las aguas de este mar son navegables todo el a?o y m¨¢s de 1.500 buques utilizan a diario esta v¨ªa mar¨ªtima. ¡°Quien controla Gotland, puede dominar el espacio a¨¦reo y mar¨ªtimo del sur del B¨¢ltico¡±, declaraba hace poco m¨¢s de un a?o Magnus Frykvall, la m¨¢xima autoridad del ej¨¦rcito sueco en la isla.
La incorporaci¨®n de Gotland al territorio de la Alianza Atl¨¢ntica tambi¨¦n supondr¨¢ un evidente refuerzo para la defensa de Polonia y, especialmente, Lituania, Letonia y Estonia, los aliados m¨¢s vulnerables ante un posible ataque de Rusia. La integraci¨®n de Suecia en el bloque militar convertir¨¢ el B¨¢ltico pr¨¢cticamente en un mar interior de la OTAN, a diferencia de lo que ocurr¨ªa durante la Guerra Fr¨ªa, cuando gran parte de sus costas estaban en manos comunistas (Uni¨®n Sovi¨¦tica, Alemania Oriental y Polonia) o neutrales (Suecia y Finlandia).
En Bruselas, sede de la OTAN, no solo se celebra la futura incorporaci¨®n de Gotland. Suecia cuenta con otro activo muy preciado: su flota de submarinos convencionales de clase mundial. El B¨¢ltico ¡ªllamado a veces ¡°una pradera inundada¡±¡ª es un mar con muy poca profundidad (57 metros de media) en el que no pueden operar los nav¨ªos de propulsi¨®n nuclear que componen gran parte de la flota submarina de Rusia y Estados Unidos.
Suecia lleva operando submarinos en el B¨¢ltico desde 1904, ning¨²n otro pa¨ªs de la regi¨®n ha sido tan activo bajo las aguas. Los submarinos de la Armada sueca pueden permanecer sumergidos durante semanas. La mayor¨ªa de los nav¨ªos subacu¨¢ticos convencionales ¡ªno nucleares¡ª funcionan con bater¨ªas y necesitan volver a la superficie al cabo de un par de d¨ªas para que sus motores di¨¦sel puedan seguir funcionando. Pero los submarinos suecos tienen ox¨ªgeno l¨ªquido almacenado en tanques a bordo que permiten recargar las bater¨ªas sin necesidad de emerger a la superficie. Suecia tiene tres submarinos avanzados de la clase Gotland y un modelo m¨¢s antiguo que se retirar¨¢ cuando se entreguen dos buques de nuevo dise?o, antes de 2028.
Un nuevo flanco de la Alianza
Adem¨¢s de en el B¨¢ltico, la futura incorporaci¨®n de Suecia ¡ªy la reciente de Finlandia¡ª configuran un nuevo flanco de la Alianza en el ?rtico, que se suma a los del este y el sur, los ¨²nicos que tuvo durante d¨¦cadas. La incorporaci¨®n de los dos pa¨ªses n¨®rdicos constituye un reto para la OTAN en un periodo en el que Mosc¨² ha emprendido un ambicioso refuerzo de su proyecci¨®n ¨¢rtica.
Tras su adhesi¨®n, Suecia se convertir¨¢ en el sexto miembro de la OTAN con mayor superficie. Un pa¨ªs de poco m¨¢s de 10 millones de habitantes que cuenta con unos 25.000 soldados profesionales y 35.000 reservistas, adem¨¢s de una poderosa industria militar que desarrolla sofisticados aviones de combate, tanques o sistemas de defensa antia¨¦rea.
Tras el compromiso de desbloquear la adhesi¨®n de Suecia que Erdogan asumi¨® el lunes en Vilnius (Lituania), Estocolmo conf¨ªa en que el Parlamento turco d¨¦ luz verde cuanto antes al ingreso del pa¨ªs escandinavo en la Alianza. Ankara no ha definido todav¨ªa los plazos para la aprobaci¨®n en la Asamblea Nacional, aunque la mayor¨ªa de medios suecos especulan con la posibilidad de que ocurra en septiembre. Adem¨¢s de Turqu¨ªa, Hungr¨ªa tambi¨¦n mantiene bloqueada la integraci¨®n de Suecia desde hace m¨¢s de 10 meses, cuando el Parlamento eslovaco fue el ¨²ltimo en respaldar la entrada del nuevo miembro. El ministro de Exteriores h¨²ngaro, P¨¦ter Szijj¨¢rt¨®, declar¨® el martes que la aprobaci¨®n de Budapest es ¡°una mera cuesti¨®n t¨¦cnica¡± que no retrasar¨¢ la incorporaci¨®n sueca a la Alianza.
La aprobaci¨®n en los parlamentos de Ankara y Budapest marcar¨¢ el final definitivo de m¨¢s de dos siglos de neutralidad militar sueca ¡ªo de ¡°no alineamiento¡±, el t¨¦rmino empleado por Estocolmo desde su ingreso en la UE, en 1995. Y completar¨¢ un proceso de integraci¨®n en la organizaci¨®n euroatl¨¢ntica que Suecia y Finlandia iniciaron conjuntamente en abril del a?o pasado y cuyos caminos se distanciaron tras la ratificaci¨®n de Ankara y Budapest al ingreso de Helsinki, el pasado marzo.
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