Los latinos sobrepasan ya a los blancos no hispanos en Texas, seg¨²n el censo de 2022
En California y Nuevo M¨¦xico hace tiempo que son mayor¨ªa, gracias a un aumento a ritmo constante en las ¨²ltimas d¨¦cadas
El gran temor del trumpismo, que Estados Unidos deje de ser un pa¨ªs blanco y angl¨®fono, va camino de convertirse en realidad. Los latinos superan ya en n¨²mero a los blancos no hispanos en Texas, seg¨²n datos del ¨²ltimo censo. Los latinos, o hispanos -la denominaci¨®n es indistinta-, representan alrededor del 40,2% de la poblaci¨®n del Estado, ligeramente por delante de los blancos no hispanos, que suponen el 39,8% del censo. El sorpasso no se limita s¨®lo a Texas, puesto que en California y Nuevo M¨¦xico hace tiempo que son mayor¨ªa.
Los resultados no son sorprendentes, ya que la poblaci¨®n latina en Texas y en el pa¨ªs en general ha aumentado a un ritmo constante en las ¨²ltimas d¨¦cadas. En 2020, el censo revel¨® que algo m¨¢s de una cuarta parte de todos los ni?os de EE UU son latinos, con un aumento de m¨¢s de un mill¨®n en s¨®lo una d¨¦cada.
Seg¨²n datos del instituto de estudios Pew Research, la poblaci¨®n hispana de EE UU alcanz¨® los 62,1 millones en 2020, lo que representa el 19% de todos los estadounidenses y el segundo grupo demogr¨¢fico del pa¨ªs. Seg¨²n el mismo censo, un 39% de los californianos eran tambi¨¦n hispanos, ligeramente por encima de los blancos (35%), as¨ª como el 49,3% de los habitantes de Nuevo M¨¦xico. Por tanto, son tres los Estados donde la poblaci¨®n hispana o latina es mayor¨ªa. Nuevo M¨¦xico tiene desde finales de la primera d¨¦cada del siglo el mayor porcentaje de hispanos.
El vuelco demogr¨¢fico de Texas se produjo probablemente hacia 2022, seg¨²n la oficina federal del censo. Durante a?os, las estimaciones no oficiales hab¨ªan venido mostrando que los latinos iban camino de superar en n¨²mero a los blancos no hispanos, lo que refleja d¨¦cadas de transformaci¨®n. De los 12 millones de latinos que se calcula viven en Texas, muchos se concentran en San Antonio, la ciudad con mayor porcentaje (en torno al 64%).
Tras el 40,2% de latinos o hispanos, los texanos son, en este orden, ¡°blancos no latinos¡± (39,8% del censo), negros (13,4%), asi¨¢ticos (5,7%), mestizos (dos o m¨¢s razas, 2,3%), indios nativos de EE UU y Alaska (1,1%) y, finalmente, nativos de Haw¨¢i o las islas del Pac¨ªfico (0,2%), seg¨²n la clasificaci¨®n racial que a diario salta del censo a cualquier formulario o encuesta: en EE UU es obligatorio definirse, identificarse con una de las casillas. Los datos corresponden a un censo con fecha 1 de julio de 2022. ¡°Las cifras suman m¨¢s del 100% porque los latinos pueden ser de cualquier raza¡±, avisa la estad¨ªstica oficial, lo que a?ade complejidad a una identidad que la Administraci¨®n pretende definir como ¨²nica.
Texas tuvo mayor¨ªa blanca desde 1885 hasta 2004, cuando la poblaci¨®n blanca no hispana cay¨® por primera vez por debajo del 50%. Es el segundo Estado m¨¢s poblado por detr¨¢s de California, donde las personas de color han representado el 95% de su crecimiento demogr¨¢fico en la ¨²ltima d¨¦cada, seg¨²n el censo de 2020. En Texas, California, Haw¨¢i, Maryland, Nevada y Nuevo M¨¦xico los blancos no hispanos representan menos del 50% de la poblaci¨®n. En paralelo a esta pujanza demogr¨¢fica, avanza tambi¨¦n imparable el uso del espa?ol. Fue el idioma no ingl¨¦s m¨¢s hablado en los hogares estadounidenses (62%) en 2019, 12 veces m¨¢s que los cuatro siguientes m¨¢s comunes (chino, tagalo, vietnamita y ¨¢rabe). M¨¢s de la mitad (55%) de los castellanoparlantes han nacido en EE UU.
Abbott, demandado por instalar una barrera en el r¨ªo Grande
El Estado de Texas, en manos del gobernador republicano Gregg Abbott, env¨ªa desde hace m¨¢s de un a?o a Nueva York o Washington a miles de migrantes que cruzan desde M¨¦xico, como forma de presionar al Gobierno federal sobre la situaci¨®n que se vive en la frontera. Como respuesta, este mismo lunes, el Departamento de Justicia ha demandado al Estado por una barrera flotante en el r¨ªo Grande (o r¨ªo Bravo), que forma parte del programa de seguridad fronteriza de Abbott, la denominada Operaci¨®n Lone Star. La instalaci¨®n de la barrera, de unos 300 metros, pretende disuadir a los migrantes de cruzar a nado desde M¨¦xico. Washington alega que la cadena de boyas viola la ley federal, mientras Abbott ha deso¨ªdo una petici¨®n del Departamento de Justicia para retirarla. Abbott culpa a la Administraci¨®n del presidente Joe Biden del gran n¨²mero de inmigrantes que cruzan irregularmente la frontera.
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