El Gobierno de Sunak se plantea controlar a inmigrantes irregulares con brazaletes con GPS
M¨¢s de 175.000 personas esperan una respuesta tras haber solicitado asilo en el Reino Unido, la cifra m¨¢s alta desde que comenz¨® a registrarse el dato
El Gobierno conservador de Rishi Sunak admite sin tapujos que estudia la idea de controlar a algunos de los inmigrantes irregulares que llegan a las costas del Reino Unido con brazaletes electr¨®nicos dotados de GPS. ¡°Estamos contemplando todas las opciones a nuestro alcance¡±, ha reconocido en la BBC la ministra del Interior, Suella Braverman, al ser preguntada por la noticia avanzada por el diario The Times.
¡°Acabamos de aprobar una herramienta fundamental, la Ley de Inmigraci¨®n Ilegal. Nos va a permitir detener y expulsar a todos aquellos que lleguen aqu¨ª ilegalmente¡±, ha advertido Braverman. Sunak ha hecho del combate contra la inmigraci¨®n irregular la piedra de toque del ¨¦xito o fracaso de su mandato. Y, con el prop¨®sito de recabar apoyo popular, ha optado por primar un enfoque m¨¢s criminal que humanitario ante el desaf¨ªo. Desde un principio, el t¨¦rmino usado para referirse a las personas que se atreven a cruzar las aguas del canal de la Mancha y llegar hasta las costas inglesas es el de ¡°ilegales¡±, y no el de ¡°irregulares¡± que propone desde hace a?os el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur). Con la nueva medida de control, los brazaletes, se impondr¨ªa a los inmigrantes una medida restrictiva de la libertad que la ley solo permite despu¨¦s de una decisi¨®n judicial o como alternativa a una condena de prisi¨®n.
¡°Est¨¢n tratando a estas personas como objetos, en vez de hombres, mujeres y ni?os vulnerables que van en busca de seguridad, y deber¨ªan ser tratados con compasi¨®n y humanidad¡±, ha reaccionado Enver Solomon, el director ejecutivo de la organizaci¨®n UK Refugee Council, al conocer los nuevos planes del Ministerio del Interior brit¨¢nico.
La nueva ley de inmigraci¨®n, que el Gobierno de Sunak logr¨® finalmente aprobar en el Parlamento el mes pasado, supone una trampa autoinducida para Downing Street. Al imponer sobre el Ministerio del Interior la responsabilidad legal de detener y deportar a todo inmigrante irregular llegado al Reino Unido, la presi¨®n creada acaba provocando soluciones desesperadas ¡ª¡±crueles e inhumanas¡±, seg¨²n el propio arzobispo de Canterbury, jefe de la Iglesia anglicana¡ª, como la deportaci¨®n de los inmigrantes a Ruanda, el encierro en prisiones flotantes o, ahora, el control electr¨®nico de sus movimientos.
Si los planes del Ministerio del Interior contemplaban el uso de hasta 25.000 pulseras electr¨®nicas en 2025 para el control de delincuentes convictos, la extensi¨®n de este mecanismo a los miles de irregulares que llegan al Reino Unido desbordar¨ªa los recursos de que disponen las fuerzas de seguridad, seg¨²n han advertido sus principales responsables.
La promesa incumplida de Sunak
El primer ministro brit¨¢nico prometi¨® hace ya casi un a?o poner fin a la llegada a la costa sur del pa¨ªs de embarcaciones con inmigrantes irregulares; aumentar el n¨²mero de centros de detenci¨®n ¨Dpara no tener que utilizar hoteles por todo el pa¨ªs¨D; y poner fin a un hist¨®rico atasco en la tramitaci¨®n de peticiones de asilo que inundaban las oficinas administrativas del Ministerio del Interior. Tres promesas que se han convertido muy pronto en tres fracasos pol¨ªticos.
Seg¨²n las ¨²ltimas cifras del propio Gobierno, m¨¢s de 175.000 personas estaban esperando respuesta a su solicitud de asilo a finales de junio, la cifra m¨¢s alta desde que comenz¨® a registrarse la estad¨ªstica hace m¨¢s de una d¨¦cada. Supone un aumento del 30% respecto a hace un a?o, cuando el n¨²mero de solicitantes era de m¨¢s de 122.000. El Reino Unido gasta cerca de 4.000 millones de euros anuales en alojamiento, manutenci¨®n y asistencia de todas estas personas. Casi un tercio de ellas, unas 50.000, viven en hoteles. El Gobierno destina a este prop¨®sito casi siete millones diarios de euros.
Soluciones como la embarcaci¨®n gigante Bibby Stockholm, anclada en la isla de Portland, en la costa sur inglesa, han supuesto la exposici¨®n al rid¨ªculo del Gobierno de Sunak. Con capacidad para alojar a 222 personas ¡ªuna cifra min¨²scula frente al desaf¨ªo real de la inmigraci¨®n irregular¡ª, los planes iniciales contemplaban que medio millar de adultos varones de entre 18 y 65 a?os ocuparan las habitaciones de lo que algunas organizaciones han definido como una ¡°prisi¨®n flotante¡±.
Como ya ocurri¨® en junio de 2022 con el primer avi¨®n que se intent¨® enviar a Ruanda antes de que la justicia europea frustrara el vuelo, en el que apenas llegaron a embarcar seis inmigrantes, el n¨²mero de nuevos inquilinos del Bibby Stockholm fue tan solo de 39, despu¨¦s de que una cascada de recursos ante la justicia frenara la mayor¨ªa de los ingresos. Y el hallazgo de trazas de legionela en las tuber¨ªas de la embarcaci¨®n, a mediados de agosto, oblig¨® a su evacuaci¨®n temporal.
Finalmente, aunque el ritmo de llegada de embarcaciones que atraviesan las aguas del canal es en 2023, de momento, menor que el a?o anterior (un 21% menos), la realidad es tozuda, y desmiente la promesa repetida por Sunak con el eslogan ¡°Stop The Boats¡± (detengamos las embarcaciones) que decora su atril cada vez que el primer ministro aborda p¨²blicamente el asunto. Frente a los 299 inmigrantes interceptados en 2018 por la Guardia Costera brit¨¢nica, en 2022 el n¨²mero alcanz¨® los 45.755. En lo que va de a?o, son ya m¨¢s de 19.800, seg¨²n cifras del propio Ministerio del Interior.
Desde 2018, cuando comenz¨® el recuento p¨²blico, hasta la actualidad, la cifra total es de casi 105.000 personas. Pr¨¢cticamente el mismo n¨²mero que ha llegado a Italia en lo que va de 2023. Mientras el Reino Unido contempl¨® desde la distancia la crisis migratoria que afect¨® a la Uni¨®n Europea tras el estallido de la guerra en Siria, el incremento de sus propias estad¨ªsticas, que ha coincidido con la culminaci¨®n del Brexit, ha convertido la inmigraci¨®n en el mayor quebradero de cabeza y riesgo electoral del Partido Conservador.
El Gobierno de Sunak ¡ªen especial, la ministra Braverman, que encabeza el ala m¨¢s dura¡ª ha llegado a plantearse el abandono de la Convenci¨®n Europea de Derechos Humanos, a la que est¨¢ adscrito el Reino Unido desde 1945, si el Tribunal de Derechos Humanos de Estrasburgo sigue obstaculizando los planes para deportar a Ruanda a gran parte de los inmigrantes irregulares que logren llegar al pa¨ªs.
Sigue toda la informaci¨®n internacional en Facebook y Twitter, o en nuestra newsletter semanal.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.