La xenofobia crece en Turqu¨ªa: deportaciones de decenas de miles de extranjeros y violaciones de derechos humanos
Activistas, abogados y reclusos denuncian las duras condiciones en los centros de internamiento pagados por los contribuyentes europeos
La crisis econ¨®mica y los discursos xen¨®fobos de medios de comunicaci¨®n y partidos pol¨ªticos ¡ªmayormente vinculados a la oposici¨®n¡ª han espoleado el sentimiento antimigratorio en Turqu¨ªa. As¨ª que, con las elecciones municipales del pr¨®ximo marzo en mente, en las que se dirimir¨¢ el control de importantes ciudades como Estambul y Ankara, el nuevo Ejecutivo de Recep Tayyip Erdogan ha endurecido los controles migratorios y ha llevado a cabo detenciones masivas en las que se ha capturado y deportado a decenas de miles de extranjeros. Estas operaciones, seg¨²n denuncian abogados y activistas, incumplen los derechos m¨¢s b¨¢sicos.
¡°Estamos asustados. Muchos nos quedamos encerrados en casa, pero para pagar el alquiler tienes que salir ah¨ª fuera y pelearlo. El problema es que, si sales de casa, no sabes si vas a regresar¡±, relata un pastor nigeriano, que pide ocultar su nombre por lo delicado de la situaci¨®n. La mayor¨ªa de sus compatriotas en Turqu¨ªa, explica, se dedican a la compra de art¨ªculos de consumo que env¨ªan a su pa¨ªs para su reventa, pero cada vez que acuden a los mercados se arriesgan a ser parados en los nuevos controles policiales m¨®viles desplegados como parte del plan contra la inmigraci¨®n irregular del nuevo ministro de Interior, Ali Yerlikaya, iniciado este verano en Estambul y que se est¨¢ extendiendo a otras grandes ciudades de Turqu¨ªa. ¡°Hay controles en los mercados, en las paradas de autob¨²s, de metro. Y los arrestos son masivos. Hay much¨ªsimos nigerianos en los campos de deportaci¨®n. Muchos de ellos ten¨ªan permiso de residencia, pero no lo pudieron renovar o no se lo aprobaron¡±, afirma el pastor.
Seg¨²n datos de Interior, desde mediados de junio han sido detenidos m¨¢s de 112.000 extranjeros sin papeles, de los que unos 48.000 ya han sido deportados. Abogados y activistas consultados subrayan que entre los detenidos hay tambi¨¦n solicitantes de asilo, personas en proceso de renovaci¨®n de sus permisos de residencia e incluso personas con la documentaci¨®n en regla. Adem¨¢s de los deportados, un gran n¨²mero de extranjeros se ha marchado de Turqu¨ªa en los ¨²ltimos meses ante los cada vez mayores obst¨¢culos para renovar los papeles. ¡°A ra¨ªz de nuestros exhaustivos controles, y esto son muy buenas noticias, 120.531 extranjeros cuyo visado o permiso de residencia hab¨ªa expirado, han abandonado nuestro pa¨ªs sabedores de que los ¨ªbamos a detener¡±, se felicit¨® Yerlikaya el pasado 12 de octubre.
¡°Estas operaciones de lucha contra la migraci¨®n irregular se centran en una captura efectiva en el pa¨ªs y en el establecimiento de un mecanismo de deportaci¨®n eficiente y ¨¢gil¡±, explica a este diario una fuente del Ministerio de Interior de Turqu¨ªa. El objetivo afirma es ¡°reducir la presi¨®n de la migraci¨®n irregular¡± y ¡°crear un efecto disuasorio¡±.
En Turqu¨ªa viven 1,13 millones de extranjeros con permiso de residencia, es decir, 225.000 menos que a inicios de a?o, seg¨²n las estad¨ªstica oficiales. El n¨²mero de personas bajo protecci¨®n internacional (iraqu¨ªes, afganos, ucranianos) tambi¨¦n ha descendido en casi 20.000 personas hasta los 287.000, y el de refugiados sirios ¡ªque tienen un estatus especial¡ª ha pasado de 3,74 millones a 3,25 en apenas a?o y medio.
¡°?Qu¨¦ ha ocurrido con este medio mill¨®n de sirios que ha desaparecido?¡±, se pregunta el activista sirioturco Taha Elgazi. La respuesta, afirma, es que algunos siguen en el pa¨ªs, pero sin papeles, otros ha emigrado irregularmente a Europa y otros han regresado a Siria ¡°forzados por las circunstancias¡± y las ¡°presiones del Gobierno¡±, como por ejemplo, la prohibici¨®n de que se instalen en determinados barrios o provincias. ¡°En los ¨²ltimos tiempos ha aumentado much¨ªsimo la discriminaci¨®n y el racismo, especialmente contra los sirios. Tambi¨¦n ha habido ataques violentos y la gente ha empezado a tener miedo¡±, denuncia.
M¨¢s de 50 latinoamericanos detenidos o deportados
¡°Es una locura¡±, se queja un diplom¨¢tico latinoamericano. Seg¨²n los datos recabados por este diario a trav¨¦s de fuentes diplom¨¢ticas, hay m¨¢s de una cincuentena de ciudadanos de pa¨ªses latinoamericanos que han sido detenidos y deportados ¡ªo se encuentran en proceso de deportaci¨®n¡ª, incluidos varios estudiantes venezolanos becados por el Ministerio de Educaci¨®n turco que fueron expulsados pese a los intentos de su embajada por evitarlo. ¡°Hace poco, detuvieron al suegro de uno de nuestros ciudadanos y lo deportaron. Al final ¨¦l decidido salir del pa¨ªs porque ten¨ªa miedo a que tambi¨¦n lo detuvieran¡±, explica otro diplom¨¢tico El caso m¨¢s sonado ha sido el de dos turistas marroqu¨ªes que se hallaban legalmente en Turqu¨ªa y, tras ser detenidos el pasado agosto, fueron deportados a una zona del norte de Siria porque las autoridades turcas creyeron que eran de ese pa¨ªs.
¡°El ministro turco de Interior ha indicado claramente que su intenci¨®n es que Turqu¨ªa deje de ser un pa¨ªs de tr¨¢nsito [para los migrantes] porque eso tambi¨¦n lo convierte en un pa¨ªs de destino¡±, explica el embajador de la Uni¨®n Europea en Ankara, Nikolaus Meyer-Landrut, en una entrevista con EL PA?S durante la que explica que se est¨¢n manteniendo contactos con las autoridades turcas para ¡°actualizar¡± el acuerdo antimigratorio de 2016.
Este pacto, que convirti¨® a Ankara en guardi¨¢n de la frontera suroriental de la UE, hizo que se redujesen las llegadas de migrantes y refugiados a territorio europeo desde este pa¨ªs, y que las rutas se desviasen hacia el Mediterr¨¢neo central. Tambi¨¦n hizo que Turqu¨ªa se convirtiese en el pa¨ªs del mundo que acoge a un mayor n¨²mero de refugiados (3,5 millones), si bien el n¨²mero de extranjeros apenas supera el 7 % de la poblaci¨®n del pa¨ªs, incluso computando en el c¨¢lculo tambi¨¦n una estimaci¨®n de dos millones de migrantes en situaci¨®n irregular.
Aun as¨ª, la migraci¨®n ha copado buena parte del debate p¨²blico en Turqu¨ªa en los ¨²ltimos a?os, en un ambiente de creciente xenofobia, atizada en la prensa con art¨ªculos que culpan a los extranjeros de los problemas econ¨®micos, del incremento de las estafas por internet o de que el precio de la vivienda se haya disparado (pese a que los extranjeros ¨²nicamente suponen entre un 3% y un 4% de los compradores, frente a m¨¢s de un 15% en Espa?a).
Rosa Mart¨ªnez y su novio, Adri¨¢n Cuadrado, ten¨ªan la documentaci¨®n en regla. Ambos ¡ªcuyos nombres han sido modificados por miedo a represalias¡ª llegaron hace cuatro a?os a Turqu¨ªa desde Cuba con ganas de ¡°trabajar y tener una familia tranquila y c¨®moda¡±. ¡°Nos endeudamos para salir de Cuba y aqu¨ª trabajamos en cl¨ªnicas est¨¦ticas [la floreciente industria turca de los injertos capilares y otras cirug¨ªas pl¨¢sticas emplea a numerosos trabajadores migrantes como traductores]. Despu¨¦s de tres a?os de trabajar y saldar nuestras deudas, cuando comenz¨¢bamos a vivir, empezaron los problemas para los migrantes¡±, lamenta Mart¨ªnez.
En febrero, relata, se trasladaron a un nuevo piso, pero el propietario comenz¨® a acosar a Mart¨ªnez y, ante los repetidos rechazos de ella, denunci¨® al novio ante la polic¨ªa. ¡°Nos encerr¨® en casa hasta que llegaron los agentes. Aunque demostramos que la denuncia era falsa, se llevaron a mi novio. La cuesti¨®n aqu¨ª es que est¨¢n poniendo cualquier motivo para llevarse a los extranjeros a un centro de detenci¨®n¡±, arguye Mart¨ªnez. Ebru Bese, abogada experta en migraci¨®n, confirma que ha encontrado numerosos casos en los que se utiliza cualquier excusa, como denuncias sin probar o quejas, para detener a los extranjeros y revertir sus estatus de residentes.
Durante las dos semanas y media siguientes, Adri¨¢n Cuadrado ¡°desapareci¨®¡±. Nadie sab¨ªa d¨®nde estaba, nadie pod¨ªa comunicarse con ¨¦l, las autoridades no daban informaci¨®n. Cuando el cubano logr¨® ponerse en contacto con su pareja, hab¨ªa pasado por dos centros de detenci¨®n: uno cercano a Estambul y otro en Kayseri, a 780 kil¨®metros de distancia.
¡°Hay gente que no sabemos d¨®nde est¨¢¡±, explica Irfan G¨¹ler, abogado especializado en este tipo de casos: ¡°Los suelen llevar a Tuzla [un municipio en el extrarradio de Estambul] y de ah¨ª a ciudades del este del pa¨ªs como Erzurum o Agri [a m¨¢s de 1.200 kil¨®metros]. Es una pol¨ªtica decidida para obstaculizar la labor de los abogados e impedir que apelemos a tiempo contra las decisiones de deportaci¨®n¡±.
Centros financiados por la UE
En Turqu¨ªa hay 28 centros de deportaci¨®n repartidos por todo el pa¨ªs, 14 de ellos construidos y otros siete reformados con dinero de la UE transferido a cambio del acuerdo antimigratorio de 2016. Son instituciones de funcionamiento carcelario donde se interna a los extranjeros a la espera de su expulsi¨®n del pa¨ªs, y donde los reclusos ¡°tienen menos derechos que un delincuente com¨²n¡±, afirma la abogada G¨¹lden S?nmez: ¡°Si un ciudadano turco ha cometido un delito se le puede mantener un m¨¢ximo de 48 horas bajo custodia policial y luego debe comparecer ante un juez. Pero si eres extranjero y no has cometido ning¨²n delito, puedes permanecer encerrado durante meses, sin acceso a traductores ni a abogados¡±.
¡°Ellos no han matado ni han robado y est¨¢n en una c¨¢rcel donde les maltratan, los golpean y humillan como a perros, les escupen, les hacen dormir al lado de las heces. Mi pareja estaba en una celda con m¨¢s de 15 presos, dos por colch¨®n, todos tirados en el suelo y con un ¨²nico retrete para todos en la celda¡±, asegura Rosa Mart¨ªnez. La letrada Ebru Bese confirma que en el Colegio de Abogados de Ankara, al que pertenece, se han recibido denuncias sobre las malas condiciones en los centros de deportaci¨®n, incluidas sobre malos tratos, torturas, violaciones y suicidios. ¡°Pero no se nos ha permitido el acceso para investigarlo, hay mucha opacidad¡±, alega.
El embajador de la UE reconoce estar al tanto de las denuncias sobre los centros de detenci¨®n, pero se defiende alegando que ¡°la UE ha financiado cursos de formaci¨®n para la capacitaci¨®n en la gesti¨®n de la migraci¨®n y de los procesamientos de asilo de forma que sean compatibles con la legislaci¨®n internacional y los derechos humanos¡± y que ¡°los centros est¨¢n dirigidos por las autoridades turcas¡±. La fuente de Interior, por su parte, niega que se produzcan estos abusos y sostiene que, en los centros, ¡°los inmigrantes irregulares son alojados con dignidad humana¡± y ¡°se satisfacen sus necesidades b¨¢sicas¡±. ¡°Nuestro principal objetivo para reducir la duraci¨®n de la estancia de los inmigrantes irregulares en el centro, es garantizar procedimientos de deportaci¨®n r¨¢pidos¡±, a?ade.
Tras cuatro meses encerrado ¡ªdurante los cuales caduc¨® su permiso de residencia sin poder hacer nada para renovarlo¡ª y viendo que ni las acciones de los abogados ni las intervenciones del consulado de Cuba surt¨ªan efecto, Adri¨¢n Cuadrado decidi¨® firmar el documento de deportaci¨®n voluntaria, y a mediados de octubre fue trasladado al aeropuerto de Estambul para embarcarlo en vuelo hacia su pa¨ªs (que hubo de ser costeado por su pareja). Los abogados y activistas consultados consideran que, de hecho, el prolongado encierro al que se somete a los extranjeros detenidos y el trato que reciben es una estrategia dirigida a hacerles firmar los documentos de deportaci¨®n. ¡°Se les fuerza a firmar los formularios de deportaci¨®n voluntaria, y a los que se niegan se les somete a malos tratos¡±, apunta Bese.
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