Ni cad¨¢veres, ni hambre: as¨ª ven los israel¨ªes en televisi¨®n la guerra en Gaza
El visionado de informativos y tertulias en hebreo durante una jornada muestra un discurso de santificaci¨®n del ej¨¦rcito, exenci¨®n de responsabilidad e incomprensi¨®n del resto del mundo
Es martes por la ma?ana en Israel. En la v¨ªspera, la principal herramienta de an¨¢lisis de la seguridad alimentaria y la nutrici¨®n (Clasificaci¨®n Integrada de las Fases, en la que participan organizaciones de la ONU) ha revelado que la mitad de los 2,3 millones de gazat¨ªes padece falta extrema de acceso a los alimentos y que la hambruna en el norte es ¡°inminente¡±. En el resto del mundo, la noticia recibe notable atenci¨®n. Aqu¨ª, los numerosos informativos y tertulias de actualidad, que se suceden desde la ma?ana a ¨²ltima hora del d¨ªa, la ignoran casi por completo. En vez de im¨¢genes de palestinos desesperados haciendo cola para conseguir comida, los israel¨ªes reciben consejos sobre c¨®mo lidiar con el hambre emocional, d¨®nde comprar las mejores orejas de Ham¨¢n ¨Dun dulce t¨ªpico durante la festividad jud¨ªa de Purim¨D o anuncios de MasterChef.
Como en la mayor¨ªa de pa¨ªses, la televisi¨®n es la principal fuente de informaci¨®n en Israel. Lo elige casi la mitad de la poblaci¨®n, seg¨²n las estad¨ªsticas oficiales. En tiempos de guerra, como este, las audiencias se disparan (es dif¨ªcil describir el enganche nacional a la actualidad y a los grupos de Telegram con noticias) y los programas a?aden la bandera y mensajes especiales. ¡°Israel en guerra¡±, reza la del Canal 12; ¡°Fuertes juntos¡± (Canal 13); ¡°Con la ayuda de Dios, juntos venceremos¡± (Canal 14).
Se ha elegido un d¨ªa al azar para visionar 10 horas consecutivas de informativos y tertulias en los principales canales en hebreo: el p¨²blico (Kaan, 11) y los privados 12, 13 y 14. El 12 es l¨ªder claro de audiencia en informativos, mientras que el 14 (el favorito de la derecha) y el 13 compiten por la segunda posici¨®n (6,9% y 6,5%, respectivamente). Kaan, el que m¨¢s espacio da a im¨¢genes de Gaza grabadas por palestinos, queda en ¨²ltimo lugar (4,8%), seg¨²n los ¨²ltimos datos, difundidos este jueves.
Algunos de sus periodistas publican exclusivas de gran valor sobre pol¨ªtica nacional y diplomacia, y fiscalizan de cerca al Gobierno de Benjam¨ªn Netanyahu. Pero el tono general en momentos como este ¨Dy en particular tras el trauma del ataque del 7 de octubre¨D tiene tres elementos comunes: los palestinos son ignorados o deshumanizados, el ej¨¦rcito es sacrosanto e Israel vive rodeado de pa¨ªses que lo odian o no lo entienden. Son tendencias que ya exist¨ªan y ahora se llevan al extremo.
¡°Cr¨ªticas antisemitas¡±
En el canal 12, el m¨¢s visto, un grupo de expertos y tertulianos comenta la afirmaci¨®n en la v¨ªspera del jefe de la diplomacia europea, Josep Borrell, de que Israel usa el hambre en Gaza como ¡°arma de guerra¡±. ¡°Es una postura casi antisemita¡±, opina un comentarista. ¡°Totalmente¡±, responde el presentador. ¡°A Borrell y a [el secretario general de la ONU, Ant¨®nio] Guterres hay que explicarles que no entienden nada, que quien usa el hambre como arma de guerra es Ham¨¢s¡±, argumenta Harel Horev, historiador e investigador de asuntos palestinos en el Centro Moshe Dayan.
La tertulia repasa c¨®mo las televisiones en el mundo est¨¢n contando la redada en el hospital Al Shifa, en Gaza capital. Para analizarlo traen a Jonathan Conricus, hoy investigador y hace unas semanas el portavoz del ej¨¦rcito que acompa?¨® a los medios al hospital tras la primera redada, el pasado noviembre. Asegura que los medios internacionales est¨¢n en una ¡°campa?a contra Israel¡± y los periodistas en Gaza, dominados por Ham¨¢s. Luego dan paso a Alon Mizrahi, un peluquero voluntario que cort¨® el pelo a un soldado que ha muerto en la Franja, para recordar su ¨²ltimo encuentro.
¡°Es frustrante c¨®mo no convencemos al mundo occidental de lo que nos diferencia de una organizaci¨®n terrorista que utiliza medios sanitarios y a la poblaci¨®n como escudo humano¡±, lamenta el presentador de una tertulia en la televisi¨®n p¨²blica. Un comentarista explica el problema: ¡°Nosotros explicamos las cosas racionalmente a Europa, pero hay muchas emociones porque ven a los palestinos como la parte d¨¦bil¡±. Marko Moreno, exmilitar que ha aparecido horas antes en otro canal, insiste en esa idea: ¡°Nosotros no hablamos ¨¢rabe¡±. ¡°Hay millones de refugiados en Siria o Irak, pero solo all¨ª donde est¨¢n implicados jud¨ªos hablan de lo humanitario los [Joe] Biden, los [Antony] Blinken [secretario de Estado de EE UU] y las Falusi¡±, dice el exministro Bar-On, en referencia a la diputada dem¨®crata Nancy Pelosi, pronunciando mal el nombre. En hebreo, tanto la p y la f como la o y la u se escriben con la misma letra.
Al hablar de Al Shifa solo hay una versi¨®n y unas im¨¢genes: las que difunde la portavoc¨ªa del ej¨¦rcito israel¨ª. Todos los ¡°eliminados¡± son ¡°terroristas¡± y el debate gira m¨¢s bien sobre el ¨¦xito de comunicaci¨®n que est¨¢ suponiendo respecto a la anterior redada o si demoler el edificio.
Apenas se ve palestinos que no est¨¦n armados, encapuchados, identificados por el ej¨¦rcito como miembros de organizaciones armadas o en masa ondeando banderas. El canal 14 los muestra con orgullo detenidos con los ojos vendados y las manos atadas por detr¨¢s. Es, se?alan, el fruto de la obtenci¨®n de informaci¨®n de inteligencia.
Los bombardeos suelen ilustrarse con las as¨¦pticas tomas a¨¦reas ¨D sin sangre ni cad¨¢veres¨D que proporcionan las Fuerzas Armadas. Las televisiones conectan con militares desplegados en el terreno, que aportan el toque humano al saludar a sus familias. ¡°Qu¨¦ maravilloso es ver a nuestros soldados en el frente con este fr¨ªo¡±, lanza una presentadora al ver la nieve de fondo en los Altos del Gol¨¢n.
Ellos o nosotros
El subtexto es una idea muy extendida en Israel, sobre todo a partir de que Ham¨¢s matase a m¨¢s de 1.200 personas (en su mayor¨ªa civiles) y tomase m¨¢s de 240 rehenes el 7 de octubre . Es ¡°ellos¡± o ¡°nosotros¡±. El ellos a menudo no est¨¢ claro o alude a todos los palestinos. Lo expresa Moshe Pesel, diputado del Likud, el partido de Netanyahu, en una conexi¨®n desde la Knesset, el Parlamento nacional: ¡°La historia se repite. Todos los partidos sionistas nos enfrentamos a una situaci¨®n en la que tratan de exterminar al pueblo jud¨ªo, como hace 70 a?os. Es nuestra historia, generaci¨®n tras generaci¨®n¡±, se?ala. O, como lamenta Tratman: ¡°Est¨¢ en su ADN la eliminaci¨®n del pueblo jud¨ªo, no se puede cambiar¡±.
¡°?Qu¨¦ podemos hacer nosotros como pa¨ªs que quiere seguir siendo parte del mundo occidental y continuar con nuestra guerra tan justa?¡±, pregunta un presentador. Pnina Sharvit Baruj, investigadora del think-tank Instituto Nacional de Estudios de Seguridad, responde: ¡°Tenemos que tener en cuenta lo que importa a los estadounidenses y mostrar que no hay de verdad inanici¨®n [en Gaza], para permitirnos m¨¢s libertad de operaci¨®n¡±. Las sanciones a los colonos aprobadas por la Uni¨®n Europea tienen un lado positivo porque les ¡°permite mostrar que hacen algo sin da?ar nuestra capacidad de combatir¡±.
Los temas y debates giran en torno a ejes similares: Ham¨¢s roba la ayuda humanitaria, pero el mundo culpa a Israel y eso genera un problema de imagen. ¡°No solo Eurovisi¨®n, contin¨²a la campa?a antiisrael¨ª¡±, informa el Canal 12 para hablar de una iniciativa para expulsar a los clubes del pa¨ªs de las competiciones de f¨²tbol de la UEFA por la invasi¨®n de Gaza. Un v¨ªdeo proporcionada por el ej¨¦rcito prueba que la milicia libanesa Hezbol¨¢ utiliza ambulancias para sus operaciones. En Al Shifa, los soldados hallaron en una caja fuerte un sobre con dinero ¡ª¡±incluso con bendiciones¡±, se indigna un comentarista¨D que acaba interpretado como financiaci¨®n a Ham¨¢s, cuando est¨¢ marcado en ¨¢rabe como un regalo del movimiento islamista (que gobierna la Franja desde 2007) al hospital.
El lenguaje es muy revelador. En el canal p¨²blico dan paso a la noticia de la muerte en combate de un soldado con la frase: ¡°La guerra en Gaza sigue dejando v¨ªctimas¡±. Los barrios enteros reducidos a escombros muestran la ¡°fortaleza¡± del ej¨¦rcito. En el di¨¢logo por un segundo alto el fuego que tiene lugar en Qatar, los israel¨ªes presentan ¡°propuestas¡± o recurren a estrategias negociadoras. Anat Hochberg-Marom, experta en seguridad internacional y crisis geopol¨ªticas, llama en el canal 12 ¡°herramienta de presi¨®n¡± a la amenaza de invadir Rafah y defiende la ¡°presi¨®n militar¡± para ¡°hacer avanzar las negociaciones¡±. Ham¨¢s, en cambio, hace ¡°manipulaciones¡±. ¡°Cogemos nuestra europeidad y occidentalidad para tratar de entender qu¨¦ pasa por su cabeza. Pero son yihadistas¡±, argumenta Tratman. ¡°Si mata a su gente, c¨®mo le van a importar los rehenes¡±.
Israel es generalmente ¡°nosotros¡± y los soldados, ¡°nuestras fuerzas¡±. Los palestinos, ¡°ellos¡±. ¡°Seguiremos acompa?ando a nuestros soldados, h¨¦roes y queridos¡±, se?ala un presentador del canal 14 para dar paso a publicidad. La cortinilla nuestra a un soldado rezando en el Muro de las Lamentaciones de Jerusal¨¦n, con la frase: ¡°Con la ayuda de Dios, juntos venceremos¡±.
Solo voces jud¨ªas
Salvo alg¨²n caso aislado, solo hablan jud¨ªos. Las cr¨ªticas no suelen ser de fondo, sino por oposici¨®n a Netanyahu, cuentas pendientes o estrategias electorales. Se centran m¨¢s en los presupuestos, la relaci¨®n con Estados Unidos o el d¨ªa despu¨¦s de la guerra. Yair Gol¨¢n, el comandante general en la reserva y exviceministro de Econom¨ªa por el partido pacifista de izquierdas Meretz que aspira ahora a liderar el laborismo, apoya la invasi¨®n de Rafah (que la comunidad internacional teme que genere una nueva tragedia) porque la valoraci¨®n ¡°profesional¡± ¨Des decir, militar¨D sobre su necesidad es ¡°muy clara¡±. En el canal 14, un comentarista aboga por ¡°entrar en Rafah y destrozar los hospitales¡±.
Tambi¨¦n priman las explicaciones simplistas o basadas en la asunci¨®n de que Israel busca la paz (pero se ve obligado a combatir) y los ¨¢rabes, la guerra, salvo que est¨¦n ¡°disuadidos¡± por la brutalidad de la potencial respuesta. Que Israel venga favoreciendo una escalada en su frontera con L¨ªbano se interpreta como una demostraci¨®n de m¨²sculo. Un comentarista econ¨®mico, Shmuel Almas, se?ala en el canal 14 que el ¡°¨²nico motivo¡± por el que Hezbol¨¢ no responde con un conflicto abierto es porque la hundida econom¨ªa libanesa no podr¨ªa afrontar semejante destrucci¨®n.
La abogada Rawyah Handaklo lleva un programa contra el crimen en su comunidad ¨¢rabe-israel¨ª y habla del tema en la radiotelevisi¨®n p¨²blica. Van 41 homicidios en lo que va de a?o. La presentadora le inquiere sobre la ¡°responsabilidad de la poblaci¨®n ¨¢rabe¡±. ¡°A veces me molesta esa pregunta¡±, admite Handaklo. Hace a?os, mafias lideradas por jud¨ªos se mataban en plena calle en Israel y nadie preguntaba por la ¡°responsabilidad¡± de la mayor¨ªa jud¨ªa en el crimen.
En el canal 14, el racismo, el sentimiento de superioridad respecto a los palestinos y el discurso deshumanizador aflora cada dos por tres en los debates, que contienen todos los elementos del populismo de derechas: las cr¨ªticas a la correcci¨®n pol¨ªtica, a la izquierda y al feminismo. Tambi¨¦n la idea de que existe un Estado profundo enfrentado a la voluntad del pueblo. El presentador da paso a las im¨¢genes de bombardeos en Gaza con la frase: ¡°Nos animamos un poco con las explosiones y disparos¡±. El v¨ªdeo lleva de fondo un rap-pop de dos famosos ultraderechistas (Subliminal y La sombra) con frases como ¡°Buenos d¨ªas, Gaza; otro nazi muerto; o ¡°No soy un peque?o jud¨ªo cobarde con las rodillas temblorosas, soy un jud¨ªo con potencia de fuego, humo y palabras¡±.
El festival llega con el asunto de las ¡°violaciones por motivos nacionalistas¡±. ¡°Seg¨²n la izquierda feminista, las violaciones eran por la masculinidad t¨®xica, el patriarcado o porque los hombres no bajan la tapa del inodoro [¡] Y no, aqu¨ª no luchamos desde hace 120 a?os [los primeros pasos del sionismo] por la situaci¨®n de la mujer¡±, se?ala el presentador. Las cifras de la polic¨ªa, seg¨²n las cuales solo nueve de cada 500 violaciones de palestinos a jud¨ªas tienen un elemento pol¨ªtico, son falsas. El problema es que ¡°Mahoma viol¨® a una ni?a¡± y esta es una ¡°guerra religiosa¡± a la que el pa¨ªs ha abierto los ojos a ra¨ªz de la violencia sexual el 7 de octubre. ¡°Lo que nos hacen ahora los antisemitas en la ONU, nos lo hicieron antes las organizaciones de izquierda¡±, argumenta Alhanan Groner, del peri¨®dico ultranacionalista Hakol Hayehud¨ª. El presentador se?ala provocador: ¡°Habr¨¢ gente que diga: ¡®?Vaya debate racista!¡±.
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