La nieta de Mussolini deja el partido de Meloni porque lo considera demasiado de derechas
Rachele, concejala en Roma, abandona la formaci¨®n de la primera ministra ante sus discrepancias en temas de derechos sociales. Ingresa en Forza Italia, fundada por Berlusconi, que cree m¨¢s cercana a su ¡°sensibilidad moderada y centrista¡±
Una nieta del fundador del fascismo, Benito Mussolini, ha descubierto que es m¨¢s moderada que el partido de ultraderecha Hermanos de Italia, liderado por la primera ministra, Giorgia Meloni, y que a¨²n lleva en su s¨ªmbolo la llama que arde sobre la tumba del Duce. Rachele Mussolini, concejala en Roma de esta formaci¨®n, se va porque le parece demasiado de derechas. Principalmente, en derechos sociales, la l¨ªnea de choque m¨¢s visible en los ¨²ltimos meses en los debates sobre inmigraci¨®n, familia o la comunidad LGTBI+.
Se va a Forza Italia, el partido fundado por Silvio Berlusconi y tambi¨¦n socio del Gobierno de coalici¨®n, que trabaja desde hace meses un perfil propio de una derecha m¨¢s civilizada, marcando las distancias precisamente en esos temas. ¡°Para m¨ª es tiempo de pasar p¨¢gina y llegar a un partido que siento m¨¢s cercano a mi sensibilidad moderada y centrista¡±, ha explicado la edil en redes sociales.
Es un s¨ªntoma m¨¢s ¨Dmuy significativo por el apellido en juego¨D de las grietas cada vez m¨¢s visibles en el Ejecutivo de Meloni, integrado por dos formaciones de ultraderecha que compiten ferozmente entre s¨ª, Hermanos de Italia y La Liga, y una tercera, Forza Italia, que intenta hacerse con todo el espacio de centro que van dejando. Y eso incluye la acogida y fichaje de pr¨®fugos de los otros dos partidos que huyen del extremismo. Ya antes de las elecciones europeas, Marina Berlusconi, hija del magnate, confi¨® en que los partidos euroesc¨¦pticos no obtuvieran buen resultado y dijo que ¡°si hablamos de aborto, fin de vida o derechos LGTBI+, me siento m¨¢s en sinton¨ªa con la izquierda m¨¢s sensata¡±.
Ahora, por ejemplo, Rachele Mussolini est¨¢ con Forza Italia en el debate que ha planteado este verano, para fastidio de sus socios, resucitando la idea del llamado Ius scholae: dar la nacionalidad italiana a los hijos de inmigrantes que cumplan un ciclo de estudios de 10 a?os, en vez de esperar a comenzar los tr¨¢mites a los 18 a?os. ¡°?Y por qu¨¦ no?¡±, ha explicado Mussolini en una entrevista a La Repubblica. ¡°Es natural conceder la ciudadan¨ªa a un chico que a lo mejor ha nacido en Italia y que habla el dialecto romano mejor que yo. Es un modo para aplacar los problemas de integraci¨®n, que de otro modo se agudizan. Es tambi¨¦n un enriquecimiento si las culturas se encuentran, en el respeto de las tradiciones¡±. Decir esto en Hermanos de Italia, partido volcado en cortar de ra¨ªz la inmigraci¨®n y que ve la patria y la identidad italiana en peligro, es casi un anatema.
Tambi¨¦n ha apoyado los derechos de las personas LGTBI+ y las uniones civiles. Separada, con dos hijas, nunca se lleg¨® a casar y cree que la familia tradicional solo es un modelo m¨¢s de familia. En los Juegos Ol¨ªmpicos se desmarc¨® de los ataques a la boxeadora argelina Imane Khelif ¨Dla ultraderecha dijo que no era una mujer¨D tras derrotar a una p¨²gil italiana. Mussolini defendi¨® a Khelif: ¡°Ha sido una caza de brujas indigna, ha sido linchada injustamente¡±.
Contraria al saludo fascista
Rachele Mussolini, de 50 a?os y que tiene el nombre de su abuela, la esposa del fascista, es m¨¢s joven y menos conocida que su volc¨¢nica hermanastra Alessandra, de 61, que tambi¨¦n se ha dedicado a la pol¨ªtica. Es hija del segundo matrimonio de Romano, uno de los cincos hijos del dictador y m¨²sico de jazz, mientras que la madre de Alessandra era la hermana de Sophia Loren. Las dos hermanastras no se hablan demasiado. Sin embargo, mientras Alessandra no ha conseguido la reelecci¨®n para el Parlamento Europeo y lleva a?os en declive, tras una vida en la que ha mezclado pol¨ªtica y far¨¢ndula ¨Dactriz; grab¨® un disco vendido solo en Jap¨®n; tertuliana famosa por sus n¨²meros en la tele; o concursante de realities¨D; Rachele es una figura en ascenso y con cierto tir¨®n.
La edil de Roma se present¨® hace dos legislaturas a las municipales de la capital y en las ¨²ltimas fue la candidata m¨¢s votada de la ciudad (en un sistema de listas abiertas). Su apellido sigue siendo magn¨¦tico para los nost¨¢lgicos del Duce, que abundan en Roma, la ciudad de Meloni y de todo su c¨ªrculo, que creci¨® en el partido posfascista MSI (Movimiento Social Italiano), origen del actual Hermanos de Italia. Rachele Mussolini se ha declarado abiertamente contraria a toda la parafernalia de los saludos romanos, que proliferan en concentraciones de ultraderecha, como algo anacr¨®nico, del pasado; igual que la famosa llama tricolor del s¨ªmbolo de Hermanos de Italia.
Lo curioso es que se ha especulado con que su marcha del partido se debe a que quiere dar un salto en pol¨ªtica y no fue incluida por Meloni en las listas de las elecciones europeas. Precisamente, porque su apellido es una pesada carga en un momento en que la primera ministra quer¨ªa presentarse en Europa como una derecha que no ten¨ªa nada que ver con el fascismo. Ahora, la moderada parece ser la nieta de Mussolini; Meloni, al menos en Italia, es m¨¢s de ultraderecha que ella.
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