Scholz se presenta como garant¨ªa para evitar la escalada de Europa con Rusia pese a los sondeos electorales adversos
El SPD, tras d¨ªas de dudas, designa al impopular canciller como candidato para las elecciones anticipadas del 23 de febrero
El canciller alem¨¢n, Olaf Scholz, encara las complicadas elecciones del 23 de febrero con una convicci¨®n: las cuestiones de ¡°paz y seguridad¡± ser¨¢n decisivas. Y ¨¦l se postula como la garant¨ªa para evitar que la guerra en Ucrania lleve a ¡°una escalada¡± entre la OTAN y Rusia.
El impopular Scholz recibi¨® este lunes por unanimidad la bendici¨®n de la ejecutiva del Partido Socialdem¨®crata Alem¨¢n (SPD) para ser candidato a las elecciones anticipadas del 23 de febrero. El canciller repetir¨¢ como candidato pese al fracaso de la coalici¨®n tripartita que ¨¦l encabezaba y que se ha roto casi un a?o antes de expirar la legislatura.
La decisi¨®n del SPD zanja el debate sobre una posible candidatura de recambio con el ministro de Defensa, el popular Boris Pistorius. Los sondeos sit¨²an a los socialdem¨®cratas, con Scholz de candidato, en tercera posici¨®n, por detr¨¢s de los democristianos de Friedrich Merz, favorito para sucederle, y de la extrema derecha de Alternativa para Alemania (AfD).
¡°En estas elecciones¡±, dijo Scholz, ¡°deben decidirse muchas cosas, y est¨¢n pasando muchas cosas en el mundo que preocupan a las ciudadanas y los ciudadanos de nuestro pa¨ªs. Por encima de todo, las cuestiones que tienen que ver con la paz y la seguridad¡±.
En una rueda de prensa en la Willy-Brand-Haus, sede del SPD en Berl¨ªn, Scholz reivindic¨® que Alemania ha sido, y seguir¨¢ siendo, el pa¨ªs de la Uni¨®n Europea que m¨¢s ayuda a Ucrania ante la agresi¨®n rusa. Al mismo tiempo, afirm¨® que esta ayuda tiene l¨ªmites claros. Sobrepasarlos, en su opini¨®n, podr¨ªa conducir a un enfrentamiento directo entre los aliados occidentales y Mosc¨².
¡°El Gobierno que lidero ha actuado de tal manera que lo hemos hecho todo para que esta guerra no escalase hacia una guerra entre la OTAN y Rusia¡±, dijo. ¡°Y sigue siendo un desaf¨ªo central, tambi¨¦n ahora¡±.
Scholz tiene dos l¨ªneas rojas. La primera es no enviar misiles de crucero Taurus. La segunda, rechazar que Ucrania dispare armas alemanas contra territorio ruso. Lo justifica porque considera que, en ambos casos, Alemania correr¨ªa el riesgo de convertirse en parte en la contienda y provocar¨ªa la escalada b¨¦lica.
Con esta posici¨®n, marca distancias con EE UU, Reino Unido y Francia, los principales aliados occidentales. Y en Alemania, busca un punto de equilibrio entre sus socios de Gobierno ecologistas o los democristianos, de un lado, y la izquierda populista y la extrema derecha, del otro. Los primeros son partidarios de intensificar la ayuda a Ucrania. Los segundos se oponen a dar m¨¢s ayuda al pa¨ªs agredido y defienden buscar la paz con la Rusia de Vlad¨ªmir Putin.
Scholz piensa que puede presentarse como el candidato que atesora experiencia ejecutiva y el que ha gestionado crisis internacionales. Tambi¨¦n como el garante de la cohesi¨®n social frente a Merz, que encarna el ala conservadora y liberal de la democracia cristiana. Cree que en la confrontaci¨®n ideol¨®gica con el democristiano puede salir ganando. De ah¨ª que defienda, por ejemplo, aumentar impuestos a los m¨¢s ricos y se presente como el valedor de las ¡°pensiones estables¡±.
Pero afronta una campa?a casi imposible. Lo demuestran las dudas de destacados socialdem¨®cratas que en los ¨²ltimos d¨ªas se pronunciaron a favor de Pistorius antes de cerrar filas con el canciller.
En la rueda de prensa para oficializar su candidatura, en la sede del SPD, le observaba la estatua de 3,50 metros de altura y 500 kilos de Willy Brandt, el miembro m¨¢s venerado del santoral socialdem¨®crata alem¨¢n y el primer canciller de este partido desde la fundaci¨®n de la Rep¨²blica Federal en 1949. Brandt cay¨® en 1974, al descubrirse que uno de sus colaboradores m¨¢s estrechos era un esp¨ªa de la Alemania Oriental.
El sucesor de Brandt, el tambi¨¦n socialdem¨®crata Helmut Schmidt, cay¨® en 1982 cuando sus aliados liberales cambiaron de bando y le derrotaron en una moci¨®n de censura. El tercer socialdem¨®crata en llegar a la canciller¨ªa fue Gerhard Schr?der en 1998 pero, tras ser reelegido en 2002, tambi¨¦n concluy¨® su mandato antes de tiempo, en 2005, tras una rebeli¨®n en las filas del SPD por sus reformas econ¨®micas.
Todos los cancilleres socialdem¨®cratas han acabado mal, repudiados por los suyos o antes de tiempo. Scholz, que no habr¨¢ podido llegar al final de la legislatura, lo tendr¨¢ dif¨ªcil para apartarse de estos precedentes.
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