Rom¨¢n Belmonte, profesor y bi¨®logo: ¡°Las pantallas roban el sue?o, hay chiquillos de 12 a?os durmi¨¦ndose a la una de la madrugada¡±

Rom¨¢n Belmonte (Albacete, 44 a?os) es uno de los divulgadores de literatura infantil y juvenil (LIJ) m¨¢s reconocidos de Espa?a. Diecis¨¦is a?os ha cumplido su blog Donde viven los monstruos, un referente para lectores, profesores, madres y padres y, en general, para cualquier persona interesada por la LIJ y sedienta de recomendaciones. Adem¨¢s, Belmonte es bi¨®logo y profesor de Biolog¨ªa de Secundaria. Una vocaci¨®n y una profesi¨®n que est¨¢n muy relacionadas con su ¨²ltimo libro, A pierna suelta (Igl¨², 2023), un manual divulgativo ilustrado por Ana Rodr¨ªguez sobre uno de los pilares de salud m¨¢s olvidados por la sociedad y que m¨¢s misterios sigue escondiendo para investigadores y cient¨ªficos: el sue?o.

¡°Este libro tiene su origen en unas notas que ten¨ªa guardadas desde hace mucho tiempo. Cuando estudiaba en la Universidad tuve una asignatura optativa, Etolog¨ªa, en la que abordamos el tema del sue?o. A m¨ª me llam¨® tanto la atenci¨®n que empec¨¦ a informarme y a recopilar datos curiosos. Muchos de ellos est¨¢n hoy en este manual¡±, explica a EL PA?S. El autor recalca varias veces la idea de ¡°manual¡± en contraposici¨®n a la de ¨¢lbum ilustrado informativo, un g¨¦nero al alza en el sector editorial infantil.

¡°El libro ha dado muchas vueltas, porque hab¨ªa editores que quer¨ªan los fuegos de artificio propios de los ¨¢lbumes ilustrados informativos, pero mi idea desde el principio era hacer un manual, algo que realmente tuviese contenido. ?ltimamente, hay mucha ilustraci¨®n, mucho color, pero luego hay muy poco contenido y la informaci¨®n se queda coja¡±, sostiene Belmonte, que aclara que su idea ha sido dar forma a un libro familiar, accesible y atractivo tanto para un ni?o de 8 a?os como para un adolescente de 14 o para un padre o una madre.

PREGUNTA. Hay muchos ¨¢lbumes ilustrados informativos de todo lo que uno se pueda imaginar, pero no sobre la ciencia del sue?o cuando, como escribe, ¡°nos pasamos un tercio de la vida durmiendo¡±. ?Demuestra esto que en la tr¨ªada de la vida saludable (alimentaci¨®n, ejercicio f¨ªsico, descanso) el ¨²ltimo sigue siendo el gran olvidado?

RESPUESTA. Por supuesto. Es que al sue?o parece que nunca nos importa quitarle tiempo. Y ahora, con la vor¨¢gine de vidas que llevamos, con esa necesidad que tenemos de escuchar el ¨²ltimo podcast, ver la ¨²ltima serie, de trabajar a todas horas, pues acabamos dej¨¢ndolo de lado, y es una parcela superimportante de nuestra salud. F¨ªjate si lo es que sin el sue?o nuestra especie no habr¨ªa sobrevivido.

P. Seg¨²n los ¨²ltimos datos disponibles del estudio Changes in sleep duration in Spanish children aged 2¨C14 years from 1987 to 2011, los ni?os espa?oles entre estas edades habr¨ªan perdido 27 minutos de sue?o.

R. Solo tienes que ver c¨®mo se ponen a dormir los chavales: con el m¨®vil entre las manos, que es lo peor que hay. Las pantallas nos est¨¢n robando horas de sue?o a todos. Primero porque nos pasamos el tiempo haciendo scroll sin saber parar, y despu¨¦s porque la luz que emiten las pantallas es fatal para conciliar el sue?o. La prueba es que a una persona que se pone a mirar el m¨®vil antes de dormir le cuesta much¨ªsimo m¨¢s conciliar el sue?o que a otra que no.

P. Se estima que casi el 52% de los ni?os de Primaria, seg¨²n datos de la Asociaci¨®n Espa?ola de Pediatr¨ªa de Atenci¨®n Primaria, van a clase con d¨¦ficit cr¨®nico de sue?o. En Secundaria la cosa todav¨ªa es peor.

R. Yo lo noto mucho en clase. Siempre est¨¢n supercansados, no rinden durante el d¨ªa, se tiran en la mesa, no quieren hacer nada¡­ Y luego les preguntas: ¡°?A qu¨¦ hora te acostaste ayer?¡±. Y te dicen que a las doce o una de la noche. ?Chiquillos de 12 a?os que luego entran a las ocho de la ma?ana a clase, que se pasan siete horas en el instituto y que por la tarde tienen no s¨¦ cu¨¢ntas extraescolares, partidos de baloncesto, de f¨²tbol o nataci¨®n!

P. Los adolescentes, se?alan los expertos, tienen retraso de fase. Es decir, tienden de forma natural a dormirse m¨¢s tarde y a necesitar levantarse tambi¨¦n m¨¢s tarde. Por eso est¨¢n reclamando, desde sociedades m¨¦dicas y cient¨ªficas como la Asociaci¨®n Espa?ola de Pediatr¨ªa y la Sociedad Espa?ola de Sue?o, que los horarios escolares se atrasen y que las extraescolares arranquen antes.

R. Yo no tendr¨ªa problema si es lo mejor para ellos, pero son decisiones pol¨ªticas. S¨ª que veo que, incluso cuando no son actividades extraescolares regladas, pienso por ejemplo en el gimnasio, muchos chavales van a ¨²ltima hora del d¨ªa a hacer pesas. No son conscientes de que el ejercicio les activa. Y a eso hay que a?adir que luego cenan como campeones y para terminar se ponen un rato con el m¨®vil. Ya tenemos una bomba de relojer¨ªa. Al final les dan las dos de la madrugada despiertos porque est¨¢n para correr una marat¨®n, no para irse a dormir.

P. En el libro recoge varios consejos para un buen descanso.

R. En mi casa, cuando era peque?o, a las diez est¨¢bamos todos acostados. Eso se llevaba a rajatabla. Y hoy en d¨ªa yo mismo, si no pasa nada, a las once de la noche estoy acostado todos los d¨ªas, porque me tengo que levantar a las siete. Y siempre dejando el m¨®vil en la otra punta de la casa, porque inconscientemente el hecho de tener el m¨®vil al lado te provoca una especie de dependencia, de querer saber, un ¡°?qu¨¦ me estoy perdiendo mientras duermo?¡±. Es como los fumadores empedernidos, que se despiertan a media noche para fumar un cigarro. Con el m¨®vil a muchos chavales les pasa igual.

P. Seg¨²n un estudio, Reading Can Reduce Stress (Leer puede reducir el estr¨¦s, en espa?ol), liderado por investigadores de la Universidad de Sussex (Reino Unido), bastan seis minutos de lectura en la cama para que el ritmo cardiaco, la tensi¨®n muscular y los dem¨¢s indicadores recuperen niveles normales para conducirnos al sue?o.

R. S¨ª, s¨ª. Leer es un ejercicio que relaja mucho, que te sosiega, porque para leer bien tienes que estar en calma, es un acto ¨ªntimo, silencioso, tranquilo, y creo que eso debe facilitar el sue?o. El problema es que vivimos en un mundo en el que tenemos muchas distracciones que nosotros mismos elegimos. Queremos abarcarlo todo, pero al final no abarcamos nada. Queremos dormir, pero a la vez queremos ganar una partida al FIFA, dar likes en Instagram, ver la ¨²ltima serie de moda, escuchar el ¨²ltimo podcast¡­ Y en ese contexto leer es una cosa complicada y por eso es un ejercicio que cada vez hay menos gente dispuesta a hacer. Les cuesta a los chavales y nos cuesta a nosotros, porque la cultura audiovisual lo ha copado todo. Al final, t¨² puedes seguir activo mientras escuchas algo o ves algo ¡ªaunque te enteres de la mitad¡ª, pero para leer algo te tienes que parar a hacerlo; y eso es complicado en el mundo de hoy, en el que parece que consumimos y consumimos sin poder parar, siendo multitarea. As¨ª la lectura es imposible.

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