Ventajas e inconvenientes de pasar las vacaciones con otras familias

Cuando las parejas ya han perdido el entusiasmo inicial muchas hacen planes con otras parejas. Y cuando los padres ya han perdido el impulso de montar planes familiares se plantean hacer vacaciones con otras familias. Algunos son muy lanzados y directamente compran a medias una casa en un pueblo para estar atados toda la vida. Otros se animan a un viaje compartido o a alquilar una casa rural durante varios d¨ªas. Y los m¨¢s prudentes prefieren un teaser de un fin de semana en un hotel, cada uno en su habitaci¨®n.

Mis experiencias siempre han sido positivas: con varios amigos y sus hijos hemos hecho vacaciones por Espa?a e internacionales, con los cl¨¢sicos imprevistos con hijos (accidentes, enfermedades, lesiones, motores que no arrancan, restaurantes donde te atienden mal) y siempre hemos acabado muy felices todos y tan amigos como antes. O m¨¢s. Aun as¨ª, para que esta columna te sea ¨²til de cara a las vacaciones, aqu¨ª desgrano en general las ventajas e inconvenientes de compartir vacaciones con otras familias y as¨ª evitar sorpresas.

Las ventajas

1. El entusiasmo se conserva durante todas las vacaciones. Porque, aunque un par de personas est¨¦n cansadas o de mal humor o se pierdan con el coche, siempre habr¨¢ alguien con energ¨ªa y ganas que encuentre el camino. O que llame para preguntar o reservar, que se ocupe de los ni?os cuando est¨¦n pesaditos¡­ En definitiva, alguien que recuerde al grupo la suerte de poderse permitir unas vacaciones y lo importante de disfrutar el momento.
2. Tus hijos tendr¨¢n amigos (si vais con gente de su clase) o ni?os de m¨¢s o menos su edad (los hijos de tus amigos de antes de tener cr¨ªos) para ir jugando a todas horas. O para aburrirse juntos mientras esperan para comer o cenar.
3. Los adultos tendr¨¦is compa?¨ªa y ayuda para gestionarlo todo mucho m¨¢s r¨¢pido (si todo el mundo es efectivo).
4. Todo el mundo tendr¨¢ buena conversaci¨®n asegurada.
5. Te puedes repartir el cuidado de los ni?os. Cuando hay varios adultos competentes puedes delegar el cuidado de los menores y tener un peque?o momento de relax. Quiz¨¢ incluso puedes llegar a leer unos cuantos cap¨ªtulos de ese libro que llevas meses arrastrando arriba o abajo. O de manera m¨¢s prosaica, puedes ir al lavabo sin tener que cargar con tu bolso, el cochecito y los ni?os.
6. Cuando se va en grupo y se aprovechan ofertas o se compra a lo bestia grandes cantidades quiz¨¢ sale todo un poco m¨¢s barato.
7. Si eres desconfiado, miedoso, precavido, paranoico, has visto demasiadas pel¨ªculas de terror o todo a la vez, en grupo te sentir¨¢s m¨¢s seguro. En especial, en lugares buc¨®licos y apartados de la civilizaci¨®n, que durante el d¨ªa son un remanso de paz, pero por la noche son un lugar remoto y oscuro lleno de sombras que podr¨ªan ser un ¨¢rbol movi¨¦ndose con el viento o un asesino en serie con mucho tiempo libre.
8. Cuando haya alg¨²n enfado con la pareja es posible que las otras familias te entiendan, te apoyen o, por lo menos, te suelten una mirada comprensiva y silenciosa que implica ¡°estoy contigo, bro, pero no quiero que me ri?an a m¨ª tambi¨¦n¡±.
9. Si en el hotel o la piscina de los apartamentos o el transporte colectivo vas a acabar coincidiendo y charlando con alguien similar, o si vais a apuntaros a un viaje organizado con desconocidos, ?por qu¨¦ no traerte los conocidos ya de casa y que sean amigos?
10. Por fin podr¨¢s salir en las fotos familiares de tu propia familia sin tenerle que dejar el m¨®vil a un desconocido y temer que se largue corriendo con el tel¨¦fono.

Los inconvenientes

1. Cuando los ni?os se ponen pesados, que eso llega tarde o temprano, tienes que aguantar a m¨¢s ni?os (en especial, ni?os que no son tuyos y que, quiz¨¢, educar¨ªas de otra manera).
2. Si los ni?os de las distintas familias se enfadan o se pelean, y la cosa no se resuelve bien, esto puede afectar a la convivencia y a la amistad en general.
3. Durante unos d¨ªas convivir¨¢n distintos modelos de crianza y, a veces, pueden ser totalmente opuestos. Adem¨¢s, siempre hay la sombra de una duda que nunca se habla: en caso de necesidad, ?cada adulto puede corregir o re?ir a todos los ni?os o solo a los suyos?
4. Si sois un grupo grande cuesta m¨¢s encontrar sitio. Mesa para 8 o 12 no es tan f¨¢cil como mesa para 3 o 4. Esto obliga a reservar con antelaci¨®n o a esperar m¨¢s rato para pasar todos, mientras los ni?os se quejan en grupo.
5. Sincronizar horarios es bastante imposible. Unos se levantan pronto y luego se les acaba la energ¨ªa a media tarde, otros bajan tarde a desayunar, pero despu¨¦s a las once de la noche est¨¢n con m¨¢s vidilla que el DJ de una boda. Unos tienen hambre antes que otros, otros tardan m¨¢s en subirse al coche y arrancar. Al final, unos habr¨¢n esperado m¨¢s que otros y se les ir¨¢ agotando la paciencia.
6. Cada uno gasta el dinero a su ritmo y seg¨²n sus posibilidades y gustos. Si pas¨¢is muchos d¨ªas y lo vais pagando todo a medias, en alg¨²n momento alguna de las familias fruncir¨¢ el ce?o cuando traigan la cuenta y pensar¨¢: ¡°Con unos bocatas y una botella de agua ya tir¨¢bamos hasta la noche y nos habr¨ªamos ahorrado este pastizal¡±.
7. A m¨¢s gente, m¨¢s diversidad de intereses. Unos querr¨¢n ver museos; otros, paisajes; otros, la tele. Unos priorizar¨¢n los gustos de sus hijos mientras otros lo har¨¢n con sus propios intereses. Y si todas las actividades se realizan en grupo, siempre habr¨¢ un par de personas con mala cara quej¨¢ndose de que quieren estar en otro lado.

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