Asesinada una comandante de la polic¨ªa de Michoac¨¢n y dos escoltas

Criminales han asesinado en la madrugada de este lunes a Cristal Garc¨ªa Hurtado, comandante de la polic¨ªa estatal de Michoac¨¢n. Los sicarios emboscaron a la jefa policial cuando transitaba en su patrulla por la carretera que comunica P¨¢tzcuaro con Uruapan. Los dos escoltas que la acompa?aban han muerto igualmente asesinados. Medios locales han se?alado que los criminales se ensa?aron con los cad¨¢veres de los agentes, que incluso habr¨ªan decapitado. Las autoridades no han confirmado este punto.

En un mensaje en su cuenta de Twitter, ahora X, la Secretar¨ªa de Seguridad P¨²blica del Estado ha condenado el ataque: ¡°Condenamos rotundamente el cobarde asesinato de nuestros compa?eros Guardias Civiles, quienes, en cumplimiento del deber policial, fueron cruelmente atacados. Colaboramos para que la Fiscal¨ªa de Michoac¨¢n realice las actuaciones necesarias para dar con los responsables de manera pronta¡±. Hasta la tarde de este lunes, la Fiscal¨ªa no hab¨ªa informado del caso.

El ataque ha ocurrido entre dos de las poblaciones m¨¢s importantes de Michoac¨¢n a nivel econ¨®mico. Por un lado, P¨¢tzcuaro es uno de los municipios m¨¢s tur¨ªsticos del Estado, catalogado como pueblo m¨¢gico. Por otro, Uruapan es la capital de la industria del aguacate, una de las m¨¢s potentes de M¨¦xico, cuya producci¨®n en el Estado alcanza un valor de m¨¢s de 30.000 millones de pesos cada a?o, unos 1.700 millones de d¨®lares.

Se ignora el motivo del ataque. M¨¦xico experimenta las consecuencias de la atomizaci¨®n del crimen organizado, producto de la embestida estatal, iniciada durante el Gobierno de Felipe Calder¨®n (2006-2012). La proliferaci¨®n de grupos criminales fuertemente armados en buena parte del territorio, con capacidad para someter econom¨ªas locales, sustituye el viejo paradigma, en que el crimen se asociaba al tr¨¢fico de drogas internacional. No es ya el narcotr¨¢fico, o no solo. Cualquier regi¨®n del pa¨ªs que genere alg¨²n tipo de riqueza es susceptible de sufrir la orde?a criminal.

El asesinato de las agentes se entiende as¨ª como parte de la econom¨ªa delictiva de un Estado, Michoac¨¢n, sometido a la violencia de diferentes actores desde hace d¨¦cadas. Hace diez a?os, grupos de trabajadores y campesinos se alzaron en armas en el Estado para exigir un alto a la delincuencia, caso particular de los Caballeros Templarios. Los grupos de autodefensas parecieron contener al crimen, pero con el tiempo acabaron por asimilar aquello contra lo que hab¨ªan peleado. Lo que queda de las autodefensas ahora es parte del panorama delictivo, en que campan adem¨¢s restos de los Templarios, grupos presuntamente asociados al Cartel Jalisco Nueva Generaci¨®n, y organizaciones locales, con una alta capacidad de fuego.

En un contexto as¨ª, polic¨ªas y agentes del Estado en general suelen ser objetivo de la delincuencia. A principios de mes, criminales asesinaron al menos a tres militares en Tepalcatepec, regi¨®n de Tierra Caliente. Los atacantes soltaron bombas caseras desde drones a los soldados. Seg¨²n la cuenta del Proyecto Azul Cobalto, que monitorea y sistematiza ataques mortales contra polic¨ªas en M¨¦xico, al menos 54 agentes han sido asesinados en el Estado durante la actual administraci¨®n, encabezada por Alfredo Ram¨ªrez Bedolla, de Morena, que inici¨® su mandato en octubre de 2021.

Los ataques contra polic¨ªas y militares trascienden a Michoac¨¢n: son un drama que comparten la mayor¨ªa de Estados. Seg¨²n la organizaci¨®n Causa en Com¨²n, que realiza un conteo parecido al de Azul Cobalto, solo este a?o ya van 59 asesinatos. La mayor¨ªa han ocurrido en Guanajuato, con 19, menci¨®n especial para la polic¨ªa municipal de Celaya, el Estado de M¨¦xico, con siete, y Baja California y Jalisco, con cinco cada uno.

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