Luisa Almaguer, la voz grave y afilada de la nueva canci¨®n transfeminista
La cantante mexicana reflexiona con EL PA?S acerca de su segundo ¨¢lbum experimental, ¡®Weyes¡¯, la violencia contra el colectivo, su colaboraci¨®n con el m¨²sico brit¨¢nico Damon Albarn y la marcha del Orgullo LGTBI+
Luisa Almaguer es expresiva. No logra esconder con palabras ni con gestos la indignaci¨®n que le provocan las injusticias sociales que percibe en el entorno. Ella misma ha corrido peligro. En 2019, public¨® Mataronomatar, un tema que la ha acompa?ado en todas sus actuaciones con el que trata de reflexionar acerca de la violencia sufrida por las mujeres transg¨¦nero. ¡±En M¨¦xico, los hombres son los que matan a las mujeres trans¡±, afirma de forma contundente. La cantante es una de las boyantes voces que encumbran la siempre vibrante escena cultural de Ciudad de M¨¦xico. Atiende a EL PA?S en una c¨¦ntrica terraza de la capital, donde habla acerca de su nuevo ¨¢lbum, Weyes, y reflexiona sobre las identidades, la lucha del movimiento LGTBI+ y su sorpresiva colaboraci¨®n sobre el escenario con el cantante de Gorillaz y Blur, Damon Albarn.
A Almaguer (Ciudad de M¨¦xico, 32 a?os) le gusta cantar, subirse a la tarima para actuar y hablarle al p¨²blico. ¡°El micr¨®fono y el escenario fueron algo con lo que siento que nac¨ª¡±, cuenta. Aunque siempre ha tenido el apoyo de sus padres en su hogar, conoce muy de cerca la crueldad del exterior. ¡°Ser trans definitivamente te politiza, te ponen en un lugar en donde te das cuenta de todo lo que est¨¢ mal y que tu vida realmente corre peligro por la estructura y por la manera en la que est¨¢ acomodado el mundo¡±. Y destaca ese concepto, el del peligro. En M¨¦xico, ser mujer y trans puede costar la vida. De 2008 a 2023, murieron asesinadas 701 personas trans en el pa¨ªs, seg¨²n los datos de la organizaci¨®n internacional Transrespect. Solo Brasil super¨® esa dura cifra.
La cantante ha llegado a ser v¨ªctima de la violencia social en numerosas ocasiones y eso ha inspirado algunas de sus letras, pero dice que nunca ha tratado de considerarse una cantante de protesta. ¡°Intento ser muy intuitiva cuando hago m¨²sica, ser muy honesta conmigo misma, intentar llegar a lo que quiero decir [¡] Ni me considero ni creo ser activista. Yo soy una cantante, y por las caracter¨ªsticas que tiene esta cantante, definitivamente se filtran ah¨ª lecturas o interpretaciones pol¨ªticas y dem¨¢s. Creo que est¨¢ bien, pero nunca soy completamente consciente de eso¡±, cuenta Luisa, con una voz ronca por naturaleza.
La carrera de Almaguer ha pasado por alg¨²n que otro papel como actriz y por los coqueteos en la industria del modelaje. Pero la m¨²sica contin¨²a llamando a su puerta. Lanz¨® con indiferencia su tema m¨¢s reproducido, Azotea, una cumbia experimental que cuenta con m¨¢s de 150.000 vistas en YouTube. Ahora busca darle una vuelta a esa situaci¨®n retomando ese g¨¦nero en Mar¨ªa, una nueva cumbia para cerrar su disco.
La inspiraci¨®n en un breve escrito
El amor ha sido el r¨ªo por el que ha fluido el arte de Almaguer. Hace un tiempo que envi¨® por WhatsApp un mensaje a un chico pidi¨¦ndole sinceridad. La respuesta desemboc¨® en un mar de dudas para la cantante. ¡°Este cabr¨®n no me pelaba¡±, confiesa. Afirma que ser trans fue lo que influy¨® en el comportamiento de aquel chico. Algo com¨²n en su d¨ªa a d¨ªa. El texto de ese mensaje pas¨® despu¨¦s a ser la letra de Wey, el primer adelanto de Weyes, un ¨¢lbum experimental de nueve canciones lanzado el pasado 19 de junio.
Cuando comenz¨® a cantar en sus primeros proyectos, sent¨ªa angustia por el sonido grave de su voz. ¡°Para m¨ª era un problema de alguna manera, porque yo no pasaba y jam¨¢s pasar¨¦ como una mujer cisg¨¦nero en el momento en el que abro la boca y hablo, porque tengo una voz muy grave¡±, afirma. Almaguer falsea la voz para hacerla m¨¢s aguda en momentos tan costumbristas como subir a un taxi o dar las gracias a un camarero. Se mantiene en alerta, todo con tal de evitar comentarios que siente como faltas de respeto. Tambi¨¦n intent¨® retocar su voz en sus comienzos musicales, poni¨¦ndole algunos efectos con la computadora para hacerla sonar m¨¢s aguda (¡°40.000 filtros y pedales¡±, exagera). Almaguer lleg¨® a investigar acerca de las operaciones de las cuerdas vocales que se realizan en Corea del Sur. ¡°Qu¨¦ bueno que jam¨¢s toqu¨¦ mi voz y que jam¨¢s hice nada para feminizarla ni mucho menos, porque ahora la entiendo como mi herramienta principal¡±.
Empez¨® a actuar en 2013 y su primer disco, Mataronomatar, sali¨® en 2019. Cinco a?os m¨¢s tarde fue invitada por el m¨²sico brit¨¢nico Damon Albarn para participar en Africa Express, un ecosistema creativo que re¨²ne a artistas y productores de varios pa¨ªses para actuar en vivo y grabar algunos temas. Subir a aquel escenario en el festival Bahidor¨¢, en Las Estacas (Morelos) fue un antes y despu¨¦s en su carrera. ¡°Fue incre¨ªble, como que me lleg¨® la carta de Hogwarts y yo as¨ª como una millenial, emocionad¨ªsima porque me lleg¨® una invitaci¨®n firmada¡±, relata.
Sinti¨® la invitaci¨®n como un gesto honesto. Almaguer siente que a veces se intenta nivelar las cuotas de diversidad de manera forzada. ¡°M¨¦tele un personaje trans porque si no, no somos woke, o en el alineamiento del festival no hay ni una trans, no hay nadie LGBT, pues llama a esta¡±, remeda. Y contin¨²a su reflexi¨®n ¡°Esto es parte de la violencia. A m¨ª me ha tocado en alg¨²n momento en el ba?o de un bar donde toqu¨¦ en Ciudad de M¨¦xico. Me dijeron ¡®no puedes entrar al ba?o de mujeres¡¯. ?C¨®mo que no puedo entrar? Es violencia descarada. Eso lo seguimos viviendo¡±.
Su experiencia con Albarn la cambi¨® mucho. El trabajo realizado durante el Africa Express ser¨¢ registrado en un disco y un documental, que ella espera que salgan este a?o. Pero ahora anda enfocada en su proyecto. Luisa ultima detalles para llevar las nueve canciones de Weyes a una gira por varias ciudades de la Rep¨²blica. Es la primera vez que lo har¨¢. Dice sentirse c¨®moda y did¨¢ctica sobre los escenarios, como una maestra que sale al pizarr¨®n a explicar c¨®mo sumar dos m¨¢s tres, pero con una voz poderosa que despierta el amor, la cercan¨ªa y el odio machista. Al final, las canciones del ¨¢lbum tratan sobre los hombres de su vida. Bromea cuando explica el concepto del disco, donde la figura masculina es protagonista. ¡°Una vez m¨¢s una mujer haciendo un disco sobre hombres. No aprend¨ª nada del feminismo, ?verdad?¡±, pregunta con sarcasmo.
En Weyes habla de sus relaciones con familiares o amantes que de alguna manera moldearon su forma de ser. Y no deja de lado el tema de la muerte, otro leitmotiv de su m¨²sica. ¡°El ¨¢lbum tambi¨¦n sirve para relacionar a los hombres con la propia muerte. En M¨¦xico los hombres son los que matan a las mujeres trans, no son las mujeres¡±, recalca. El Centro de Apoyo a las Identidades Trans (CAIT) tambi¨¦n ha realizado un recuento de v¨ªctimas, contabilizando en el pa¨ªs 590 asesinatos de personas trans entre 2007 y 2022. Unos 53 casos por a?o.
Una marcha multicolor
La visibilizaci¨®n del colectivo LGTBI muestra su cota m¨¢s alta cada mes de junio. El mes del Orgullo enarbola la bandera en contra de la violencia, las desigualdades y a favor de los derechos. Luisa est¨¢ segura de que ya no puede ser una sola marcha porque cada letra tiene sus propias realidades. ¡°La marcha del Orgullo ya es un acontecimiento tan grande en la Ciudad de M¨¦xico, se ha vuelto algo tan masivo, que ya es dif¨ªcil hablar de una sola marcha del Orgullo [...] Ver a tantas personas movi¨¦ndose en esta avenida tan importante [el Paseo de la Reforma] por sus derechos o simple disfrute es muy valioso, pero tambi¨¦n tenemos que seguir siendo muy cr¨ªtiques con la captaci¨®n de las marcas del gobierno y de banda que realmente no tienen nada que ver con la comunidad¡±, acota.
Almaguer tiene un discurso comprometido con la lucha de clases. Y lo lleva a la marcha que anualmente re¨²ne a millones de personas por todo el globo. ¡°No es lo mismo una persona trans de clase alta, blanca, que ha estudiado, que ha viajado, a una persona trans que est¨¦ en una parcela en este momento en Nayarit. Hay una grand¨ªsima diferencia y probablemente lo que pida una u otra en la marcha no tiene nada que ver [...] S¨ª hay algo que nos une, pero tambi¨¦n la clase pesa mucho, quiz¨¢ m¨¢s que lo otro [las diferentes minor¨ªas del colectivo]¡±.
Habla indignada y frunce el ce?o cuando habla pol¨ªtica. Viene de una familia cr¨ªtica ¡ªsus padres son profesores¡ª y se involucr¨® en las protestas por la elecci¨®n presidencial de 2012. Al preguntarle si cree que algo cambie en M¨¦xico en materia de inclusi¨®n con una mujer presidenta, contesta con un rotundo ¡°no¡±. ¡°Creo que ya hay varias pruebas de que las pol¨ªticas de identidades no funcionan para nada. Tener un presidente negro en Estados Unidos no cambi¨® para nada la realidad de las personas negras en ese pa¨ªs. No creo que aunque hubiera una presidenta trans, no binaria, vegana o antiespecista vaya a ser muy diferente, porque el sistema est¨¢ hecho para que quien sea que ocupe ese lugar tenga que ceder y doblegarse a los verdaderos intereses del Estado, que son el capital¡±, expone.
Almaguer abre el disco con Un d¨ªa nos vamos a morir, una bohemia aspiraci¨®n a aprovechar cada momento. El mar de gestos que encumbra su personalidad parecen rebajarse en los ¨²ltimos momentos de la entrevista.
¡ªUn d¨ªa nos vamos a morir.
¡ªYa nos vamos a morir, ?y luego qu¨¦? A todo le digo que s¨ª.
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