Coahuila, escenario desconocido

El periodista saltillense Roberto Orozco Melo contaba una an¨¦cdota de las ¨¦pocas en que ser candidato del PRI a un cargo de elecci¨®n popular pr¨¢cticamente garantizaba que se iba a ocupar el puesto. Era el a?o 1963 y Braulio Fern¨¢ndez Aguirre era el candidato del PRI a gobernador de Coahuila. En una gira por Sabinas, en el norte del estado, se le acerc¨® un vendedor de billetes de loter¨ªa y le ofreci¨® una serie de boletos. ¡°No, amigo, muchas gracias, pero yo tengo muy mala suerte¡±, le respondi¨® Fern¨¢ndez Aguirre. El vendedor no dej¨® al candidato soltarse tan f¨¢cil y le espet¨®: ¡°?Mala suerte, se?or, con ese chamb¨®n que se acaba de agarrar?¡±.

Sesenta a?os despu¨¦s, ya no hay candidatura que garantice el triunfo, pero la gubernatura de Coahuila todav¨ªa se persigue como si fuera el Premio Mayor.

Coahuila es uno de s¨®lo dos estados en el pa¨ªs que en los ¨²ltimos 90 a?os nunca han sido gobernador por un partido que no sea el PRI o sus antecesores. El Estado de M¨¦xico es el otro y ambos renovar¨¢n a sus gobernadores el 4 de junio. En Coahuila ser¨¢ una elecci¨®n in¨¦dita. Por primera vez los dos partidos que durante d¨¦cadas disputaron la gubernatura, el PRI y el PAN, ir¨¢n aliados en una candidatura, porque por primera vez un partido de izquierda est¨¢ en posici¨®n de ganar el estado.

La carrera para suceder al gobernador Miguel ?ngel Riquelme ya tiene a sus candidatos perfilados: Manolo Jim¨¦nez Salinas por el bloque PRI-PAN-PRD; Armando Guadiana, por Morena; Ricardo Mej¨ªa Berdeja, por el PT, y Lenin P¨¦rez Rivera por una alianza del partido local Uni¨®n Democr¨¢tica Coahuilense (UDC) y el Partido Verde.

Riquelme gan¨® en 2017 la elecci¨®n m¨¢s cerrada que ha tenido el PRI para la gubernatura de Coahuila, cuando gan¨® por 30 mil votos al PAN. Lleg¨® a la gubernatura en diciembre de ese a?o con el reto de mantener la tarea de pacificaci¨®n y reducci¨®n de violencia y un margen de maniobra financiero reducido por la ¡°megadeuda¡± heredada desde el gobierno de Humberto Moreira, a cuyo pago el estado debe destinar miles de millones de pesos al a?o.

Como gobernador priista, solo tuvo un a?o de administraci¨®n paralela a la de su correligionario Enrique Pe?a Nieto en la presidencia de la Rep¨²blica. Entrando a su segundo a?o de gobierno, lleg¨® el gobierno de L¨®pez Obrador.

La relaci¨®n no ha estado libre de tensiones, al contrario, est¨¢ marcada por ellas. Por ejemplo, en 2019 la decisi¨®n de mantener en M¨¦xico a migrantes que ped¨ªan asilo en Estados Unidos signific¨® un flujo de miles de personas a las ciudades fronterizas de Piedras Negras y Acu?a, demandando servicios sociales que el estado apenas pod¨ªa proveer sin apoyo del gobierno federal.

Otro frente abierto fue el de la miner¨ªa de carb¨®n, cuando la Comisi¨®n Federal de Electricidad cambi¨® el esquema de compras del mineral para su planta termoel¨¦ctrica en el norte del estado, y privilegiar a peque?os proveedores que anteriormente usaban al gobierno estatal como intermediario. CFE empez¨® a comprar m¨¢s carb¨®n a minas m¨¢s chicas, los llamados ¡°pocitos¡± que tienen nulas medidas de seguridad y donde las inspecciones de la Secretar¨ªa del Trabajo son, en el mejor de los casos, espor¨¢dicas.

La consecuencia es que en lo que va del actual gobierno han muerto en accidentes el doble de mineros (23) que en todo el sexenio de Pe?a Nieto (12). El m¨¢s sonado ocurri¨® en agosto de 2022 en la mina El Pinabete de Sabinas, donde 10 hombres murieron atrapados en una inundaci¨®n.

En 2020, al inicio de la pandemia de Covid-19, Riquelme fue uno de los impulsores de la llamada ¡°Alianza Federalista¡±, un grupo de gobernadores del PRI, PAN y PRD que exigieron al gobierno federal m¨¢s recursos para enfrentar la crisis sanitaria y la renovaci¨®n del pacto fiscal para redistribuir el presupuesto federal, de acuerdo con las aportaciones de cada estado a la econom¨ªa del pa¨ªs. Lleg¨® a tener 10 miembros, pero se debilit¨® luego de elecciones en varios estados donde los gobernadores ya son morenistas o no se quieren pelear con la Federaci¨®n.

Bajo este escenario, Riquelme comenz¨® a preparar su sucesi¨®n desde al menos 2020, perfilando al entonces alcalde de Saltillo, Jim¨¦nez Salinas, como candidato del PRI. Al terminar su gesti¨®n en la capital del estado, Jim¨¦nez fue designado secretario de Desarrollo Social, con el control de programas gubernamentales en un amplio espectro de pol¨ªticas p¨²blicas, como combate a la pobreza, salud y empleo, y la posibilidad de darse a conocer por todo el estado.

Al mismo tiempo, fue perfilando una alianza del PRI con el PAN y el PRD, en el entendido de que en pasadas elecciones la divisi¨®n del voto entre estos partidos hab¨ªa facilitado el avance de Morena, que arras¨® senadur¨ªas y diputaciones en la elecci¨®n federal de 2018.

El perfil de Jim¨¦nez Salinas se ajustaba a esta estrategia. De 38 a?os y una carrera como pol¨ªtico y empresario, tiene vasos comunicantes con los partidos que sostienen su alianza. Su abuelo Luis Horacio Salinas fue alcalde priista de Saltillo y su t¨ªo Miguel Arizpe Jim¨¦nez lo fue por el PAN.

Jim¨¦nez Salinas fue uno de los primeros en Saltillo que hace seis a?os apoy¨® la candidatura de Riquelme, quien como alcalde de Torre¨®n desde 2014 no formaba parte de grupos pol¨ªticos surgidos de la capital. Fue electo alcalde en 2017, al mismo tiempo que Riquelme gan¨® la gubernatura, y ahora es visto como el garante de continuidad en las pol¨ªticas del actual gobierno, en temas como seguridad y desarrollo econ¨®mico.

Pero se enfila a un escenario desconocido, en el que por primera vez el rival del PRI no es el PAN sino Morena, que controla el gobierno federal y poco a poco se ha hecho de la mayor¨ªa de las gubernaturas del pa¨ªs.

Al revisar el cuarteto de candidatos, lo primero que se nota es que Morena ha perdido a sus aliados tradicionales, el PT y el Verde, y en el caso local a la UDC, que ha hecho alianza con Morena desde 2021.

El rompimiento m¨¢s sonado fue el de Mej¨ªa Berdeja, quien fue subsecretario de Seguridad del gobierno federal desde 2018, y el ¨²nico de los aspirantes a la candidatura que ten¨ªa contacto frecuente con el presidente Andr¨¦s Manuel L¨®pez Obrador y que hab¨ªa recibido elogios de ¨¦ste.

Morena decidi¨® designar a su candidato mediante una serie de encuestas que arrojaron a Guadiana como el m¨¢s conocido y el de mejor intenci¨®n de voto.

Guadiana, un empresario de la miner¨ªa, salt¨® a la escena p¨²blica en 2009 cuando denunci¨® al gobierno de Humberto Moreira por defraudar a productores de carb¨®n. Fue candidato de Morena la gubernatura en 2017 y tras perder esa elecci¨®n fue postulado al Senado en 2018, esca?o que gan¨®. El hecho de tener en su haber dos campa?as estatales recientes fue el factor que ayud¨® en su alto nivel de conocimiento. En segundo lugar se coloc¨® Luis Fernando Salazar, quien en una trayectoria dentro del PAN hab¨ªa sido delegado de la Secretar¨ªa de Desarrollo Social, senador y diputado federal, pero que en 2018 se pas¨® a Morena.

Mej¨ªa, quien se ubic¨® en tercer lugar, denunci¨® las encuestas y acus¨® que se hab¨ªa vendido la candidatura. Renunci¨® a su cargo y consigui¨® que el PRT se separara de Morena en Coahuila para postularlo. Salazar, por su parte, reconoci¨® a Guadiana y fue nombrado su coordinador de la precampa?a, pero tres d¨ªas antes de que terminara el proceso interno, renunci¨®. Entre sus razones, aludi¨® a diferencias con el candidato pero tambi¨¦n con expriistas que hab¨ªan sido cercanos a Riquelme, como el diputado federal Shamir Fern¨¢ndez y el exalcalde de Torre¨®n, Jorge Luis Mor¨¢n, que se sumaron a la campa?a de Guadiana, quien a su vez acus¨® a su excoordinador de que ¡°nunca coordin¨® nada¡±.

El rompimiento de Mej¨ªa y las tensiones internas dentro del equipo de Guadiana hicieron mella en la fortaleza de Morena rumbo a las elecciones, pero hubo un rompimiento adicional, el de la UDC y el Verde. La UDC es un partido local fundado por su hoy candidato P¨¦rez Rivera, cuya fuerza ha estado concentrada principalmente en el norte del estado, donde han ganado varias alcald¨ªas. Hasta 2018 hab¨ªan hecho alianza con el PAN, pero en 2021 se coaligaron con Morena.

Sin embargo, la uni¨®n no dur¨® mucho y para este a?o P¨¦rez Rivera acusaba que Morena no hab¨ªa cumplido compromisos pactados, de modo que intent¨® primero una alianza con Movimiento Ciudadano, que no prosper¨® y luego se ali¨® con el Partido Verde, que en Coahuila siempre hab¨ªa jugado m¨¢s como sat¨¦lite del PRI. MC, por su parte, no postular¨¢ candidato.

Las fracturas no parecen calar en el ¨¢nimo del presidente, ni siquiera la salida de un colaborador tan cercano como lo fue Mej¨ªa Berdeja. De hecho, apuntan algunos operadores de Morena, esa renuncia le sirve al presidente para mandar un mensaje rumbo a la elecci¨®n de 2024. Seg¨²n estos morenistas, el presidente puede decir a las ¡°corcholatas¡± perdedoras en la encuesta de selecci¨®n que, no importa lo mucho que los estime el presidente, la encuesta manda y si a alguien no le gusta ah¨ª est¨¢ la puerta.

Coahuila ha sido un estado golpeado desde hace a?os. La guerra contra el narco dej¨® miles de muertos hace una d¨¦cada y con vastas zonas del estado bajo el control del crimen organizado. Ahora es de los estados m¨¢s seguros del pa¨ªs y los grupos criminales han sido debilitados, en una voltereta notable que se puede explicar a partir de un solo dato de Torre¨®n, la ciudad m¨¢s golpeada por la delincuencia: en 2012, la zona metropolitana ten¨ªa una tasa de 88 homicidios por cada 100 mil habitantes; en 2022 fue de 4.

Pero la violencia acecha desde los vecinos estados de Tamaulipas y Zacatecas y contenerla ser¨¢ el reto del pr¨®ximo gobernador. El estado sigue pagando la deuda de casi 40 mil millones de pesos asumida por el gobierno de Humberto Moreira entre 2006 y 2011. M¨¢s de la mitad de ese dinero nunca se comprob¨® y se sospecha que se us¨® para financiar campa?as pol¨ªticas del PRI en 2009 y 2010. El pr¨®ximo gobernador deber¨¢ asumir el pago de esa deuda, al que se destinan m¨¢s de 5 mil millones de pesos cada a?o, el 10% del presupuesto estatal.

Y el esc¨¢ndalo en torno a algunos protagonistas de ese endeudamiento, como el exgobernador Humberto Moreira y quien fuera su tesorero, Javier Villarreal, protagoniz¨® recientemente un cap¨ªtulo del juicio contra el exsecretario de Seguridad P¨²blica Genaro Garc¨ªa Luna, cuando Villarreal declar¨® que dinero del erario coahuilense fue para apoyar al expolic¨ªa hoy convicto.

Son apenas algunos de los retos que le esperan al siguiente gobierno, que ser¨¢ electo el pr¨®ximo 4 de junio y entrar¨¢ en funciones en diciembre.

En cuanto a los aspirantes, s¨®lo uno correr¨¢ con la buena suerte de Braulio Fern¨¢ndez Aguirre y los dem¨¢s con la mala suerte de la serie de los billetes de loter¨ªa que tuvo que comprar en Sabinas en medio de las carcajadas que le provoc¨® el reclamo del vendedor. Porque seg¨²n relat¨® Orozco Melo, ¡°no cierra ni para reintegro¡±.