?Biden ha cambiado? ?l mismo nos lo cuenta
El presidente de EEUU no es progresista en el sentido actual, sino el tipo de liberal que naci¨® de la Segunda Guerra Mundial: seguro de la grandeza de su pa¨ªs y con confianza en el Estado. En realidad, no ha cambiado; solamente est¨¢ haciendo todo a lo grande
?Qu¨¦ ha ocurrido con Joe Biden? Muchas personas cre¨ªan que el presidente de Estados Unidos era un incrementalista moderado, pero ahora est¨¢ promoviendo paquetes legislativos enormes que hacen muy felices a muchas personas de la izquierda progresista.
Cuando habl¨¦ con ¨¦l por tel¨¦fono la semana pasada, se lo pregunt¨¦. Parece que la respuesta es que¡ es complicado.
Al paso de las d¨¦cadas, los valores que lo impulsan han sido totalmente constantes y las pol¨ªticas que est¨¢ proponiendo ahora son parecidas a las que ha defendido durante d¨¦cadas.
Lo que es extremadamente diferente es la escala. Es como si una empresa que fabricaba lanchas recreativas empezara a hacer barcos trasatl¨¢nticos. Y eso sucede porque Biden cree que en un mundo posterior a la era de Trump no solo luchamos por salvar a la clase media, sino por sobrevivir como el pa¨ªs l¨ªder del planeta.
¡°Estamos en una especie de lugar en el que el resto del mundo est¨¢ empezando a volverse a mirar a China¡±, afirm¨® Biden. ¡°El comentario m¨¢s demoledor que alguien hizo despu¨¦s de que me eligieron ¡ªy no tanto acerca de m¨ª¡ª fue el del taoiseach [primer ministro] irland¨¦s, quien dijo: ¡®Bueno, Estados Unidos no puede ser el l¨ªder. Ni siquiera es capaz de entender la covid¡±.
Le pregunt¨¦ c¨®mo hab¨ªa formado su opini¨®n sobre la participaci¨®n que el gobierno debe tener en nuestras vidas y comenz¨® a hablar de su padre. Durante la Segunda Guerra Mundial, su padre administraba la sucursal de una empresa que readaptaba barcos mercantes. Despu¨¦s de la guerra, cuando abri¨® un negocio mayorista, su socio dilapid¨® todo el dinero en apuestas.
¡°Al terminar la guerra le estaba yendo bastante bien y fue cuando perdi¨® todo¡±, recuerda Biden. De ah¨ª en adelante, el padre de Biden tuvo muchas dificultades y aceptaba casi cualquier empleo que le dieran. ¡°Vi c¨®mo los golpes fueron haciendo que mi padre tuviera que tragarse su orgullo¡±.
Tal vez esta parezca una manera poco com¨²n de responder a una pregunta sobre la participaci¨®n del gobierno, pero eso es t¨ªpico de Biden. Algunas personas se forman su visi¨®n del mundo a partir de constructos ideol¨®gicos o de movimientos filos¨®ficos como el ¡°conservadurismo¡± o el ¡°progresismo¡±. La concepci¨®n del mundo de Biden surgi¨® de las experiencias vividas, sobre todo de su juventud y de la manera en que sus padres le ense?aron a ver el mundo. Ese es el origen de los fundamentos morales detr¨¢s de los grandes paquetes legislativos que est¨¢ proponiendo. La historia sobre su padre incluye los elementos esenciales de la concepci¨®n del mundo de Biden.
En primer lugar, una ubicaci¨®n social. Lo que importa no es s¨®lo la manera en que alguien ve una situaci¨®n, sino desde d¨®nde la ve. Biden ve la mayor parte de las situaciones desde la perspectiva de las personas a las que se les sol¨ªa llamar ¡°hombres comunes¡±, puesto que creci¨® rodeado de ellos, de dem¨®cratas de clase media y clase media-baja del periodo de Truman.
En segundo lugar, una conciencia profunda de las vicisitudes de la vida. Biden contaba que una vez su padre le mostr¨® una imagen de c¨®mo Olaf, el vikingo, el personaje de una tira c¨®mica, era maltratado por la vida y gritaba: ¡°?Por qu¨¦ yo?¡±, y Dios le respond¨ªa: ¡°?Por qu¨¦ no?¡±. Biden a¨²n conserva esa tira c¨®mica. ¡°Ese era mi padre¡±, a?ad¨ªa.
En tercer lugar, un enfoque absoluto en la dignidad humana. ¡°Me parece que los irlandeses emplean la palabra ¡®dignidad¡¯ con mayor frecuencia que cualquier otro grupo de personas¡±, se?al¨® Biden. ¡°Creo que es porque le das much¨ªsima importancia cuando te la han quitado¡±. En las jerarqu¨ªas ¨¦tnicas blancas de mediados de siglo en Estados Unidos, ¡°ser irland¨¦s era ser ciudadano de segunda clase¡±, recuerda Biden. ¡°Los ingleses eran los due?os del pueblo¡±.
A partir de estos tres elementos aparece una filosof¨ªa de gobierno ¡ªy posteriormente una serie de pol¨ªticas¡ª que trabaja con empe?o para apoyar a las personas en medio de los tropiezos de la vida, que les ofrece buenos empleos para que puedan vivir con dignidad y que combate la arrogancia de la riqueza.
Otro elemento de su concepci¨®n b¨¢sica del mundo procede de la ense?anza social cat¨®lica del siglo XX. Mencion¨® que su padre admiraba al fil¨®sofo cat¨®lico franc¨¦s Jacques Maritain, y m¨¢s adelante en la conversaci¨®n coment¨® que ¨¦l tambi¨¦n lo tom¨® como referente.
Al igual que la mayor¨ªa de las principales figuras de la ense?anza social cat¨®lica, Maritain puso un gran ¨¦nfasis en la solidaridad social, la interdependencia org¨¢nica de la gente y las comunidades. Si te impregnas de las ense?anzas de Maritain, te convences de que tenemos una importante responsabilidad mutua.
A partir de estos valores b¨¢sicos surge una agenda legislativa pr¨¢ctica. La Casa Blanca me dio una larga lista de diversas iniciativas de Biden, que ilustra el tiempo que ha estado defendiendo muchas de las ideas que est¨¢n en sus grandes paquetes actuales.
Seg¨²n el documento de la Casa Blanca, en 2003 Biden propuso de manera conjunta un proyecto de ley para ampliar los cr¨¦ditos fiscales reembolsables por dependientes. En 1993, introdujo la Ley para el Desarrollo de la Infraestructura y el Empleo. En 1974, vot¨® a favor de incrementar el salario m¨ªnimo, cosa que ha hecho varias veces desde entonces. En 2003, vot¨® a favor de crear un cr¨¦dito fiscal para cuidadores. En 1983, vot¨® para a?adir 1.500 millones de d¨®lares a la financiaci¨®n de la educaci¨®n.
Cuando vemos las leyes que ha promovido o apoyado durante d¨¦cadas, notamos que por lo general implicaban millones o unos cuantos miles de millones de d¨®lares. Ahora, los planes de Biden contemplan billones de d¨®lares. Entonces, ?qu¨¦ ha cambiado desde enero de 2017, cuando Barack Obama y ¨¦l dejaron sus cargos?
¡°Creo que las circunstancias han cambiado de manera radical. Estamos en un verdadero punto de inflexi¨®n en la historia¡±, se?al¨® Biden. Menciona que estamos experimentando una ¡°cuarta Revoluci¨®n industrial¡±, que comprende acontecimientos que van desde la llegada de la tecnolog¨ªa de la informaci¨®n hasta los cambios en el contexto competitivo global, pasando por el surgimiento del superestado chino.
Durante gran parte de su trayectoria en el Senado, Biden estuvo trabajando en asuntos de pol¨ªtica exterior, y en ocasiones habla sobre la pol¨ªtica interior a trav¨¦s de una ¨®ptica internacional o de alta estrategia.
¡°Hemos llegado a un punto en el que creo que nuestra competencia econ¨®mica tiene un impacto gigantesco en nuestra influencia y capacidad a nivel internacional¡±, afirm¨®.
Creci¨® en una ¨¦poca en que Estados Unidos era el l¨ªder mundial indiscutible y ahora ve que eso se est¨¢ yendo r¨¢pidamente de las manos a causa de la inversi¨®n insuficiente en investigaci¨®n y desarrollo.
¡°Nos estamos comiendo nuestras semillas de siembra¡±, continu¨® citando las palabras de algunos directores de empresas que le dijeron que el sector privado no estaba planeando a largo plazo.
En este contexto, para Biden los mayores riesgos est¨¢n en el incrementalismo.
¡°El peligro est¨¢ en no intentar crecer¡±, coment¨® Biden. ¡°Si no crecemos, no s¨¦ c¨®mo cambiaremos nuestra posici¨®n a nivel internacional y nuestra capacidad competitiva¡±.
El Gobierno de Biden se ha desmarcado tambi¨¦n en otros aspectos de la ideolog¨ªa predominante en los gobiernos de Clinton y Obama, aunque no se sabe cu¨¢nto de esto lo impulsa el mismo Biden y cu¨¢nto el equipo que lo rodea. Como se?al¨® Ronald Brownstein en The Atlantic, durante a?os la idea preponderante de los dem¨®cratas fue que los salarios aumentar¨ªan si la gente recib¨ªa m¨¢s educaci¨®n y capacitaci¨®n. La ideolog¨ªa predominante en la era de Biden es que tambi¨¦n hay que darle m¨¢s poder de negociaci¨®n colectiva a los trabajadores para equilibrar el poder empresarial. Durante a?os, los dem¨®cratas creyeron primordialmente que se pod¨ªa ayudar a los estadounidenses negros si se dise?aban pol¨ªticas ¡°dalt¨®nicas¡± para la clase obrera. Ahora, es m¨¢s probable que los funcionarios de Biden crean que se tienen que crear pol¨ªticas que tomen en cuenta la raza y beneficien de manera directa a las personas negras.
?As¨ª que ahora Biden se ha convertido en un progresista puro? En definitiva, Biden no lo cree. ¡°No les agrado a los progresistas porque no voy a emprender lo que tanto ellos como yo consideramos que es un programa socialista¡±. Biden piensa que la gente que corre grandes riesgos para generar riqueza deber obtener grandes recompensas.
No cree en los generosos planes de condonaci¨®n de deudas universitarias que se han ideado en la izquierda. ¡°No estoy de acuerdo con la idea de que vayas a la Universidad de Pensilvania a un costo total de 70.000 d¨®lares al a?o y el pueblo deba pagarlos¡±.
Tambi¨¦n existe una diferencia entre el modo en que Biden y la izquierda eval¨²an a las grandes empresas. Algunas personas de la izquierda hacen cr¨ªticas exhaustivas del capitalismo, mientras que Biden quiere que el capitalismo se mantenga dentro de los l¨ªmites de la integridad elemental. Alega que las empresas sol¨ªan asumir la responsabilidad por sus comunidades, pero que ahora solo se centran en crear valor para los accionistas. ¡°Hasta fines de la d¨¦cada de 1970, los directores generales de las empresas ganaban de 35 a 40 veces m¨¢s que el empleado promedio. Ahora ganan 320 veces m¨¢s. ?Qu¨¦ est¨¢n fomentando? ?Qu¨¦ est¨¢n haciendo? Como dec¨ªa mi madre: ¡®?Desde cu¨¢ndo ac¨¢ eres el jefe?¡¯¡±.
Le pregunt¨¦ d¨®nde est¨¢ el l¨ªmite de lo que deber¨ªa hacer el Gobierno y lo que no. Me dijo que los trabajadores deben ¡°ganar lo que ganan. Pero hay que darles una oportunidad. Creo que lo que nos hac¨ªa ser los primeros con respecto al resto del mundo al concluir el siglo XX era la noci¨®n de que cont¨¢bamos con educaci¨®n universal¡±. Luego a?adi¨®: ¡°Si hoy nos pusi¨¦ramos a pensar en qu¨¦ consiste la educaci¨®n p¨²blica en el siglo XXI, ?creen que alguien dir¨ªa que 12 a?os es suficiente? Yo no¡±.
Biden ha escrito que su abuelo y t¨ªos Finnegan eran dem¨®cratas de Truman y desconfiaban de Adlai Stevenson porque cre¨ªan que era demasiado blando. Desde hace mucho tiempo ha habido tensiones entre el ala sindical del Partido Dem¨®crata y el ala de los profesionistas universitarios.
Durante las d¨¦cadas pasadas, los herederos de Stevenson ¡ªgraduados del programa de becas Rhodes y de la Ivy League¡ª se impusieron a los herederos de Truman y el partido ha tendido a ver el mundo desde la posici¨®n de los universitarios.
Sin embargo, Biden pertenece al otro lado del partido.
¡°Cuando se sent¨ªa m¨¢s a gusto era cuando se reun¨ªa con los sindicalistas¡±, me dijo un asesor econ¨®mico que trabaj¨® con Biden m¨¢s de una d¨¦cada. Es muy significativo que, en su discurso del mes pasado ante el Congreso, haya presumido que ¡°casi el 90% de los empleos en el ¨¢rea de infraestructura creados con el Plan de Empleo Estadounidense no exigen un t¨ªtulo universitario; el 75% no requiere ning¨²n t¨ªtulo de pregrado¡±.
Biden no es progresista en el sentido vigente. Es el tipo de liberal que naci¨® de la Segunda Guerra Mundial: seguro de la grandeza de Estados Unidos, con confianza en el Estado, con poco inter¨¦s en las guerras culturales que surgieron a partir de la d¨¦cada de 1960, apasionado por los derechos civiles, con un profundo arraigo en las clases media y obrera.
En realidad, Biden no ha cambiado; solamente est¨¢ haciendo todo a lo grande.
David Brooks ha sido columnista de The New York Times desde 2003. Es el autor de The Road to Character y, m¨¢s recientemente, de The Second Mountain. @nytdavidbrooks
? 2021 The New York Times
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