Regreso a la edad de piedra en Ucrania
Las monstruosidades de la guerra contra la poblaci¨®n civil tienen su origen en la ¡°guerra contra el terror¡± de EE UU en Afganist¨¢n e Irak y la campa?a de Rusia en Chechenia

Ser¨¢ duro el invierno. Especialmente para los ucranios. En el mejor de los casos, con severas restricciones de luz, agua y gas. En el peor, con un brutal retroceso a la edad de piedra, a oscuras, sin alimentos y bajo las bombas, en la mayor de las inseguridades. Exactamente la amenaza que profiri¨® la Casa Blanca contra Pakist¨¢n en 2001 si no colaboraba en la lucha contra Al Qaeda tras los atentados del 11-S contra las Torres Gemelas y el Pent¨¢gono.
Aunque Vlad¨ªmir Putin no era un principiante, pues ya contaba con la demoledora experiencia de su guerra en Chechenia, a la vista est¨¢ que ha aprovechado las peores lecciones que impartieron George W. Bush y sus neocons como sombr¨ªos cap¨ªtulos de la guerra global de Estados Unidos contra el terror, de la que tanto provecho sacaron todos los autoritarismos, hasta ahora mismo: la guerra preventiva y unilateral, la desatenci¨®n a las convenciones internacionales, la anulaci¨®n del habeas corpus para los detenidos, los secuestros de sospechosos en territorio extranjero, la subrogaci¨®n de los interrogatorios a pa¨ªses dictatoriales, las mentiras de las armas de destrucci¨®n masiva, el limbo legal de Guant¨¢namo, las torturas de Abu Ghraib, los bombardeos indiscriminados sobre civiles, el uso sistem¨¢tico de los drones para liquidar a los enemigos declarados¡
Entre los resultados m¨¢s tangibles de aquella ense?anza perversa se cuenta el grupo Wagner, el ej¨¦rcito mercenario del oligarca y amigo de Putin Yevgeny Prigozhin. No se entender¨ªan sus actuales actuaciones en Ucrania, y anteriormente en Siria o en ?frica, sin el antecedente de la empresa Blackwater, la mayor de las milicias contratadas por Washington para combatir en Irak. Quien dict¨® propiamente esta lecci¨®n, tan bien asimilada por el Kremlin, fue Donald Rumsfeld, el secretario de Defensa de Bush, que concibi¨® una revoluci¨®n en los asuntos militares en la que ocupaba un lugar destacado la privatizaci¨®n de la guerra.
De esta hibridaci¨®n autoritaria entre la derecha neocon de Estados Unidos y el KGB poscomunista surge el actual monstruo. Su eficacia es asombrosa y no precisamente en tareas militares, en las que no destaca precisamente por sus victorias, sino por la abundante carne de ca?¨®n que proporciona a Putin para que alimente la m¨¢quina infernal de la guerra. Los reclutas salen de las prisiones, donde dejan espacio para que la polic¨ªa las llene de nuevo con los disidentes y los remisos a la leva forzosa. Dado que el contrato incluye la libertad a su vencimiento, tambi¨¦n libran a la sociedad de ciudadanos poco recomendables, puesto que en su inmensa mayor¨ªa o no regresan con vida o regresan mutilados. Sin modificaci¨®n legal alguna, la Federaci¨®n Rusa consigue los efectos de una aplicaci¨®n masiva y aleatoria de la pena de muerte. Es un aut¨¦ntico programa de limpieza social, l¨®gicamente encubierto, que se suma a los efectos de limpieza ¨¦tnica de un reclutamiento forzoso dirigido a conformar un ej¨¦rcito compuesto fundamentalmente por soldados originarios de las rep¨²blicas asi¨¢ticas y cauc¨¢sicas.
Las redes sociales han difundido las im¨¢genes de la ejecuci¨®n a mazazos de Evgeny Nuzhin, un miliciano reclutado en una c¨¢rcel rusa donde cumpl¨ªa condena por asesinato, que desert¨® solo llegar al frente y se pas¨® a territorio de Ucrania para combatir contra los rusos, seg¨²n sus propias palabras. No se sabe las circunstancias de su detenci¨®n por Wagner, si fue secuestrado en la calle en Kiev o canjeado como combatiente ruso por prisioneros ucranios. Como antes el Estado Isl¨¢mico con sus decapitaciones, la empresa militar rusa ha utilizado las redes sociales para exhibir un m¨¦todo de escarmiento para los desertores que ya hab¨ªa utilizado en Siria. Todo muy propio de la edad de piedra.
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