La ambientalista Marina Silva, una espina y una inc¨®gnita en el coraz¨®n del Gobierno de Lula
El ministerio de Medio Ambiente neg¨® la licencia para la exploraci¨®n petrol¨ªfera en la Amazonia, en la que Petrobras y otras empresas tienen puestos los ojos por barajarse all¨ª miles de millones de d¨®lares
Lula est¨¢ en Jap¨®n, mientras en Brasil le ha estallado una crisis que es la que menos desear¨ªa por tener repercusiones mundiales. Ata?e a una decisi¨®n del ministerio de Medio Ambiente, presidido por la emblem¨¢tica y ecologista Marina Silva, referente al delicado problema de la exploraci¨®n de petr¨®leo en la zona de la Amazonia.
El ministerio de Medio Ambiente acaba de negar la licencia para la exploraci¨®n del llamado oro negro en la zona amaz¨®nica de Amap¨¢, en la que tienen puestos los ojos desde la brasile?a Petrobras a las empresas extranjeras por barajarse all¨ª miles de millones de d¨®lares.
La decisi¨®n de la ministra Marina Silva ha creado ya la primera v¨ªctima en su propio partido. El senador, Randolfe Rodr¨ªguez, una de las piezas claves del partido La Red, fundado por ella y aliado del Gobierno ya ha anunciado su salida del partido.
Ahora Lula deber¨¢ decidir salom¨®nicamente sobre dos piezas claves de su Gobierno, Rondolfe y Silva, algo que crear¨¢ una polvareda en sus planes de presidir una Administraci¨®n unida y por primera vez con personajes desde el centro a la derecha.
La posible controversia con la decisi¨®n de la ministra Marina Silva de vetar la exploraci¨®n petrol¨ªfera en la Amazonia es m¨¢s emblem¨¢tica por el precedente del primer Gobierno de Lula, que sorprendi¨® nombrando ya entonces a Silva como ministra del Medio Ambiente. La famosa ecologista acab¨® abandonando el cargo por falta de apoyo entonces a sus exigencias medioambientales.
Lula tuvo la buena idea de convocar de nuevo a Marina Silva como ministra. El medio ambiente es un tema que 20 a?os despu¨¦s de su primer Gobierno se ha convertido en una de las mayores preocupaciones de la pol¨ªtica mundial. Y Silva fue emblem¨¢tica apostando esta vez en la lucha contra la destrucci¨®n de la Amazonia. Fue un abrazo de ambos pre?ado de simbolismo.
Con los ojos del mundo puestos en Brasil, donde su mayor tesoro, m¨¢s que su petr¨®leo es la riqueza de la Amazonia, la posible nueva crisis con Marina no siempre bien vista por su radicalidad dentro de su partido, el PT, ser¨ªa esta vez doblemente dram¨¢tico.
Lula va a necesitar de toda su gran capacidad negociadora para evitar que, por segunda vez, Marina Silva pueda acabar dejando su puesto. Y es que ella, con un historial parecido al de Lula que lleg¨® a la cumbre del poder desde la nada, no es una ministra cualquiera.
Silva es una referencia mundial en la lucha contra la destrucci¨®n del planeta. Con el agravante, ante buena parte del resto de los pol¨ªticos, de su reconocida integridad moral al no haberse nunca vista envuelta en esc¨¢ndalos de corrupci¨®n y de llevar una vida austera.
Recuerdo cuando en 2003, reci¨¦n nombrada ministra de Lula, la entrevist¨¦ en Brasilia para este peri¨®dico. Me choc¨® el piso sencillo, de clase media baja en el que viv¨ªa y la austeridad del mismo.
Cuando le pregunt¨¦ si no le importaba que la acusaran de ser excesivamente ingenua en sus ideales de defensa del medio ambiente, me record¨® la Biblia donde se cuenta que el profeta Abraham con 100 a?os plant¨® un ¨¢rbol. Cuando le recordaron que ¨¦l, por su edad ya no recoger¨ªa sus frutos respondi¨® que no lo hab¨ªa plantado para ¨¦l sino para los que le preceder¨¢n. No, Marina, una vez m¨¢s, no ser¨¢ una ministra f¨¢cil. Ni para el estratega Lula.
Suscr¨ªbase aqu¨ª a la newsletter de EL PA?S Am¨¦rica y reciba todas las claves informativas de la actualidad de la regi¨®n
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.