La vivienda estrangula la econom¨ªa
La Comisi¨®n Europea puede poner principios claros sobre un problema central para explicar la desigualdad y el descontento

Los problemas de acceso a la vivienda se sit¨²an entre las principales preocupaciones de los ciudadanos, por delante de los relacionados con la salud y la educaci¨®n. Es un problema generalizado que ahoga a las clases medias, que golpea con especial dureza a las familias con menos recursos, impide la emancipaci¨®n de los j¨®venes, acelera la desigualdad y ha disparado el n¨²mero de personas sin hogar en los pa¨ªses desarrollados. La subida de los tipos de inter¨¦s en los ¨²ltimos a?os no ha hecho sino agudizar una dificultad generada por una tormenta perfecta de elevados precios tanto de compra como de alquiler, bajo crecimiento de los salarios, falta de vivienda social, el freno de la construcci¨®n desde la crisis de 2008 y las trabas administrativas a la concesi¨®n de suelo, especialmente en grandes ciudades. Las zonas urbanas ya concentran el 56% de la poblaci¨®n del planeta, y el Banco Mundial prev¨¦ que para 2050 vivan en ellas siete de cada diez personas, por lo que el problema solo puede ir a peor si no se adoptan decisiones de planificaci¨®n territorial y de aumento de la oferta.
La presidenta de la Comisi¨®n Europea, Ursula von der Leyen, reconoce la centralidad de este asunto al crear una cartera espec¨ªfica de Energ¨ªa y Vivienda para su segundo mandato, que estar¨¢ en manos del dan¨¦s Dan Jorgensen, quien reportar¨¢ directamente a la vicepresidenta Teresa Ribera. Von der Leyen recoge as¨ª el guante lanzado en julio por el grupo de los Socialistas y Dem¨®cratas del Parlamento Europeo como condici¨®n para apoyar su reelecci¨®n. Es una cuesti¨®n capital para explicar la ansiedad de la clase media: en lo que va de d¨¦cada, los precios de los pisos han subido casi un 17% en la UE, y un 26% en los ¨²ltimos nueve a?os en Espa?a. Aunque la pol¨ªtica de vivienda es una competencia nacional, la intenci¨®n expresada por Von der Leyen pasa por elaborar un plan de casas asequibles a nivel europeo, con una estrategia para la construcci¨®n y la inversi¨®n, y permitir que se destinen a este cap¨ªtulo tanto fondos de cohesi¨®n como ayudas de Estado.
Luego cada pa¨ªs afronta retos espec¨ªficos. El Banco de Espa?a calcula que hacen falta 600.000 viviendas para equilibrar el mercado, cuando solo se construyen 90.000 al a?o, mientras se crean 275.000 hogares y hay una demanda de no residentes de otras 60.000 viviendas. A este escenario hay que sumar el uso tur¨ªstico al que muchos propietarios destinan sus pisos, lo que tensiona mucho el mercado del alquiler. A pesar de la evidencia, los ciudadanos ven c¨®mo las administraciones y la justicia son incapaces de abordar en serio este problema. A los diferentes niveles de responsabilidad y las carencias administrativas se suma el tacticismo partidista: el Gobierno quer¨ªa regular el alquiler de temporada para evitar que los arrendadores burlen la ley de vivienda, pero la semana pasada el Congreso, con el apoyo de PP, Vox, UPN y Junts, rechaz¨® la toma en consideraci¨®n de la norma.
Bienvenida sea pues una aproximaci¨®n europea a la crisis de la vivienda, sin menoscabo de las actuaciones que debe acometer cada pa¨ªs. La nueva Comisi¨®n tiene en la vivienda una gran oportunidad de evidenciar la raz¨®n de ser del proyecto europeo y de mostrar a los ciudadanos que la Uni¨®n es algo que les ata?e directamente. M¨¢s all¨¢ de la capacidad normativa que tenga Bruselas, poner direcci¨®n y principios al problema de la vivienda quiz¨¢ sea una de las tareas econ¨®micas m¨¢s urgentes que debe abordar el nuevo Colegio de Comisarios.
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