Nuevo consenso contra la violencia machista

Los grupos parlamentarios se han puesto de acuerdo para mejorar las herramientas para combatir una de nuestras mayores lacras, la violencia machista, que desde 2003, cuando comenz¨® la estad¨ªstica oficial, suma 1.295 mujeres asesinadas a manos de sus parejas o exparejas. Este lunes todos los partidos, a excepci¨®n del negacionista Vox, dieron luz verde a un informe a partir del cual renovar el Pacto de Estado contra la Violencia de G¨¦nero (aprobado por primera vez en 2017), un documento que recoge m¨¢s de 460 medidas. Es el resultado de los trabajos que se iniciaron la pasada legislatura y que se retomaron el pasado mayo.

Este acuerdo coincide con el 20? aniversario de la aprobaci¨®n de la ley integral contra la violencia de g¨¦nero, promovida por el primer Gobierno de Rodr¨ªguez Zapatero y que cont¨® en su momento con el consenso de todo el Parlamento. Pese al innegable avance de esta ley ¡ªpionera en el mundo¡ª, arrastra carencias como la insuficiente dotaci¨®n econ¨®mica, que deriva, entre otros problemas, en la sobrecarga de los profesionales que atienden a las v¨ªctimas.

Otro aspecto a mejorar es la atenci¨®n a los menores que conviven con sus progenitores en hogares donde el padre o la pareja de la madre ejerce violencia machista, a los que el entramado legal actual no logra proteger. El nuevo pacto aborda la conocida como violencia vicaria (ejercida sobre los menores para hacer da?o a las madres), y prev¨¦ mejoras en la formaci¨®n de los profesionales que tratan con ni?os, o la revisi¨®n de los protocolos de valoraci¨®n de riesgo para que tengan en cuenta a las v¨ªctimas menores de edad. Desde 2013, la violencia machista ha dejado 474 hu¨¦rfanos, y 62 menores asesinados.

Este pacto de Estado tambi¨¦n incluye medidas en el ¨¢mbito educativo, como el impulso de la educaci¨®n afectivo-sexual impartida por profesionales. La necesidad de sensibilizar a la poblaci¨®n sobre las actitudes machistas y las consecuencias en la vida de las mujeres ya se contempl¨® en la citada ley, adem¨¢s de en otras normativas, pero la realidad es que dentro del sistema educativo estos contenidos se imparten de forma muy irregular y escasa. Un 16% de los adolescentes entre 13 y 18 a?os aseguran no haber recibido ninguna formaci¨®n afectivo-sexual y otro 52% manifiesta haberlo hecho entre una y cuatro horas en total, seg¨²n un estudio de Save the Children.

Esta renovaci¨®n del pacto incluye medidas tan necesarias como tipificar en el C¨®digo Penal conductas que buscan ¡°limitar la econom¨ªa e independencia econ¨®mica de las mujeres¡± (por ejemplo, no pagar la pensi¨®n alimenticia o prohibirle trabajar). Todo avance es bienvenido, y el consenso debe ser celebrado. No se pueden escatimar recursos para erradicar todas las formas de violencia que impiden a¨²n a muchas mujeres disfrutar de una vida libre y digna.