C¨®mo curar las heridas que no se ven

¡°Me siento libre y con ganas de comerme el mundo¡±. Cuando Alex H. pronuncia esas palabras, una sonrisa enorme inunda su rostro en un gesto dulce que, adem¨¢s, es contagioso. ¡°Hoy puedo ser yo gracias a todo el trabajo que he hecho durante estos a?os para curarme las heridas, aceptarme como soy y quererme. Siempre doy las gracias a mi psic¨®loga por ayudarme a llegar hasta aqu¨ª¡±, agradece emocionado el chico, superviviente de la discriminaci¨®n y criminalizaci¨®n contra las personas LGTBI en Camer¨²n, pero tambi¨¦n superviviente de las fronteras.

Aunque hoy se autodefine como una ¡°persona muy optimista¡±, atr¨¢s deja un reguero de duras experiencias hasta llegar a Espa?a, donde recientemente ha obtenido protecci¨®n internacional. Siendo solo un ni?o escap¨® de su hogar; m¨¢s tarde huy¨® de su pa¨ªs y cruz¨® el mar en una tr¨¢gica traves¨ªa en la que perdi¨® a su compa?ero sentimental. Alex no olvida todo lo que ha vivido hasta llegar a esta orilla, pero lo afronta con dignidad. ¡°He aprendido a convivir con mis traumas, pero sin dejar que me controlen¡±, sentencia orgulloso.

Abandonar tu casa, atravesar fronteras y empezar un camino nuevo lejos de tu entorno deja huellas f¨ªsicas y psicol¨®gicas que requieren ser tratadas. Las personas migrantes, refugiadas y solicitantes de asilo suelen enfrentan condiciones adversas y traum¨¢ticas, bien sea por los propios motivos que las obligaron a huir, por las dificultades a?adidas durante el trayecto o por el duelo migratorio, que consiste en una ruptura con el pasado y la incertidumbre del presente. ¡°Por eso es fundamental dar prioridad a la detecci¨®n y tratamiento de enfermedades mentales de las personas que migran y garantizar su derecho a la salud¡±, asegura Carolina Vicente, miembro de Red Acoge, federaci¨®n de 20 organizaciones especializadas en la inclusi¨®n social de este colectivo en Espa?a.

La prevalencia de enfermedades mentales en personas solicitantes o beneficiarias de protecci¨®n internacional es mayor que en el resto de poblaci¨®n, seg¨²n el Informe sobre la salud de los refugiados y los migrantes en la Regi¨®n de Europa, elaborado por la Organizaci¨®n Mundial de la Salud. Un dato importante para tener en cuenta a la hora de abordar el acompa?amiento de estas personas en su llegada a los pa¨ªses de acogida y la necesidad de ofrecer una atenci¨®n especializada a su estado de salud.

Dentro del sistema de acogida para solicitantes de protecci¨®n internacional, la atenci¨®n psicol¨®gica est¨¢ contemplada como un servicio dentro del acompa?amiento psicosocial. ¡°Los primeros d¨ªas les explico todo, los acompa?o a conocer el barrio, d¨®nde pueden comprar, etc. As¨ª generamos poco a poco un v¨ªnculo, que es el primer paso antes de empezar un acompa?amiento terap¨¦utico¡±, explica Alba Aguilar Bello, psic¨®loga en C¨®rdoba Acoge, organizaci¨®n federada a Red Acoge.

Cuenta que las situaciones m¨¢s reiteradas son aquellas que presentan una sintomatolog¨ªa compatible con estr¨¦s postraum¨¢tico: pesadillas, problemas para dormir, estado de alerta constante, etc. ¡°Tratamos con supervivientes de experiencias de alto impacto, tambi¨¦n violentas, que han sufrido sobre todo en los trayectos migratorios. En este caso lo vemos especialmente con la poblaci¨®n africana¡±, describe la psic¨®loga.

Aguilar tambi¨¦n se?ala algunos retos para conseguir mejoras en todo lo que tiene que ver con la atenci¨®n en salud mental de quienes llegan en busca de refugio. ¡°Es muy importante aplicar una mirada transcultural en las intervenciones porque, aunque la expresi¨®n del malestar es universal, la forma de expresarlo s¨ª que puede ser totalmente diferente seg¨²n el contexto o el origen de la persona¡±, argumenta.

Sohrab coincide en este punto. ?l no es profesional sanitario, sino paciente. Lleg¨® de Afganist¨¢n en verano de 2021, pocos d¨ªas despu¨¦s de que el r¨¦gimen talib¨¢n volviera al poder. ¡°Al principio cre¨ªa que no necesitaba atenci¨®n psicol¨®gica, pero luego me he dado cuenta de que viene muy bien cuando vives lejos de tu familia, en un lugar nuevo, y puedes aprender herramientas para desenvolverte¡±, cuenta este joven de 19 a?os, que prefiere presentarse bajo seud¨®nimo.

Durante la conversaci¨®n, en la que recuerda por qu¨¦ y c¨®mo sali¨® de su tierra natal, y revela su sue?o de estudiar arquitectura, hace una parada para dejar algo claro: ¡°Hay una cosa muy importante, y es que es cercana; escucha mis problemas y conoce muy bien nuestra cultura, sabe muy bien c¨®mo tratarnos¡±, refiere el afgano sobre Aguilar.

La ONG Bayt al-thaqafa tiene la particularidad de ofrecer una atenci¨®n en salud mental muy especializada. Esta entidad, federada a Red Acoge en Barcelona, gestiona la acogida y acompa?amiento para 30 solicitantes de protecci¨®n internacional que se encuentran con la situaci¨®n a?adida de padecer una enfermedad mental grave, tales como esquizofrenia, trastornos de bipolaridad o estr¨¦s postraum¨¢tico grave. Y no solo atienden a aquellos que han migrado solos, tambi¨¦n a familias. ¡°Han llegado casos de alguna familia en la que alguno de los miembros presentaba un cuadro psiqui¨¢trico y que ven¨ªan de otros centros, sobre todos los m¨¢s masificados, en los que la convivencia era muy complicada; entonces se deriva a nuestros recursos. Y, si en ese momento tenemos la posibilidad de ubicarlos solos en alguno de nuestros pisos, lo hemos hecho. Por ejemplo, ahora tenemos a tres familias acogidas¡±, explica Nuria Moya, responsable de recursos de Salud Mental de Bayt al-thaqafa.

Hay por delante muchos retos para facilitar y mejorar el acceso a la salud mental de la poblaci¨®n migrante y refugiada

Se trata de un dispositivo especializado en el que, como as¨ª explican las trabajadoras de la entidad, la seguridad y confianza son clave en el acompa?amiento y proceso terap¨¦utico. Adem¨¢s, se sigue un itinerario de atenci¨®n pactado con la persona y se ofrece la atenci¨®n psiqui¨¢trica y psicosocial adecuada a cada una.

No obstante, los recursos disponibles para personas con estas necesidades son escasos. Adem¨¢s, hay por delante muchos retos para facilitar y mejorar el acceso a la salud mental de este sector de la poblaci¨®n, como es vencer la barrera idiom¨¢tica. ¡°Por ejemplo, la falta de int¨¦rpretes en la red de salud mental general p¨²blica es un problema. Hay recursos terap¨¦uticos, como pueden ser servicios de rehabilitaci¨®n comunitaria u hospitales de d¨ªa, a los que las personas que no hablan bien el idioma no pueden acceder¡±, denuncia esta especialista.

La duraci¨®n limitada del propio sistema de acogida tambi¨¦n puede ser otro gran inconveniente. Como los programas tienen fecha de caducidad, bien sea porque ha terminado su ciclo de un m¨¢ximo de dos a?os o porque sus peticiones de asilo han sido denegadas, las personas refugiadas o solicitantes de asilo, tambi¨¦n corren el riesgo de perder todo el camino recorrido en su salud mental y verse excluidas de otros recursos de acompa?amiento terap¨¦utico.

En definitiva, desde Red Acoge se hace un llamamiento a la ¡°necesidad de fortalecer la coordinaci¨®n entre administraciones e invertir recursos, no supeditando la situaci¨®n administrativa a la atenci¨®n de la enfermedad y ampliando los plazos del estudio del caso de protecci¨®n internacional con estas circunstancias excepcionales¡±. Estos son aspectos clave para avanzar en un compromiso social que garantice el derecho a la salud mental de las personas migrantes y refugiadas. Un camino largo, pero tarea de todas y todos.

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