Que no se pierda el talento de los j¨®venes pakistan¨ªes
El pa¨ªs asi¨¢tico, afectado por catastr¨®ficas inundaciones, necesita ayuda para evitar que los ni?os sufran a¨²n m¨¢s atrasos educativos
Despu¨¦s de las catastr¨®ficas inundaciones en Pakist¨¢n este a?o, las oportunidades para millones de j¨®venes pakistan¨ªes penden de un hilo. Las inundaciones han causado p¨¦rdidas de m¨¢s de 10.000 millones de euros y es urgente la asistencia para reconstruir. La crisis ser¨¢ una de las prioridades en la reuni¨®n del secretario general de las Naciones Unidas, Ant¨®nio Guterres, y 120 l¨ªderes de diversos pa¨ªses, este mes en Nueva York, para la Cumbre Sobre la Transformaci¨®n de la Educaci¨®n.
Aproximadamente 16 millones de ni?os han tenido que desplazarse por las inundaciones. Estos j¨®venes son los ¨²ltimos que sufrieron p¨¦rdidas educativas, pero no los ¨²nicos. Se suman a una poblaci¨®n ya enorme de 22,8 millones de ni?os pakistan¨ªes que no asisten a la escuela. Para empeorar a¨²n m¨¢s las cosas, despu¨¦s de las inundaciones suele haber deslizamientos de lodo y eso aumenta la amenaza de hambrunas. Ya se ha destruido aproximadamente el 45% de la tierra agr¨ªcola del pa¨ªs. La situaci¨®n humanitaria se deteriora r¨¢pidamente y est¨¢ llegando a niveles peligrosos.
En los ¨²ltimos a?os hemos visitado muchas de las ¨¢reas inundadas de Pakist¨¢n, donde han muerto m¨¢s de 1.100 personas, el agua se ha llevado m¨¢s de un mill¨®n de viviendas y afectado a 33 millones de pakistan¨ªes (de un total de 222.590.000 habitantes del pa¨ªs). En algunas provincias las precipitaciones han sido el qu¨ªntuplo del promedio de los ¨²ltimos 30 a?os para esta ¨¦poca, y 66 distritos est¨¢n declarados como zona de desastre (31 en Baluchist¨¢n, 23 en Sind, 9 en Jaiber Pastunju¨¢ y 3 en Punyab). Las inundaciones barrieron m¨¢s de 1,6 millones de hect¨¢reas y 800.000 cabezas de ganado.
Como en los desastres anteriores en Pakist¨¢n ¨Cdesde el terremoto de 2005 hasta las inundaciones de 2011¨C lo que m¨¢s hace falta son alimentos, carpas y lonas. Pero como les dir¨¢n a quienes participen en la Cumbre Sobre la Transformaci¨®n de la Educaci¨®n, Pakist¨¢n dista de ser el ¨²nico pa¨ªs donde la combinaci¨®n del cambio clim¨¢tico y los conflictos aumenta dram¨¢ticamente la cantidad de ni?os cuya educaci¨®n corre peligro. La conferencia del fondo Education Cannot Wait (la educaci¨®n no puede esperar) ser¨¢ en febrero. Falta demasiado. Los ni?os son quienes m¨¢s sufren por los desastres humanitarios actuales. Hace falta aumentar de inmediato el financiamiento para emergencias.
La inundaci¨®n ha da?ado o destruido al menos 18.000 escuelas tan solo en Pakist¨¢n
La inundaci¨®n ha da?ado o destruido al menos 18.000 escuelas tan solo en Pakist¨¢n (de ellas, 15.842 en Sind, 544 en Baluchist¨¢n y 1.180 en Punyab). Varios miles de escuelas adicionales son inseguras y 5.500 tuvieron que ser utilizadas para alojar a la gente desplazada de sus hogares.
Adem¨¢s, esas cifras son casi con certeza inferiores a escala del da?o que habr¨¢ que reparar. Debido a la lluvia sostenida y la elevaci¨®n de los niveles del agua, es imposible hacer una evaluaci¨®n adecuada, pero una estimaci¨®n r¨¢pida de las necesidades de 10 distritos de Baluchist¨¢n detect¨® que 977 aulas quedaron completamente destruidas y 975 resultaron da?adas, mientras que 577 escuelas se convirtieron en refugios temporales y no se pueden aprovechar para dar clases.
Los pakistan¨ªes necesitan ayuda para evitar que los ni?os sufran a¨²n m¨¢s atrasos educativos. Ya perdieron meses de clases durante la pandemia de la covid-19. Esa asistencia se puede utilizar para establecer centros temporales de aprendizaje y modos de aprendizaje alternativos en los distritos afectados por las inundaciones, donde los docentes tendr¨¢n que usar elementos para la ense?anza en emergencias como los llamados equipos de ¡°escuela en una caja¡±, carpas escuela y otros materiales. Despu¨¦s har¨¢ falta financiamiento adicional para secar, limpiar y desinfectar las escuelas, as¨ª como para brindar asistencia psicol¨®gica y social a algunos alumnos por los traumas de este verano.
Afortunadamente, ya ha comenzado la respuesta en algunos sitios. Se instalaron aproximadamente 30 centros temporales de aprendizaje para 3.600 ni?os (1.100 de ellos, ni?as) en Pishin y uno en Lasbela, Baluchist¨¢n. Pronto se enviar¨¢n materiales did¨¢cticos a 35.000 ni?os en Sind y Punyab.
Todas las organizaciones internacionales deben ampliar lo m¨¢ximo posible el apoyo financiero a la educaci¨®n
Pero esta asistencia cuesta dinero. Por eso, el Grupo de Trabajo de la ONU para el Sector Educativo est¨¢ solicitando 10,2 millones de euros adicionales para establecer espacios temporales de aprendizaje, distribuir materiales y limpiar escuelas. Por otra parte, adem¨¢s de los dos millones que Education Cannot Wait invierte actualmente en respuesta a las inundaciones en Pakist¨¢n, parte del financiamiento asignado a programas plurianuales de desarrollo humanitario tambi¨¦n se reasignar¨¢n a este pa¨ªs.
Tambi¨¦n otros pa¨ªses golpeados por diversas crisis, como Afganist¨¢n, Ucrania y Etiop¨ªa, necesitan urgentemente asistencia para emergencias. Con esas necesidades en mente, dos de los grandes pedidos en la Cumbre Sobre la Transformaci¨®n de la Educaci¨®n ser¨¢n el aumento de los presupuestos educativos para los pa¨ªses que enfrentan emergencias y que se except¨²e de recortes presupuestarios educativos a los pa¨ªses sujetos a los programas del Fondo Monetario Internacional.
Decenas de millones de ni?os ya est¨¢n tratando de ponerse al d¨ªa despu¨¦s de la pandemia. Todas las organizaciones internacionales deben ampliar lo m¨¢ximo posible el apoyo financiero a la educaci¨®n. No podemos permitir que se pierdan los talentos y el potencial de esta generaci¨®n de j¨®venes por nuestra negligencia. Nadie debe olvidar la promesa consagrada en el cuarto Objetivo de Desarrollo Sostenible: ¡°Garantizar una educaci¨®n inclusiva y equitativa de calidad y promover oportunidades de aprendizaje permanente para todos¡± para 2030. Todav¨ªa podemos lograrlo, pero solo si nos centramos en las necesidades de los ni?os y j¨®venes afectados por las crisis, refugiados y desplazados.
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