?Qu¨¦ es ser de izquierdas?

La pregunta provoca primero un silencio. Tras el silencio, una colecci¨®n de reacciones que retrasan la respuesta. Suspiros. Pausas valorativas. ?Qu¨¦ es ser de izquierdas en Espa?a? A la propia izquierda le cuesta definirse. Coinciden todos en que hay muchas izquierdas en la izquierda. Pero el concepto es tan escurridizo que hasta?Irene Montero duda en c¨®mo situar a Podemos del 1 al 10 en un eje izquierda-derecha. ¡°Podemos no cabe en ese eje. La gente que construye Podemos y que se siente de Podemos no tiene por qu¨¦ calificarse en esa escala¡±.

Podemos se muestra esquivo con el concepto. No terminan de definirse en la izquierda, pero quieren liderarla. Una aspiraci¨®n que coincide con la del PSOE: la hegemon¨ªa. El escenario actual le recuerda al historiador Abd¨®n Mateos a la pugna entre socialistas y comunistas a finales de los 70. ¡°En un momento dado el PSOE pens¨® que hab¨ªa que buscar el voto por la izquierda. Ten¨ªa que ver con la conquista frente al Partido Comunista y hubo cierta radicalizaci¨®n del discurso. Ahora, al estar muy igualados con Podemos, mientras no se decante la balanza hacia una de esas dos formaciones va a seguir esa lucha¡±.

La lucha es tambi¨¦n la del pedigr¨ª. Y de nuevo se repite la disputa de los 70. Los socialistas no quieren renunciar a su identidad. Eduardo Madina lo tiene claro, ¡°no hay que facilitar que sean otros con sus ideas los que penetren en ti, sino ser t¨² quien penetra con las tuyas en otros. El PSOE lo ha hecho siempre y creo que debe aspirar a eso¡±. Por eso los militantes no est¨¢n dispuestos a que desde Podemos les digan c¨®mo se defienden las esencias. Lo repite con vehemencia Cristina Hern¨¢ndez, militante del PSOE, feminista y exconcejala en Ciudad Rodrigo. ¡°A m¨ª que no vengan a dar lecciones de izquierdas porque no lo consiento. Nadie sabe la trayectoria pol¨ªtica que tenemos muchos de los que estamos abajo y por eso es importante moderar las formas¡±. Cristina pronuncia PSOE sin la P. Como lo hace Madina. Como Alberto Sotillos, que fue compa?ero suyo en un partido que abandon¨® hace dos a?os. ¡°Es la eterna lucha infernal infructuosa: yo represento m¨¢s a la izquierda, t¨² la representas menos. Y creo que el votante no est¨¢ en eso. Quiere saber qu¨¦ modelo de sociedad se propone¡±.

Frente a quienes buscan la pureza, est¨¢n los que sienten la izquierda m¨¢s como la adhesi¨®n a un grupo. Esta contradicci¨®n llev¨® al escritor Eduardo Mendicutti a acu?ar el t¨¦rmino izquierda de garraf¨®n. ¡°Estamos llegando a un extremo en el que puede haber gente que se proclame y se diga de izquierdas y se permita unos comportamientos que no son de izquierdas¡±. En 2011, impuls¨® junto a un grupo de intelectuales el manifiesto ¡°Una ilusi¨®n compartida¡± pidiendo una renovaci¨®n de ideas. ¡°Qued¨® en eso, en una ilusi¨®n¡± dice entre risas. Y se pone m¨¢s serio cuando se pregunta c¨®mo se pueden distinguir posiciones de izquierdas de lo que llama posiciones progresistas.

La contraposici¨®n se?ala directamente a otro de los problemas que surgen para definir a la izquierda: saber d¨®nde acaban los valores y d¨®nde empieza la ideolog¨ªa. Irene Montero cree que son indivisibles y que los valores se tienen que ¡°concretar en decisiones pol¨ªticas¡±. Pero el problema, seg¨²n el historiador Abd¨®n Mateos es que esos valores ¡°no son exclusivos de la izquierda. El pacifismo, la antiviolencia, el anticonsumismo, la honradez, el ecologismo, el antiglobalismo, la cultura. Es muy gen¨¦rico¡±.

Alberto Sotillos no tiene nada claro que la adhesi¨®n a esos conceptos convierta a un ciudadano en alguien de izquierdas. ¡°?Defender que la gente que se ama se case libremente es de izquierdas? Yo creo que eso no te hace de izquierdas. Luego tienes que ir a votar y no s¨¦ hasta qu¨¦ punto el votante va a la urna pensando en ampliar la libertad de las personas¡±. ¡°Es verdad que hay gente que dice ser de izquierdas sin saber en qu¨¦ consiste en todos los planos de la vida y en la expresi¨®n pol¨ªtica¡± apunta Eduardo Madina.

La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, zanja el debate al no hablar de valores sino de retos: "Creo que es necesario seguir reivindicando ser de izquierdas, pero adoptando una posici¨®n no esencialista que aprenda de los errores y de los aciertos, y que se centre en pr¨¢cticas y objetivos concretos m¨¢s que en etiquetas y carn¨¦s de partido. Estamos ante un cambio de ¨¦poca, en que es necesario repensar enteramente nuestras formas de hacer y nombrar la pol¨ªtica", concluye.

Se pregunta Abd¨®n Mateos hasta d¨®nde pesa la ideolog¨ªa en los nuevos votantes. ¡°Eso que se llama cultura pol¨ªtica y que ha sido un elemento central en la auto ubicaci¨®n y en el voto, por lo menos hasta ahora. Hoy a los m¨¢s j¨®venes hablar de la guerra de Espa?a a lo mejor les parece gal¨¢ctico¡±. Y, sin embargo, la defensa de ciertos valores progresistas es lo que ha determinado el voto en esas generaciones. Lo explica Marta Fraile, doctora en Ciencias Pol¨ªticas y en Ciencias Sociales que ha investigado para el CESIC el comportamiento electoral de los j¨®venes. ¡°Creo que el electorado es ahora mucho m¨¢s libre defini¨¦ndose en t¨¦rminos ideol¨®gicos. Est¨¢ menos anclado. Unos lo llaman ideolog¨ªa y otros lo llaman sentimiento y es algo que evoluciona con el tiempo¡±.

El sentimiento tiene que ver con aquella transversalidad que reclamaba el 15M. Sus protagonistas reclaman que sin las movilizaciones no se puede explicar la izquierda actual. Lo recuerdan, seis a?os despu¨¦s, Fabio G¨¢ndara y Tohil Delgado. Les vimos aquellos d¨ªas convertidos en portavoces de los indignados. G¨¢ndara reivindica la transversalidad del movimiento. ¡°Quer¨ªamos romper con las ideolog¨ªas estancas con un lenguaje m¨¢s inclusivo dando la bienvenida a todo el mundo. Eso ayud¨® a renovar la izquierda en nuestro pa¨ªs¡±.

¡°Yo sigo con el mismo talante. No me he movido¡±. Y no lo dice un joven, sino un viejo comunista, el director Jos¨¦ Luis Cuerda. ¡°Pero la izquierda en esa b¨²squeda de su identidad se est¨¢ olvidando de la derecha¡±. Es un riesgo que tambi¨¦n se repite hist¨®ricamente, mirarse el ombligo, perder de vista al verdadero rival pol¨ªtico en la lucha por definirse. ¡°Lo que tengo clar¨ªsimo, clar¨ªsimo¡± a?ade Eduardo Mendicutti ¡°es que en este pa¨ªs no va a haber un gobierno progresista si el PSOE se hunde, si se queda sin la capacidad de comandar una coalici¨®n de izquierdas. Es necesario que se una la izquierda¡±.

Todos los entrevistados coinciden en esa meta: el acercamiento de la izquierda. Lo incierto es el camino. Y la orientaci¨®n de la br¨²jula. ¡°En el di¨¢logo estamos¡± afirma Irene Montero refiri¨¦ndose al PSOE. ¡°Un di¨¢logo que tiene sus ritmos y tiene sus momentos. Para nosotros es muy urgente sacar al PP. Y ellos tienen un poco menos prisa o van m¨¢s lentos. No lo ven con tanta claridad ahora mismo¡±.

Las dos formaciones se asoman a ese di¨¢logo conscientes del reto: defender la pureza y la identidad y articular un discurso que seduzca a los votantes. En palabras del historiador Abd¨®n Mateos, ¡°falta de nuevo que haya no s¨®lo liderazgo, sino un proyecto que ilusione al electorado y que sea cre¨ªble¡±. En ese punto, en la mirada al futuro, surgen las dudas de Eduardo Madina. Prefiere no hablar sobre Pedro S¨¢nchez, pero cree ¡°el socialismo espa?ol no tiene hoy un proyecto de pa¨ªs. No lo tiene claro¡±. Mientras que Madina evita opinar sobre S¨¢nchez, Alberto Sotillos que comparti¨® con ¨¦l a?os de militancia, es tajante. ¡°A m¨ª que se me presente como de izquierdas y de las bases me cuesta much¨ªsimo porque ese no es el Pedro con el que he convivido en mis a?os de militancia. Es una respuesta err¨®nea a un problema real de no representaci¨®n¡±.

Dos meses despu¨¦s de las primarias, Pedro S¨¢nchez se mantiene como un enigma. Una interrogaci¨®n que seg¨²n Irene Montero solo se podr¨¢ despejar con los hechos, ¡°hay que ver que ocurre¡±.

Con un l¨ªder o con otro, tanto en el PSOE como en Podemos, la misi¨®n m¨¢s acuciante de la izquierda es superar el desencanto de los votantes. Sobre todo de los j¨®venes, universitarios con trabajos precarios o en el paro como Tohil Delgado. ¡°La mayor parte de la gente es de izquierdas. Pero eso no se traslada mec¨¢nicamente a las urnas porque hay millones de personas defraudadas, descontentas¡±. Tras a?os de experiencia en estudios electorales, Marta Fraile tiene claro que ¡°la izquierda es m¨¢s cr¨ªtica evaluando a su propio partido¡± y eso lleva a muchos simpatizantes a quedarse en casa.

¡°?Desencanto?¡± se pregunta Jos¨¦ Luis Cuerda. ¡°Eso les pasa por encantarse. Mientras no se fijen las prioridades, estamos haciendo el tonto. Sacar a Rajoy del Gobierno es lo primero¡±.

?Qu¨¦ izquierda conseguir¨¢ eso? La que sea capaz de trabajar codo con codo es la idea que repiten todos. Pero si definir c¨®mo se materializar¨ªa la colaboraci¨®n resulta dif¨ªcil para todos los entrevistados, a¨²n m¨¢s es responder a una pregunta que reclama un nombre. ?Qu¨¦ pol¨ªtico actual representa mejor los valores de la izquierda? Vuelven los soplidos. Los silencios. Las dudas. ¡°?Actual?¡±, preguntan. ¡°Marx era espabilado¡± se escabulle Cuerda. ¡°Colau y Carmena¡± responde G¨¢ndara. Cualquier alcalde del mundo rural, defiende Cristina Hern¨¢ndez, que conoce bien ese terreno. Sotillos se?ala a Madina sin pronunciar su nombre. Madina a Javier Fern¨¢ndez. Irene Montero se lo piensa sin decidirse, ¡°las espartanas de Coca-Cola y los activistas de la vivienda digna¡±. Algunos la mencionan a ella. Otros prefieren quedarse con el nombre de alguien que ya no est¨¢ y que resuena recurrente, Pedro Zerolo. Y as¨ª la cuesti¨®n se queda sin una respuesta ¨²nica. Flotando en el mismo suspiro sin consenso que produc¨ªa la primera, ?qu¨¦ es ser de izquierdas?