La reinserci¨®n es parte de la convivencia
El Gobierno se amilan¨® el ¨²ltimo a?o ante los portavoces de algunas asociaciones de v¨ªctimas a las que teme porque se sintieron utilizadas por el PP
El 20 de octubre de 2013, el dirigente del PP vasco I?aki Oyarzabal dijo: ¡°Si ETA da pasos hacia su disoluci¨®n iniciaremos el acercamiento de presos a c¨¢rceles vascas¡±. El 13 de octubre de 2016, el entonces ministro del Interior, Jorge Fern¨¢ndez, en una de sus ¨²ltimas declaraciones antes de cesar, dijo: ¡°Modificaremos la pol¨ªtica de dispersi¨®n penitenciaria con car¨¢cter general el d¨ªa que ETA se disuelva¡±. En tiempos m¨¢s cercanos, el 23 de abril de 2017, el dirigente del PP vasco Borja Semper dijo: ¡°Si ETA se disuelve ma?ana, la pol¨ªtica de dispersi¨®n cambiar¨¢ en 48 horas¡±. Las hemerotecas est¨¢n llenas de compromisos en esta direcci¨®n del Gobierno y del PP vasco. Sin embargo, de un a?o a ac¨¢, con Juan Ignacio Zoido en Interior, cambi¨® el discurso.
?Qu¨¦ ha pasado? Que de un a?o a esta parte ganaron credibilidad las noticias de que ETA se disolv¨ªa y al Gobierno le entr¨® v¨¦rtigo. Una vez m¨¢s se amilan¨® ante los portavoces de algunas asociaciones de v¨ªctimas a las que teme porque se sintieron utilizadas por el PP en su etapa de oposici¨®n contra el Ejecutivo de Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero. Tambi¨¦n ante el auge de Ciudadanos, que ha hecho bandera de esta cuesti¨®n y, todo hay que decirlo, ante un asunto impopular en la opini¨®n p¨²blica.
Ciertamente, terminada la pesadilla etarra, todos los recuerdos han estado dirigidos a las 853 v¨ªctimas del terrorismo y a la batalla por el relato, de largo alcance, en la que debe quedar claro que ETA no tuvo justificaci¨®n, que sus v¨ªctimas lo fueron injustamente y que la democracia se ha impuesto a los terroristas. Es lo primero y lo b¨¢sico.
Pero la cuesti¨®n de los presos etarras est¨¢ presente en Euskadi y de uno u otro modo ¡ªno el ¨¢mbito del pacto antiterrorista¡ª acabar¨¢ estando a escala nacional. La v¨ªspera de que la banda declarase su disoluci¨®n, el lehendakari Urkullu reclam¨® el acercamiento de presos a c¨¢rceles vascas y otra pol¨ªtica penitenciaria ¡ªdijera lo que dijera ETA¡ª porque no puede mantenerse la misma pol¨ªtica que cuando practicaba el terrorismo.
Esta posici¨®n tiene el apoyo de los partidos vascos, a excepci¨®n del PP. Urkullu a?ad¨ªa que no es necesario cambiar la ley y sus requisitos (reinserci¨®n individual, rechazo del terrorismo, reconocimiento del da?o a las v¨ªctimas, etc¨¦tera). Con la ley vigente, siendo ministro del Interior Alfredo P¨¦rez Rubalcaba, se promovi¨® una pol¨ªtica de reinserci¨®n activa entre los presos etarras mod¨¦lica. A ello alud¨ªan el ministro Fern¨¢ndez y el PP vasco hace poco m¨¢s de un a?o.
La reinserci¨®n de presos etarras forma parte de la pol¨ªtica de convivencia en la Euskadi tras el fin de ETA. El riesgo es confundirla con el relato. No por mantener una actitud dura hacia los presos etarras, el relato de su derrota es m¨¢s n¨ªtido. No hay mayor nitidez de la derrota de ETA que se haya ido sin lograr ninguno de sus objetivos.
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