Los rostros de la manifestaci¨®n ¡®la Espa?a vaciada¡¯
Manifestantes de Soria y Huesca hablan sobre el impacto de la despoblaci¨®n en sus municipios
Jos¨¦ Miguel Galparsoro, 67 a?os, llega a la manifestaci¨®n de 'la Espa?a vaciada' en Madrid desde Soria. Jubilado despu¨¦s de ejercer como pediatra durante 40 a?os, observa un envejecimiento evidente: "En 1977 nacieron 1.600 personas en Soria; este ¨²ltimo a?o no llegan a 600". En la provincia, explica, buena parte de la poblaci¨®n joven emigra a otras ciudades "con posibilidades": "All¨ª es casi todo gente mayor, muy poca gente, los j¨®venes no tienen alicientes".?
Galparsoro, adem¨¢s, denuncia una dependencia excesiva de medios de transporte privados para comunicarse con pueblos de la provincia. Para desplazamientos nacionales, la l¨ªnea de tren que une Soria con Madrid solo circula una vez al d¨ªa. "Tengo dos hijos que viven en Madrid y por supuesto que una de las cosas que me gustar¨ªa es poder verlos m¨¢s. Las infraestructuras de transporte en general son bastante mejorables, estamos aislados".
En este entorno, el pediatra se?ala tambi¨¦n la falta de oferta cultural: "Si quieres ver un espect¨¢culo, tienes que venir a Madrid. Hay muy poca oferta y la cultura es important¨ªsima, ?verdad?". En las instituciones, Galparsoro observa una inacci¨®n que produce "m¨¢s que sensaci¨®n de abandono, sensaci¨®n de desamparo": "El ayuntamiento hace cosas majas, eso s¨ª, pero hay una falta de inter¨¦s de los gobiernos. Hemos tenido dos presidentes auton¨®micos que no han hecho nada por Soria".
La falta de comunicaci¨®n con las dem¨¢s ciudades influye en la econom¨ªa de la regi¨®n. "Como no tenemos medios de transporte solventes, las empresas no vienen. Es la pescadilla que se muerde la cola, no hay una oferta atractiva que pueda atraer alg¨²n tipo de industria s¨®lida a largo plazo", subraya Galparsoro.
Andrea Mur, 33 a?os, vive en Burceat, una pedan¨ªa de Barbastro (Huesca). Despu¨¦s de realizar varios trabajos -camarera, cocinera, trompetista-, ahora est¨¢ haciendo un curso de formaci¨®n para trabajar como alba?il. "Mi familia se ha dedicado siempre a la artesan¨ªa, ¨¦ramos anticuarios. Mi padre restauraba muebles pero se jubil¨® y no pudimos continuar con el negocio. Me hubiera continuado mantener el negocio familiar pero es imposible", explica Mur.
Por la pedan¨ªa en la que vive Mur -10 personas-, ya no pasa el autob¨²s que llevaba a los ni?os al colegio, en el municipio de Barbastro. "En mi pueblo quise instalar Internet en casa y me dijeron que pagara yo el pivote, la instalaci¨®n para toda la pedan¨ªa", se queja Mur. En otras poblaciones de alrededor, "por cuestiones de gesti¨®n", todav¨ªa no ha llegado la fibra ¨®ptica. La oscense, pese a las dificultades, no quiere cambiar su residencia: "Yo quiero vivir en Burceat pero hay temporadas que tengo que vivir en Huesca. En una ciudad grande, con los trabajos que he hecho, habr¨ªa salido a flote de otra manera. Luchar por continuar viviendo en pueblos para m¨ª es important¨ªsimo. Si no, todo esto se perder¨¢: los pueblos terminar¨¢n vaciados".
Para recuperar la despoblaci¨®n, Andrea Mur apuesta por una inversi¨®n p¨²blica para recuperar las zonas rurales: "Aqu¨ª la persona que quiere escolarizar a un cr¨ªo se lo tiene que llevar ella sola al colegio. Ahora nos han puesto un local social, la carretera por lo menos est¨¢ bien... La calidad de vida del medio rural yo creo que es tan alta que, de verdad, no hace jubilarse para irse de vacaciones all¨ª".
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