Una batalla local para liderar la derecha
El PP conf¨ªa en su mayor implantaci¨®n territorial y en rentabilizar la herencia de sus gestores en las Administraciones locales. Cs aspira a mantener el impulso de las generales
Y ahora es el vecino el que elige qui¨¦n lidera la derecha en Espa?a de cara a las elecciones locales del 26 de mayo. Aquel retru¨¦cano de Mariano Rajoy sobre la importancia de los parroquianos para escoger alcalde en la campa?a de diciembre de 2015 es m¨¢s verdad que nunca, especialmente para la derecha. Tras el primer asalto disputado entre PP, Ciudadanos y Vox en los comicios generales del 28-A, llega el segundo embate. Los populares conf¨ªan en su corregida estrategia, su mayor implantaci¨®n territorial y en rentabilizar la herencia de sus mejores gestores en las Administraciones locales. Los de Albert Rivera aspiran a mantener el impulso positivo de las generales. Y Vox quiere seguir creciendo a costa de ambos.
La entente de la derecha se acab¨® en cuanto se conocieron los resultados del pasado domingo. La estrategia de sumar para ¡°echar a Pedro S¨¢nchez¡± de La Moncloa hab¨ªa fracasado. El PP se enfrentaba esa noche al peor registro de su historia con una bajada de 137 a 66 diputados. Ciudadanos, con 57 esca?os, convirti¨® su derrota ¡ªni S¨¢nchez se fue ni lider¨® el bloque de la derecha¡ª en una victoria: con un PP hundido, los de Rivera creen que pueden acariciar, al fin, el liderazgo de la oposici¨®n.
Pero 11 elecciones auton¨®micas y 8.131 municipales no son unas generales. Ya lo dej¨® dicho Rajoy aquel fr¨ªo d¨ªa de 2015 sobre un banco en Benavente: ¡°Es el vecino el que elige el alcalde y es el alcalde el que quiere que sean los vecinos el alcalde¡±.
Teodoro Garc¨ªa Egea, secretario general y n¨²mero dos del PP, rebate que esa disputa sobre qui¨¦n encabeza la derecha sea real: ¡°Somos los ¨²nicos que podemos articular una oposici¨®n y una alternativa a Pedro S¨¢nchez en el Congreso, en el Senado, en las autonom¨ªas como se est¨¢ viendo ya en Andaluc¨ªa con el despido de Bernat Soria y en todos los Ayuntamientos de Espa?a, con una bajada de impuestos¡±.
¡°Parece que la batalla en el centroderecha puede favorecer a Ciudadanos, pero es verdad que esta segunda vuelta se da en el campo del PP, que tiene un electorado muy rural, de gente mayor¡±, explica el investigador de Metroscopia Juan Pablo Ferr¨¢ndiz. ¡°Si Ciudadanos no logra el sorpasso en lugares emblem¨¢ticos, habr¨¢ perdido las elecciones¡±, resume el polit¨®logo de Agenda P¨²blica Juan Rodr¨ªguez Teruel.
El PP de Pablo Casado lo tiene claro. El 26-M, fecha de las auton¨®micas y municipales, no es solo una segunda vuelta del 28-A. Puede resultar el asalto definitivo para su proyecto, que comenz¨® sin complejos, deriv¨® hacia la derecha por influencia de Vox y est¨¢ a¨²n perdido buscando el centro. Casado pide tiempo pero no tiene mucho. Apenas tres semanas. Ese es el margen que parecen haberle concedido los barones m¨¢s relevantes del partido y los sectores cr¨ªticos acallados por la urgencia de las urnas. Todos hablan y apelan ahora a la unidad, al menos hasta el 26-M por la noche. ¡°Hay que aguantar y apoyar e intentar un buen resultado porque lo contrario ser¨ªa un desastre¡±, resume una de las pocas voces con autoridad de la anterior etapa que a¨²n est¨¢ entre los elegidos del PP que repetir¨¢n en el Congreso.
El PP tendr¨ªa a su favor ahora una baza ¨²nica: es el partido que m¨¢s alcald¨ªas gana sin necesidad de pasar por las urnas. Es el ¨²nico que presenta aspirantes en pr¨¢cticamente toda Espa?a. En Galicia, por ejemplo, lo har¨¢ en los 313 Consistorios, frente a los 72 de Ciudadanos (59%) o los 13 de Vox.
Los estrategas del poderoso PP gallego calculan que unos 140.000 votos de Cs y 85.000 de Vox no se tradujeron en representaci¨®n y, como casi todos los dirigentes populares, aseguran, sin ning¨²n dato que lo pruebe, que esos electores est¨¢n ya arrepentidos y deseando volver a la ¡°casa com¨²n de la derecha¡±. Por eso apelan a que para la remontada deben reconstruir la unidad en torno a un PP ¡°moderno, amplio, con diferentes sensibilidades y no de pensamiento ¨²nico¡±.
El caso de la apabullante implantaci¨®n del PP en Galicia se repite en alg¨²n otro territorio, como Castilla y Le¨®n. Una regi¨®n con 2.248 municipios, donde al PP solo le faltaron por cubrir 33 en Burgos y dos en Zamora. Cs llegar¨¢ ahora a 554, frente a los 280 de 2015. En 60 pueblos segovianos y en 66 municipios de Valladolid, seg¨²n informaciones del diario El Norte de Castilla, no hay que llegar al 26-M para saber qui¨¦n va a gobernar. Los populares son en estos lugares los ¨²nicos capaces de presentarse.
El PP es el partido que m¨¢s enraizado est¨¢ en la geograf¨ªa espa?ola, pero desde las ¨²ltimas auton¨®micas de 2015, a las que Ciudadanos concurri¨® en medio de una expansi¨®n nacional a medio hacer, el partido de Rivera se ha hecho fuerte. ¡°Ciudadanos ha implementado una organizaci¨®n social con una base humana y una militancia que se acerca mucho al tama?o del PP en algunas regiones¡±, comenta Rodr¨ªguez Teruel.
Cs presentar¨¢ 2.148 candidaturas en toda Espa?a frente a las 860 de 2015, un crecimiento del 150%. Su secretario de Organizaci¨®n, Fran Herv¨ªas, atribuye esa mejora a un trabajo con ¡°presencia activa en la Espa?a rural con carpas y acciones como caf¨¦s ciudadanos donde portavoces responden a inquietudes de vecinos que se interesan por el proyecto¡±.
Todos los escenarios est¨¢n abiertos para la campa?a electoral, que se ver¨¢ influida por la resaca de las generales. Los partidos, con el PSOE a la cabeza, dejar¨¢n a un lado los movimientos clave para formar Gobierno hasta el 27 de mayo, porque cualquier conversaci¨®n o gesto ahora podr¨ªa mover votos. Las Cortes se constituir¨¢n cinco d¨ªas antes de las elecciones (21 de mayo) y los partidos ya se ver¨¢n obligados a alcanzar acuerdos para designar a los miembros de la Mesa o a mostrar sus cartas en la votaci¨®n para elegir presidente del Congreso. Ser¨¢ un momento revelador.
Los pactos tambi¨¦n pueden jugar distintos papeles en esta ocasi¨®n, pese a los anhelos del PP. El candidato de Ciudadanos a presidir la Junta de Castilla y Le¨®n, Francisco Igea, asegura que ¡°fuera del Gobierno nacional existen todas las posibilidades¡±, abriendo la puerta a un posible acuerdo con el PSOE que pueda echar tras 32 a?os al PP de la Junta. Seg¨²n los datos del 28-A, el PSOE ganar¨ªa ah¨ª las elecciones, pero el bloque de la derecha podr¨ªa sumar mayor¨ªa absoluta. ¡°Nosotros creemos que es necesario un cambio, aunque queremos liderarlo nosotros¡±, dice el candidato sobre uno de los mayores feudos populares.
Pactos socialdem¨®cratas
Igea es el ¨²nico hasta ahora que se ha atrevido a apuntar a un posible pacto auton¨®mico con el PSOE tras la campa?a para las generales de Rivera, basada en el veto a Pedro S¨¢nchez. Es el mismo que se opuso a la designaci¨®n de Silvia Clemente ¡ªexpopular elegida por el aparato de Cs¡ª como candidata a la Junta y se enfrent¨® a ella en las primarias m¨¢s escandalosas de la historia del partido. Ese acuerdo, sin embargo, se apoyar¨ªa en la directriz del partido de apostar por la regeneraci¨®n promoviendo el cambio en zonas cautivas de las mismas siglas durante d¨¦cadas. Ser¨ªa hacer en Castilla y Le¨®n con el PP lo que se hizo en Andaluc¨ªa con el PSOE.
Un escenario m¨¢s c¨®modo es el de Arag¨®n. All¨ª Ciudadanos ya super¨® al PP en las generales (15 diputados frente a los 14 de los populares, que perdieron siete) y parte como favorito. Su secretario de Organizaci¨®n, Ramiro Dom¨ªnguez, da otra muestra m¨¢s de que el 26-M se juega otro partido distinto al del 28-A. Haciendo caso omiso a la directriz nacional de Ciudadanos, que en 2017 retir¨® toda referencia a la socialdemocracia de sus estatutos para redefinirse como liberal, Dom¨ªnguez le habla a los habitantes de los 731 municipios de Arag¨®n (700 con menos de 5.000 habitantes) sin complejos ideol¨®gicos: ¡°Vox ha sido un voto de cabreo, pero nosotros somos un partido centrado, liberal que cree tambi¨¦n en la socialdemocracia progresista para la educaci¨®n, la sanidad y los servicios sociales, eso es sagrado¡±.
El riesgo del sorpasso en la batalla por Madrid
Resulta una tentaci¨®n inevitable extrapolar los resultados del 28-A a la pr¨®xima cita electoral. Hay que tener en cuenta que en los 8.131 comicios locales entran en juego partidos regionalistas y los electores votan diferente a un presidente del Gobierno que a uno auton¨®mico o a un alcalde, pero escrutando esos datos, Ciudadanos podr¨ªa liderar gobiernos por primera vez o alcanzar las alcald¨ªas de grandes ciudades en aquellos lugares en los que ya ha logrado el sorpasso al PP ¡ªComunidad de Madrid, Arag¨®n, Zaragoza o M¨¢laga¡ª o en aquellos en los que le pisa los talones: Extremadura, Valencia o Madrid capital.
El sorpasso de Ciudadanos al PP podr¨ªa darse en lugares emblem¨¢ticos como en la Comunidad de Madrid, donde los de Albert Rivera quedaron en las generales por delante por casi 200.000 votos, o en la capital, d¨®nde el PP tan solo les sac¨® 20.000 papeletas. "Eso podr¨ªa estar anticipando el fin del PP. Mariano Rajoy estaba muy mal evaluado por sus votantes. El cambio a Pablo Casado fue radical, que era lo que la gente ped¨ªa, y pese a eso la evaluaci¨®n no ha sido buena. Es dif¨ªcil pensar en un tercer recambio", apunta Juan Pablo Ferr¨¢ndiz, de Metroscopia. El soci¨®logo sostiene que a los populares les ha abandonado el voto masculino, que se ha ido a Vox, y las clases urbanas, que se han marchado a Cs, por lo que se ha quedado con "un voto femenino, mayor y de ¨¢mbito rural". Y sostiene que la estrategia de Ciudadanos de vetar al PSOE ha podido ser exitosa porque resalta su objetivo de sustituir al PP.
En el PP de Madrid pierden votos por todos los flancos, pero les preocupa ahora m¨¢s a corto plazo la sangr¨ªa hacia Vox (235.000 papeletas) que hacia Cs. El aspirante en la capital, Jos¨¦ Luis Mart¨ªnez Almeida, se volcar¨¢ en recuperar votantes de Santiago Abascal, esperanzado en que se hayan dado cuenta de que su cabreo ha sido in¨²til desde el punto de vista representativo.
Iv¨¢n Espinosa de los Monteros, dirigente de Vox, refuta en comentarios a EL PA?S que esa ola aparente a favor de su formaci¨®n se haya detenido, espera a¨²n m¨¢s secuelas de ese castigo a la derecha asentada el 26-M y especialmente en Madrid, donde presume de que su candidata, Roc¨ªo Monasterio, su esposa, es mucho mejor cartel electoral que los aspirantes del Partido Popular (Isabel D¨ªaz Ayuso) o de Ciudadanos (Ignacio Aguado).
En el PP temen, adem¨¢s, que Cs pueda querer entrar al juego del intercambio de instituciones con otros partidos para obtener la plaza de Madrid.
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