El proceso kafkiano de un pintor serbio en Torrevieja
La inacci¨®n judicial mantiene en un limbo al pintor y cristalero serbio Nedzib Karisik, quien pas¨® 18 meses en prisi¨®n provisional en 2003
En la costa de Torrevieja (Alicante) vive Nedzib Karisik, un pintor de puertas y fachadas, escayolista y cristalero de origen serbio al que la justicia convirti¨® en su pimpampum durante tres lustros. Y todo para nada porque, mientras Karisik era sometido a rigurosas medidas cautelares, incluidos los 18 meses que estuvo en prisi¨®n preventiva, los papeles de su causa quedaron olvidados en una estanter¨ªa y los supuestos delitos acabaron prescribiendo por inacci¨®n procesal.
Al d¨ªa siguiente de llegar a Espa?a se vio envuelto en un berenjenal que acab¨® con sus huesos en la c¨¢rcel por su supuesta vinculaci¨®n con una red dedicada al tr¨¢fico de armas
M¨¢s de 15 a?os despu¨¦s de su arresto en 2003 en una operaci¨®n contra el tr¨¢fico de drogas y de armas, no se sabe si Karisik es culpable o inocente, aunque esta condici¨®n se le presume. Ni nunca se sabr¨¢. No hubo ni habr¨¢ juicio. Si durante cinco a?os no se mueve ni un papel del sumario, la ley obliga al juez a archivarlo. Hasta su definitiva exculpaci¨®n, Karisik ha afrontado un calvario que parece salido de la mente de Franz Kafka.
Karisik, de 55 a?os, ha pedido al Estado espa?ol una indemnizaci¨®n de medio mill¨®n de euros. El proceso administrativo y judicial para reparar los da?os sufridos sigue vivo. Y la titular del Juzgado de Instrucci¨®n 2 de Torrevieja que llev¨® este caso, Juana L¨®pez Hoyos, rechaza dar explicaciones sobre esta investigaci¨®n.
Los otros tres coimputados en la causa, desarrollada por la Guardia Civil en Elche y Torrevieja, tambi¨¦n se han beneficiado del sobreseimiento libre del caso (que en t¨¦rminos jur¨ªdicos significa que tales delitos nunca existieron), decretado el 2 de junio de 2014, once a?os despu¨¦s de la operaci¨®n policial. Para entonces, dos de los acusados hab¨ªan ¡°desaparecido¡± de Espa?a y nada m¨¢s se supo de ellos.
Karisik lleg¨® a Torrevieja el 3 de octubre de 2003 y se qued¨® a dormir en casa de un compatriota. Proced¨ªa de Alemania, con el estatuto de refugiado pol¨ªtico bajo el brazo tras huir del conflicto pol¨ªtico que azotaba su pa¨ªs, seg¨²n explicar¨ªa m¨¢s tarde. Pero al d¨ªa siguiente se vio envuelto en una redada que acab¨® con ¨¦l en la c¨¢rcel (18 meses preventivo).
Tras salir de prisi¨®n, la juez le retir¨® el pasaporte, por lo que ni pod¨ªa salir de Espa?a. La juez le impuso m¨¢s obligaciones: presentarse en el juzgado los d¨ªas 1 y 15 de cada mes. Y as¨ª un a?o tras otro, y el l¨ªo segu¨ªa en aumento. Tras serle retirado el pasaporte, la Delegaci¨®n del Gobierno en la Comunidad Valenciana orden¨® su expulsi¨®n de Espa?a y del espacio Schengen durante siete a?os. En teor¨ªa no pod¨ªa residir ni trabajar ni en Espa?a ni en Alemania, donde s¨ª tenida concedida la residencia y permiso de trabajo.
Durante esos a?os tambi¨¦n tuvo bloqueadas sus cuentas bancarias y le decomisaron su coche, del que nunca m¨¢s volvi¨® a saber y que, a efectos de la reparaci¨®n, ha tasado en 8.000 euros. Tampoco ha recuperado las joyas y un m¨®vil que se le intervinieron.
El 2 de junio de 2014 la juez L¨®pez Hoyos orden¨® por fin ¡°el sobreseimiento libre¡± de la causa ¡°por prescripci¨®n del delito¡±. Sin m¨¢s explicaciones. El Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), al que el Ministerio de Justicia pidi¨® un informe sobre este asunto, alega que entre sus competencias no est¨¢ calificar si la juez cometi¨® errores. Eso solo puede hacerlo un tribunal de rango superior a la magistrada, no el CGPJ.
?C¨®mo fue posible que tras poner en marcha la apisonadora judicial con los arrestos y declaraciones iniciales, en una investigaci¨®n de la Guardia Civil de la que se hizo eco con grandes titulares el peri¨®dico La informaci¨®n de Alicante, el sumario se quedase dormido?
13.45 del jueves, en el despacho de la magistrada. L¨®pez Hoyos, a trav¨¦s de una funcionaria, muestra reticencias a hablar con este periodico. Al final accede. ¡°No me acuerdo de ese asunto¡±, espeta. EL PA?S le ofreci¨® leer el informe del CGPJ que concluye que hubo ¡°dilaciones indebidas¡± y p¨¦rdida de objetos decomisados a Karisik susceptibles de indemnizaci¨®n.
¡°Nada que explicar¡±
No quiso leerlo. ¡°No tengo que dar ninguna explicaci¨®n, salvo las que me pida el consejo, y a m¨ª no me ha pedido nada¡±, afirma la magistrada. El CGPJ s¨ª ha pedido informaci¨®n al juzgado y con ella ha elaborado un informe en el que da la raz¨®n a Karisik, aunque no entra en si encarcelar a una persona y luego declararla inocente por inacci¨®n/prescripci¨®n del delito constituye un error judicial, lo que dar¨ªa lugar a indemnizaci¨®n. Asegura que esa no es su competencia. El abogado de Karisik rehus¨® aclarar si Justicia ha indemnizado ya a su cliente. El ministerio tambi¨¦n se ha negado a facilitar este dato. Este ministerio apenas indemniza un 10% de los cientos de demandas por negligencias judiciales que le llegan; y, cuando lo hace, generalmente no paga m¨¢s de 10.000 euros. Salvo casos excepcionales o que se lo ordene un tribunal.
¡°No tengo por qu¨¦ dar ninguna explicaci¨®n¡ Adem¨¢s, el juzgado ahora est¨¢ al d¨ªa. Hemos tenido saturaci¨®n de trabajo como tienen otros muchos y no siempre el juez es el culpable de los retrasos¡±, insiste la magistrada instructora cuando se le recuerda la situaci¨®n de Karisik. La juez reparte culpas: ¡°Est¨¢ el letrado de la administraci¨®n, el fiscal, informes que se piden y tardan... Pero adem¨¢s, ya le han indemnizado, ?no?, pues ya est¨¢¡¡±, zanja.
¡°Si hubiera habido juicio con todas las garant¨ªas, habr¨ªa tenido ocasi¨®n de probar mi inocencia (...) Han sido once a?os de desprop¨®sito y sinsentido (...) y no se me han devuelto mis cosas¡±, expone Karisik en su demanda, reflejo de una investigaci¨®n que empez¨® con ¨®rdenes de c¨¢rcel y acab¨® con delitos que oficialmente nunca existieron.
"Una buena persona"
EL PA?S localiz¨® a Karisik en Torrevieja. Se ha negado en redondo a contar sus vicisitudes. No obstante, las detalla en la demanda que ha interpuesto ante el Ministerio de Justicia para exigir una indemnizaci¨®n. En la urbanizaci¨®n Jard¨ªn Bot¨¢nico de Torrevieja, donde hasta hace unos meses ha vivido antes de mudarse a Costa Orihuela, sus vecinos le tienen ¡°por una buena persona¡±. Algunos se?alan que fue militar en su pa¨ªs y que se sabe que all¨ª tuvo problemas con la justicia. Cuando se liber¨® del embrollo judicial, mont¨® una empresa con su nueva esposa en Torrevieja y ahora, tras salir del inextricable limbo judicial vivido, se dedica a hacer chapuzas en domicilios.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.