Planes para el Valle de los Ca¨ªdos despu¨¦s de Franco

El Valle de los Ca¨ªdos se rige todav¨ªa por los mismos preceptos que el R¨¦gimen dej¨® atados y bien atados. Los sucesivos Gobiernos democr¨¢ticos han invertido millones de euros de dinero p¨²blico en la financiaci¨®n de un monumento que hoy no cumple una funci¨®n distinta de la del d¨ªa en que se inaugur¨®: inmortalizar la victoria franquista en ¡°la Cruzada¡±. La exhumaci¨®n y traslado de los restos de Franco resolver¨¢ este mes esa anomal¨ªa, que est¨¢ a punto de cumplir 44 a?os; el Valle de los Ca¨ªdos dejar¨¢ de pertenecer a un dictador y ser¨¢ la democracia la que decida, por primera vez, qu¨¦ hacer con el monumento.

El primer paso es disolver la llamada Fundaci¨®n de la Santa Cruz del Valle de los Ca¨ªdos, creada por un decreto ley de agosto de 1957 para ¡°rogar a Dios por las almas de los muertos en la Cruzada Nacional, impetrar las bendiciones del Alt¨ªsimo para Espa?a y laborar por el conocimiento e implantaci¨®n de la paz entre los hombres sobre la base de la justicia social cristiana¡±. Dicha tarea se encomend¨® a la comunidad benedictina, que recibe una subvenci¨®n de 340.000 euros al a?o de la Administraci¨®n.? En 1982, la ley reguladora de Patrimonio Nacional estableci¨® una disposici¨®n adicional por la que se autorizaba al Gobierno a ¡°adecuar¡± la fundaci¨®n y disponer ¡°cuando proceda su integraci¨®n en el Patrimonio del Estado¡±. Pero nunca lleg¨® a ejecutarse en la pr¨¢ctica. El Gobierno baraja ahora distintas posibilidades: que dependa estrictamente del Ejecutivo o buscar un nuevo convenio con la Iglesia (el vigente con los benedictinos es de 1958) en el que ambas partes adapten sus actuaciones civiles y religiosas al nuevo significado que se pretende dar al conjunto. En ese convenio se podr¨ªa sustituir a la comunidad benedictina por otra instituci¨®n de la Iglesia, regular o secular.

¡°Yo no excluir¨ªa la posibilidad de romper el convenio actual y dejarlo todo como cementerio municipal [en la actualidad, la bas¨ªlica es un cementerio religioso y las criptas donde yacen 33.800 personas, un cementerio civil], afirma Hilari Raguer, benedictino e historiador que particip¨® en 2011 en el comit¨¦ de expertos nombrado por el Gobierno de Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero para transformar el Valle de los Ca¨ªdos. ¡°Estar¨ªa bien una presencia religiosa que rezara por todas las v¨ªctimas, pero tiene que ser una comunidad que no se oponga a la reinterpretaci¨®n del monumento, que se sienta c¨®moda¡±, explica el benedictino tras la amenaza de atrincheramiento del prior, Santiago Cantera.

El Gobierno tambi¨¦n pretende trasladar la tumba de Jos¨¦ Antonio Primo de Rivera del lugar preeminente (frente a Franco) de la bas¨ªlica donde se encuentra hasta una de las criptas del mausoleo. Pero no ser¨¢ ahora, ya que el Ejecutivo ha decidido separar ambas operaciones. En 2011, el comit¨¦ de expertos de Zapatero ya argument¨® que el fundador de Falange, capturado, encarcelado en una c¨¢rcel republicana, condenado a muerte y fusilado en Alicante en noviembre de 1936, s¨ª es una v¨ªctima, pero su ubicaci¨®n preferente ¡°quiebra el igual tratamiento debido a los restos de las personas all¨ª enterradas¡±.

Una vez trasladados los restos de Franco al cementerio de El Pardo, el Valle de los Ca¨ªdos dejar¨¢ de ser un monumento a un dictador y las v¨ªctimas dejar¨¢n de compartir espacio con su principal verdugo, pero seguir¨¢ siendo un monumento en grave deterioro. ¡°Est¨¢ mal construido. Se hizo con muchas ansias de grandeza, pero malos materiales, y las humedades son tremendas¡±, explica Raguer. El R¨¦gimen financi¨® parte de la construcci¨®n con lo que llamaba la suscripci¨®n nacional (un canal de donaciones abierto durante la Guerra Civil) y el trabajo de presos. El coste total de las obras, que se prolongaron durante 18 a?os, fue de 1.086.460.331 pesetas (el equivalente a aproximadamente 247,5 millones de euros hoy). El comit¨¦ de expertos estim¨® en 2011 en m¨¢s de 13 millones de euros el coste de una rehabilitaci¨®n b¨¢sica del conjunto monumental y de los grupos escult¨®ricos. Las filtraciones de agua en algunas de las criptas donde yacen m¨¢s de 33.800 restos humanos han deshecho cajas madera y mezclado los huesos. En esa intervenci¨®n del Gobierno en el mausoleo tambi¨¦n se incluye la dignificaci¨®n de esos espacios y la devoluci¨®n a sus familiares de los restos de republicanos que el R¨¦gimen extrajo sin su consentimiento de fosas comunes. Y aqu¨ª, avisan los familiares ¡ªcomo Mercedes Abril, de 86 a?os, que quiere recuperar a su padre, o Manuel Lape?a, de 95, que desde 2016 tiene una sentencia judicial que ordena exhumar a su padre y a su t¨ªo¡ª la democracia tambi¨¦n va tarde.

A partir de ah¨ª, el Ejecutivo, ahora en funciones y con los presupuestos de 2018 prorrogados, no ha decidido de qu¨¦ forma convertir¨¢ el Valle de los Ca¨ªdos en ¡°un lugar de memoria¡± y en todo caso, estos planes depender¨¢n de qu¨¦ pase en las elecciones del 10 de noviembre. El pasado verano, durante la reuni¨®n que Pedro S¨¢nchez mantuvo con distintos colectivos y especialistas relacionados con la memoria hist¨®rica, como el forense Francisco Etxeberria, el antrop¨®logo del CSIC Francisco Ferr¨¢ndiz, miembro del comit¨¦ de expertos sobre el Valle de los Ca¨ªdos de 2011, pidi¨® al presidente que fuera ¡°valiente y ambicioso¡±, aunque la resignificaci¨®n del monumento llevara tiempo. ¡°El Valle de los Ca¨ªdos es ¨²nico en el mundo, no basta con poner una placa con todos los nombres de las v¨ªctimas. Exige un proyecto integral que trabaje capa a capa sobre el mejor ejemplo del nacionalcatolicismo. La construcci¨®n del monumento a las v¨ªctimas del holocausto de Berl¨ªn fue un proceso en el que se invirtieron 15 a?os de debate social y pol¨ªtico¡±, explica Ferr¨¢ndiz. ¡°Hay muchos ejemplos internacionales, pero el reto es convertir el Valle de los Ca¨ªdos en una joya pedag¨®gica que explique qu¨¦ fue el nacionalcatolicismo, qui¨¦n construy¨® el monumento y para qu¨¦, qu¨¦ pensaba Franco en 1940 cuando lo concibi¨® por primera vez. Las nuevas tecnolog¨ªas abren muchas posibilidades. Los historiadores de mayor prestigio podr¨ªan elaborar una gu¨ªa para que el p¨²blico los escuchara en su visita al complejo mientras ve en su tablet o m¨®vil im¨¢genes de las obras de construcci¨®n, del entierro de Franco... Eso transformar¨ªa totalmente al tipo de visitante: ya no ir¨ªan los ultras nost¨¢lgicos, y podr¨ªa ser una herramienta muy potente para que la gente joven conozca su pasado¡±.

Una de las opciones para esa resignificaci¨®n del Valle de los Ca¨ªdos es convocar un concurso de ideas, incluso internacional, en el que puedan participar expertos que ya han transformado otros s¨ªmbolos del totalitarismo en pa¨ªses con pasado tr¨¢gico, como el espa?ol. La ESMA (Escuela de Mec¨¢nica de la Armada), el epicentro de las torturas y desapariciones de la dictadura argentina (m¨¢s de 5.000 hombres y mujeres pasaron por all¨ª) es hoy un museo de la memoria. Su directora, Alejandra Naftal, explicaba a EL PA?S que el museo ¡°sirve hoy como un centro de homenaje, pero tambi¨¦n para molestar, para que la gente se haga preguntas. Tiene una funci¨®n educativa¡±. Naftal cree que ¡°Espa?a encontrar¨¢ su camino¡±, pero advierte algunas importantes diferencias: ¡°En Argentina esto es una pol¨ªtica de Estado, venga el que venga. Partidos pol¨ªticos que no coinciden en otras muchas cuestiones, s¨ª lo hacen en esto¡±.