Coralie Fargeat, directora de ¡®La sustancia¡¯: ¡°Demi Moore estuvo dispuesta a asumir los riesgos de exponerse tanto, de desnudarse¡±
En ¡®La sustancia¡¯, Coralie Fargeat se aprovecha del g¨¦nero de terror para denunciar la violencia que sufre el cuerpo de la mujer y relanza la carrera de una actriz icono: Demi Moore
Desde que puede recordar, el cine de terror ha sido para Coralie Fargeat (Par¨ªs, 48 a?os) el que ha llenado sus sue?os y visiones cinematogr¨¢ficas y cin¨¦filas. Menciona a David Cronenberg y John Carpenter como sus m¨¢ximos referentes cuando empez¨® a pensar en ser directora a los 16. Lo cual, incluso a d¨ªa de hoy, a?ade un escal¨®n m¨¢s a la dificultad de entrar en la industria como mujer, de conseguir que te financien una pel¨ªcula. Eso explicar¨ªa, en parte, por qu¨¦ pasaron 14 a?os entre su primer corto (Le t¨¦l¨¦gramme, 2003) y su primer largo (Revenge, 2017); y 20 a?os exactos desde su segundo corto, Reality+, donde pudo asomarse a los temas y formas que le interesaban, y su segundo largo, La sustancia (en cines el 11 de octubre), estrenado en el Festival de Cannes, donde se alz¨® con el premio al mejor guion tras una ovaci¨®n de 13 minutos y un agradecimiento generalizado por recuperar a una actriz icono de los noventa, Demi Moore.
¡°Las dos pel¨ªculas, Reality+ y La sustancia, est¨¢n relacionadas, porque giran alrededor de la idea de que siempre habr¨¢ una versi¨®n mejor de ti¡±, explica la directora, a¨²n euf¨®rica tras su estreno en Cannes. ¡°Siempre fantaseamos con ser mejores porque todo a tu alrededor te hace sentir que no eres lo bastante buena o que hasta que no alcances la perfecci¨®n, o lo que t¨² consideras perfecci¨®n, siempre ser¨¢s una versi¨®n peor de ti misma¡±.
La violencia f¨ªsica, verbal y emocional hacia la mujer, el esfuerzo necesario, el ninguneo, el auto-odio y las trabas que (se) ponen las mujeres est¨¢n en el coraz¨®n del cine de esta directora que tiene tantas ganas de provocar como de entretener y generar un peque?o cambio. ¡°No tuvimos tantas oportunidades en el pasado, pero hoy solo en el cine franc¨¦s hay otras directoras hablando de la mujer y de nuestro cuerpo de otras formas, Julia Ducournau [Titane], No¨¦mie Merlant con Las chicas del balc¨®n¡ Me encanta que estemos teniendo tanta repercusi¨®n y oportunidades de contar lo que llevamos dentro, pero hay que seguir rompiendo el muro y reconstruirlo colocando los ladrillos en otro orden¡±, dice entre risas.
Porque, por muy en serio que hable, no pierde de vista la necesidad de hacerlo desde el entretenimiento. ¡°Por eso el terror es la mejor forma de hablar de ciertos temas, porque te permite ser excesiva, liberar tu locura¡±, explica. La manera en que el cuerpo de la mujer es observado, juzgado y criticado es violenta, ¡°por lo que el g¨¦nero del body horror es el mejor para contar esa violencia¡±. Sin escatimar en sangre, v¨ªsceras o gore. En La sustancia, Demi Moore es una exestrella del fitness televisado; desesperada porque la sigan mirando con deseo. Encarga un misterioso producto, llamado ¡°la sustancia¡±, que crear¨¢ (literalmente) una mejor y m¨¢s joven versi¨®n de ella (Margaret Qualley). Habla de violencia verbal, psicol¨®gica, emocional, violencia autoinfligida por la necesidad de la validaci¨®n, a¨²n m¨¢s complicada pasados los 40. ¡°Dennis Quaid interpreta la encarnaci¨®n de esa violencia. Es el s¨ªmbolo de situaciones que a¨²n vivimos y no quer¨ªa cortarme, porque esos comentarios y vejaciones son el espejo en que nos miramos, y la forma en la que torturamos nuestro cuerpo es un reflejo de esa violencia exterior¡±, contin¨²a Fargeat.
La sustancia naci¨® cuando, cumplidos los 40, se dio cuenta de que se estaba dejando llevar por ideas peligrosas. ¡°Cre¨ªa que por mi edad ya era el fin, que ya no iba a tener un lugar en la sociedad, que ya no importaba a nadie¡ Soy una mujer educada, feminista, y aun as¨ª estos pensamientos entraban en mi cabeza¡±, reflexiona. ¡°Quer¨ªa hablar de lo dif¨ªcil que es aceptar el paso del tiempo, el mito de Dorian Gray llevado a todos los niveles. Hablo de edad, pero tambi¨¦n de no aceptar la idea del cuerpo perfecto¡ Me ha pasado en cada etapa de mi vida. Cuando eres joven tu culo no est¨¢ bien y tus tetas tampoco, creces y tus tetas ya te parecen bien, pero otra parte de tu cuerpo ya no lo est¨¢¡ Eso viene de lo que recibimos del exterior, de esa mirada masculina que ha estructurado nuestro mundo. Han empezado a entrar otras miradas, pero no es suficiente¡±.
En cuanto empez¨® a escribir el guion supo que necesitaba una protagonista que ¡°fuera un mito y un s¨ªmbolo¡±. Demi Moore, icono de belleza noventero, personificaba el mensaje de La sustancia. ¡°Pens¨¦ en ella despu¨¦s de leer su autobiograf¨ªa, que recomiendo¡±, apunta, ¡°descubr¨ª a una mujer fuerte, superinnovadora en su tiempo, inteligente, instintiva y siempre fuera de lo normal, por lo que me di cuenta de que entender¨ªa muy bien esta historia que se sale de la norma¡±. Acept¨® al instante. ¡°Estuvo dispuesta a asumir los riesgos de exponerse tanto, de desnudarse, confi¨® en m¨ª y creo que vio enseguida que podr¨ªa crear algo muy fuerte como actriz¡±. Para la protagonista de Striptease o Una proposici¨®n indecente, La sustancia significa una nueva etapa y poner el foco no en ella, como mujer madura olvidada por la industria, ¡°no ser v¨ªctima¡±, dijo en Cannes, sino dirigirlo al problema en s¨ª y a quien lo causa.
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