El universo en un PC
Hoy basta un 'click' para acceder a las observaciones de telescopios y naves espaciales
La brevedad de la vida humana dificulta el que los astr¨®nomos puedan ver c¨®mo cambia de aspecto un astro. Pero hace tiempo que los telescopios otean el universo y que sus datos se almacenan. As¨ª, sus archivos se van convirtiendo en el registro universal del cielo, en las actas donde leer la historia de las estrellas. Un recurso que la Agencia Europea del Espacio (ESA) ha logrado poner al alcance de todos con s¨®lo un click de rat¨®n. Los archivos digitales de las misiones espaciales de la ESA permiten contemplar en cualquier PC desde las llanuras de Marte a una explosi¨®n de supernova.
En el a?o 1054, una "estrella invitada" apareci¨® en el cielo. Su brillo era tal que durante 23 d¨ªas se pudo ver en pleno d¨ªa, y permaneci¨® visible a simple vista por la noche durante otros 20 meses. Los datos correspondientes a la observaci¨®n de este fen¨®meno nos han llegado a trav¨¦s de dos apuntes independientes, en Jap¨®n y China: el Meigetsuki (alrededor del a?o 1200) y el Sung-Shih (alrededor del 1300) respectivamente. El evento observado en 1054 por los astr¨®nomos chinos y japoneses no se recopil¨® por escrito hasta al menos cien a?os despu¨¦s, y esa informaci¨®n no llegar¨ªa a la comunidad mundial hasta pasados otros tantos a?os (la menci¨®n a la "estrella invitada" en el Meigetsuki japon¨¦s fue descubierta por Y. Iba ?en 1934!).
Hoy sabemos que esta "estrella invitada" era en realidad una supernova, una estrella que despu¨¦s de agotar todo su combustible nuclear cede ante su propia presi¨®n y explota violentamente. Esta supernova, bautizada SN 1054, dej¨® tras s¨ª un rastro que ha permitido a los astr¨®nomos estudiar fen¨®menos astrof¨ªsicos de alta energ¨ªa desde su explosi¨®n: la nebulosa del Cangrejo.
Miles de millones de bytes de informaci¨®n
Para estudiar lo que ocurre en la nebulosa del Cangrejo los astrof¨ªsicos actuales disponen de sofisticados telescopios espaciales que env¨ªan a tierra miles de millones de bytes de informaci¨®n. No muchos a?os atr¨¢s estos datos eran dif¨ªcilmente accesibles. En el mejor de los casos el investigador visitaba el centro donde se almacenaban y durante unos meses los explotaba al m¨¢ximo. Hoy, gracias a los archivos de los telescopios de los principales observatorios y de las agencias espaciales, como la ESA, esos datos est¨¢n accesibles a un click de rat¨®n de cualquier ordenador personal y desde cualquier sitio, tanto para profesionales como para legos en la materia.
En el caso de la ESA, el Equipo de Archivos Cient¨ªficos, ubicado en el Centro de Astronom¨ªa Espacial de la ESA en Villanueva de la Ca?ada, Madrid (European Space Astronomy Centre- ESAC), lleva m¨¢s de una d¨¦cada acercando el cielo a los ordenadores personales de los astr¨®nomos.
Desde la creaci¨®n del archivo de datos del sat¨¦lite de investigaci¨®n de infrarrojos ISO (Infrared Space Observatory), accesible al p¨²blico desde 1998, el equipo ha permitido conocer los datos cient¨ªficos de las misiones de la ESA. Entre ellas est¨¢n los telescopios espaciales XMM-Newton -de rayos X-; Integral -rayos gamma-; ISO y Herschel -infrarrojo-, y tambi¨¦n las naves planetarias y solares: Mars Express; Venus Express; GIOTTO -con datos del cometa Halley-; y SOHO -este ¨²ltimo se har¨¢ p¨²blico en breve-.
Como la biblioteca del Congreso de EE UU
Los archivos de la ESA almacenan datos de cientos de miles de observaciones astron¨®micas y planetarias y millones de observaciones de nuestro Sol, acumulando informacion de decenas de terabytes, equivalente al contenido de la biblioteca del Congreso de Estados Unidos.
Los archivos de la ESA preservan datos que han llevado a descubrimientos sorprendentes: existencia de agua en galaxias lejanas (sat¨¦lite ISO); desvelado del complejo mecanismo por el cual los agujeros negros emiten energ¨ªa magn¨¦tica (sat¨¦lite XMM-Newton); la captura instant¨¢nea de la violenta explosi¨®n y consecuente creaci¨®n de un agujero en el centro de nuestra galaxia (sat¨¦lite Integral); las maravillosas formaciones geol¨®gicas marcianas desveladas por la c¨¢mara de alta resoluci¨®n de Mars Express; cientos de cometas literalmente "tragados" por nuestro Sol... ¨¦sta es una reducida lista de ejemplos.
Adem¨¢s, el Equipo de Archivos Cient¨ªficos se encarga de hacer llegar estos datos tambi¨¦n a trav¨¦s de una entidad sin sentido f¨ªsico: el Observatorio Virtual. Se trata de un sistema en el que archivos astron¨®micos de todo el mundo se interconectan formando una entidad virtual accesible desde cualquier ordenador.
Desde los papiros chinos, viajando por tierra mediante tracci¨®n animal, al acceso cuasi-instant¨¢neo a datos del Sol -el usuario de los archivos puede incluso encadenar las im¨¢genes y obtener as¨ª v¨ªdeos en los que la actividad solar impresiona con su belleza-, han pasado cientos de a?os. La espera, sin embargo, ha merecido la pena. Hoy podemos decir que el cielo est¨¢ en tu ordenador, y el Equipo de Archivos Cient¨ªficos de la ESA se enorgullece de contribuir a ello.
Se puede acceder a los diferentes archivos de la ESA a trav¨¦s de la siguiente direcci¨®n (en ingl¨¦s):
http://www.sciops.esa.int/index.php?project=SAT&page=index
Para cualquier consulta pueden mandar un correo electr¨®nico a Pedro.Osuna@esa.int
Pedro Osuna es ingeniero de la Agencia Europea del Espacio en ESAC (Villanueva de la Ca?ada, Madrid)
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