Un Brexit sin acuerdo sume en el caos el futuro del Erasmus
Los campus optan por no convocar plazas en Reino Unido, ofrecer destinos alternativos o negociar acuerdos bilaterales. Los rectores recomiendan ¡°planes de contingencia¡±
El programa de movilidad Erasmus+, que ha cohesionado Europa a trav¨¦s del conocimiento en los ¨²ltimos 30 a?os, vive un momento de total incertidumbre con la llegada del Brexit sin acuerdo. No peligra la estancia de los becados de este curso, pero s¨ª podr¨ªan perder la ayuda los de 2019-2020 si antes de abril no hay acuerdo. En las negociaciones se decidi¨® que habr¨ªa un periodo transitorio y las becas se prorrogar¨ªan hasta 2021, pero sin firma todo es papel mojado. Lo ¨²nico seguro es que la Comisi¨®n Europea acord¨® a finales de enero respetar las estancias ya comenzadas a un lado y otro del canal de la Mancha. Las del pr¨®ximo curso est¨¢n en el aire.
En las universidades espa?olas cunde el nerviosismo. ¡°Me llamaron el lunes del Servicio de Exteriores y me recomendaron que eligiese otro destino porque no me garantizan que pueda recibir la beca si me voy a Reino Unido¡±, cuenta un estudiante de Santiago de Compostela que ten¨ªa ya concedida plaza en Leicester. Iban a entregarle 2.100 euros para todo el curso. Esta universidad ha propuesto a 40 becados ir a universidades de Polonia, Holanda o Noruega, que renuncien a la ayuda a la movilidad sin penalizaci¨®n o que esperen, pero sabiendo que pueden quedarse sin beca, aunque siempre podr¨ªan costearse ellos toda la estancia.
Los da?os colaterales de un rev¨¦s que puede costar d¨¦cadas
El "caos" que ha supuesto en el mundo universitario brit¨¢nico el Brexit se est¨¢ cobrando como "da?os colaterales" a los erasmus. La definici¨®n corresponde a Jessica Cole, responsable de pol¨ªtica internacional del grupo Russell, aglutinador de 24 universidades punteras del Reino Unido (entre ellas Cambridge y Oxford) y erigido en portavoz de las reclamaciones acad¨¦micas por las consecuencias perniciosas de una salida desordenada de Europa.
Cole se confiesa at¨®nita ante la preocupaci¨®n de las universidades espa?olas. El Gobierno brit¨¢nico, aduce la portavoz del Russell, ha garantizado que sufragar¨¢ las becas de los titulares del Erasmus para el a?o acad¨¦mico 2019-20, atrapados en un limbo. ?Abarca esa cobertura a los europeos que han elegido como destino universidades brit¨¢nicas? Ni ella misma se ve en condiciones de responder con certeza.
Su grupo encabez¨® el pasado enero una carta abierta firmada por los rectores de centenar y medio de universidades, y dirigida a la primera ministra, Theresa May, advirtiendo sobre el "rev¨¦s acad¨¦mico, cultural y cient¨ªfico, del que nos llevar¨ªa d¨¦cadas recuperarnos" si las islas brit¨¢nicas dan la espalda a Europa sin que medie un acuerdo previo. Como respuesta puntual, el Gobierno ha publicado unas directrices t¨¦cnicas por las que se compromete a sufragar todos los programas de intercambio intercomunitario aprobados hasta la fecha, e independientemente de lo que acontezca en el terreno pol¨ªtico.
El problema reside en los recelos que algunos centros docentes plantean ante esas garant¨ªas que consideran d¨¦biles, lo que les ha llevado a advertir al alumnado de que la financiaci¨®n de sus becas de intercambio ¡ªen el inminente y conflictivo curso 2019-2020¡ª est¨¢ en el aire. A su entender, la perspectiva de un Brexit sin acuerdo precisar¨ªa de alguna componenda, suscrita por separado con Bruselas, que auspiciara la vigencia del Erasmus.
Desde el Rusell se conf¨ªa en un cumplimiento de los compromisos sobre el Erasmus y otros programas sellados antes del Brexit.
A partir de esa fecha, el plan posibilista de ese grupo universitario de presi¨®n consiste en alg¨²n tipo de acuerdo razonable sobre el Brexit que no comprometa en demas¨ªa los intercambios acad¨¦micos europeos en el futuro. Su modelo son los programas acad¨¦micos de intercambio fomentados por Bruselas con otros pa¨ªses no miembros de la UE (desde Turqu¨ªa hasta Islandia, Noruega o Serbia).
Pero en realidad cruzan los dedos para que la ruptura entre Londres y Bruselas no acabe consum¨¢ndose: en juego est¨¢ la p¨¦rdida autom¨¢tica del acceso a los 1.300 millones de euros que en los pr¨®ximos dos a?os procurar¨ªa al Reino Unido el programa europeo de investigaci¨®n universitaria Marie Sklodowska o los ingentes recursos del European Search Council.
Vigo a¨²n no ha abierto la convocatoria de Erasmus, ¡°pero se est¨¢ hablando con los centros para que los alumnos no elijan Reino Unido, ya que no solo no les puede asegurar la ayuda econ¨®mica, sino el reconocimiento de la estancia¡±, cuentan desde el gabinete de prensa. En la vecina A Coru?a no han fallado la convocatoria, a la espera de lo que diga el ministerio.
Mientras, el Gobierno pide calma: ¡°Me parece precipitado tomar medidas. Hay que esperar¡±, sostiene Jos¨¦ Manuel Pingarr¨®n, secretario general de Universidades. ¡°No hay elementos para pensar que no haya una salida, previsiblemente habr¨¢ una pr¨®rroga hasta 2021. Bruselas sufraga entre el 80% y el 90% del dinero de la beca y el resto, Espa?a. En caso de que no haya acuerdo, quiz¨¢s quien gobierne aqu¨ª podr¨ªa compensar la subvenci¨®n europea¡±, explica. Los estudiantes espa?oles reciben entre 200 y 350 euros al mes, dependiendo del pa¨ªs de destino y algunas comunidades y universidades mejoran su cuant¨ªa. En Noruega, en cambio, la ministra de Educaci¨®n Superior, Iselin Nyb?, afirm¨®: ¡°Hay mucha incertidumbre por el Brexit. Mi consejo es buscar en otros pa¨ªses y no en Gran Breta?a¡±. Aunque Noruega no es miembro de la UE, por lo que su situaci¨®n es singular.
Dorothy Kelly, secretaria ejecutiva de Internacionalizaci¨®n de la conferencia de rectores espa?oles (CRUE), aclara que ¡°en un escenario de no acuerdo, las universidades podr¨¢n mantener acuerdos de movilidad con las universidades socias brit¨¢nicas al margen de Erasmus+, con muy diferentes situaciones de financiaci¨®n (fondos propios, patrocinio...), como ocurre con acuerdos bilaterales con otros pa¨ªses¡±.¡°El reconocimiento acad¨¦mico en esos casos es competencia de cada universidad, as¨ª como la exenci¨®n rec¨ªproca de tasas¡±, detalla. Esa es la v¨ªa por la que ha optado M¨¢laga, que convoc¨® 94 plazas para Reino Unido a principio de curso y ha decidido no alarmar a los beneficiarios del destino ¡°ante la inexistencia de una respuesta definitiva a la situaci¨®n¡±, informa Nacho S¨¢nchez. Francisco Chicano, director del Secretariado de Movilidad, cuenta que han empezado a establecer contactos con hom¨®logas brit¨¢nicas para que cada una sufrague las becas de los estudiantes que env¨ªa, como hace ya el campus con otros pa¨ªses. Algo parecido negocia la Universidad de Sevilla.
Kelly, tambi¨¦n vicerrectora de Internacionalizaci¨®n en Granada, aconseja disponer de ¡°planes de contingencia para todos los escenarios¡±. La CRUE ha convocado a todas las universidades el 14 de marzo para abordar la situaci¨®n. En la Universidad del Pa¨ªs Vasco o la Aut¨®noma de Barcelona no tienen prevista ninguna medida. ¡°A nadie le beneficia que desaparezca Erasmus. ?C¨®mo va a querer Reino Unido estar fuera de los grandes marcos de investigaci¨®n. Y no solo por la financiaci¨®n, sino por no estar en contacto con las grandes universidades europeas¡±, razona Marius Mart¨ªnez, vicerrector de la Aut¨®noma de Barcelona.
El Consejo Universitario de Catalu?a, que engloba a las 12 universidades catalanas y su Gobierno, estudia la situaci¨®n antes de tomar medidas. En la Comunidad Valenciana no se plantean cambios aunque en su Polit¨¦cnica han detectado que baja el inter¨¦s por ir a Reino Unido. ¡°Pol¨ªticamente, ser¨ªa un gesto bueno que las universidades no cambiasen nada con el Brexit, porque las brit¨¢nicas son las primeras horrorizadas. Hubo un encuentro entre rectores espa?oles y brit¨¢nicos hace unos meses y nos pidieron que no les dej¨¢semos solos¡±, explica Isabel Dur¨¢n, vicerrectora de Relaciones Internacionales de la Complutense. Su hom¨®logo en Alicante, Juan Llopis, dec¨ªa el viernes que ha detectado ¡°un gran nerviosismo¡± en las universidades brit¨¢nicas y asegura que en las ¨²ltimas semanas, la de Liverpool (el viernes mismo), Sussex o Edimburgo han entablado negociaciones con la de Alicante en las que proponen ¡°nuevos convenios¡±, informa Rafa Burgos.
En la Universidad de Huelva tambi¨¦n hay contactos.?¡°Estamos recibiendo mensajes de universidades de Reino Unido que quieren firmar convenios bilaterales, porque no quieren salir de este programa tan incre¨ªble y tan bueno para el alumnado. Son acuerdos que ya tenemos con otros pa¨ªses de Estados Unidos, Am¨¦rica Latina o Asia e incluyen que nuestros estudiantes no pagan tasas all¨ª y los suyos no pagan aqu¨ª", cuenta? Reyes Alejano, su vicerrectora de Internacionalizaci¨®n.?
La Universidad Complutense ha convocado las becas como un a?o m¨¢s. ¡°El ministerio nos explic¨® que era un proyecto plurianual y estaba liberada la partida¡±, prosigue Dur¨¢n. Pero la Complutense est¨¢ buscando posibles salidas. ¡°En caso de necesitarse, pedir¨ªamos a nuestros socios que imparten las clases en ingl¨¦s m¨¢s plazas en sus universidades, y nosotros tendr¨ªamos que ofrecerles m¨¢s¡±, prosigue Dur¨¢n.
Id¨¦ntica estrategia siguen en Salamanca, uno de los destinos favoritos de los extranjeros. Reciben a casi 100 brit¨¢nicos y env¨ªan a 80. ¡°Estamos tranquilos. Creemos que se solucionar¨¢¡±, sostiene Efrem Yildiz, vicerrector. ¡°Pero de no ser as¨ª tenemos una red de acuerdos muy grande, en los pa¨ªses n¨®rdicos, en Irlanda... Una decisi¨®n poco acertada no puede afectar a esta experiencia de movilidad¡±.?
Si es usted afectado, puede enviar su testimonio a reportajes@elpais.es
Con informaci¨®n de Cristina V¨¢zquez (Valencia), Javier Mart¨ªn Arroyo (Sevilla) y Pedro Gorospe (Pa¨ªs Vasco).
Bruselas destina 16.380 millones de euros al programa
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