La universidad espa?ola se abre al gran mercado ruso

Espa?a busca atraer extranjeros a sus universidades. La presencia de estudiantes, profesores e investigadores de fuera es un indicador de la calidad de la ense?anza. Y esa internacionalizaci¨®n es una de las asignaturas pendientes de los centros espa?oles, seg¨²n las clasificaciones globales. Ahora, m¨¢s all¨¢ de los programas de intercambio europeos Erasmus, la tradicional cooperaci¨®n con Latinoam¨¦rica y despu¨¦s de lanzar redes en China, las universidades espa?olas se abren al mercado ruso. Rusia exporta unos 75.000 estudiantes superiores al a?o ¨Cy cada curso aumentan un 4%--, la mayor¨ªa a pa¨ªses anglosajones. Espa?a recibe 2.000; una cifra que un nuevo convenio de colaboraci¨®n y convalidaci¨®n de t¨ªtulos quiere aumentar.

Cuatro universidades p¨²blicas espa?olas --Carlos III de Madrid, la de Oviedo, Rovira i Virgili y la de Valencia-- y cuatro rusas ¨Cla de Tomsk, la Academia de Comercio Exterior, la prestigiosa Ranepa y la Universidad Nacional de Ciencia y Tecnolog¨ªa¡ª acaban de firmar en Mosc¨² una alianza para fomentar la movilidad acad¨¦mica de estudiantes y profesores. ¡°Se trata del germen de un proyecto al que se espera que se unan progresivamente otros centros¡±, afirma ?ngeles Heras, secretaria de Estado de Universidades, Investigaci¨®n e Innovaci¨®n, que ha viajado a Mosc¨² con una delegaci¨®n espa?ola para sellar la alianza en un sector que Rusia considera geoestrat¨¦gico.

El acuerdo contempla el reconocimiento de t¨ªtulos, dise?o de programas educativos en com¨²n ¨Ccomo dobles titulaciones a nivel de grado, posgrado y doctorado¡ª y establecer¨¢ intercambios, y proyectos de investigaci¨®n e innovaci¨®n ruso-espa?oles. ¡°La alianza un gran avance para generar conocimiento, que es la funci¨®n de la Universidad¡±, se?ala la Secretaria de Estado. Se suma a los pactos espec¨ªficos de investigaci¨®n que m¨¢s de una veintena de universidades espa?olas tienen ya con instituciones rusas. En 2018, Espa?a dedic¨® 1,5 millones de euros a acuerdos con el pa¨ªs euroasi¨¢tico en becas de movilidad y otros programas.

Espa?a, con una inversi¨®n baja en investigaci¨®n y desarrollo, sueldos bajos y complejos tr¨¢mites burocr¨¢ticos, seg¨²n los expertos, es uno de los pa¨ªses con menor porcentaje de profesores extranjeros: apenas un 2%. Tambi¨¦n tiene unos valores muy escasos de estudiantes internacionales, comparado con otros pa¨ªses de la Organizaci¨®n para la Cooperaci¨®n y el Desarrollo Econ¨®micos (OCDE). Sin contar con los que llegan con una Erasmus (unos 45.000), los extranjeros que apuestan por Espa?a para cursar un grado no llegan al 1% (casi un 4% de media en la OCDE), son el 8% en los m¨¢ster (11,5% media OCDE) y el 15,5% en programas de doctorado (25,7% media OCDE), seg¨²n datos de esa organizaci¨®n. Y la mayor¨ªa son europeos (42%) o latinoamericanos (36%).

Con la nueva alianza, la universidad espa?ola busca hacerse m¨¢s global. Y por tanto m¨¢s competitiva. ¡°Las universidades tienen que estar m¨¢s abiertas, y la ¨²nica manera es tener entre su profesorado y alumnado a extranjeros. Esa movilidad genera colaboraci¨®n, grupos de trabajo, lazos entre universidades; adem¨¢s de enriquecer tanto a los participantes como al centro y el pa¨ªs. Hace que el prestigio de una universidad aumente exponencialmente. Por eso la internacionalizaci¨®n es una prioridad del nuevo ministerio¡±, se?ala Jos¨¦ Manuel Pingarr¨®n, secretario de Estado de Universidades.

Anastasia Sizikova estudiar¨¢ el pr¨®ximo curso y durante la mitad de todo el grado en Ling¨¹¨ªstica y Traducci¨®n e Interpretaci¨®n en la Universidad de Granada. Aunque lo har¨¢ con una beca. ¡°Es una buena oportunidad no solo para consolidar el espa?ol, tambi¨¦n para aprender de otros modelos de ense?anza¡±, explica la joven rusa de 19 a?os en la caseta del centro educativo de la Feria Internacional de Educaci¨®n de Mosc¨². Es un evento multitudinario financiado por la UNESCO y inaugurado por el primer ministro ruso, Dmitri Medvedev, que por primera vez ha designado un invitado de honor para esta edici¨®n: Espa?a. Muy cerca, en las mesas de la Universidad Polit¨¦cnica de Madrid, una de las m¨¢s visitadas, dos chicos y una chica recogen folletos. ¡°Quiero aprender espa?ol. Y me interesan especialmente los m¨¢ster y los dobles grados, como los de Ingenier¨ªa y direcci¨®n de empresas¡±, dice Andrei Frolov, de 20 a?os. ¡°Tambi¨¦n los estudios biling¨¹es¡±, a?ade.

Solo hay una universidad espa?ola entre las 200 mejores del mundo del rankin ARWU: la Universitat de Barcelona. Y una rusa, la Universidad Estatal de Mosc¨², entre las 100 mejores. La Universidad Carlos III es una de las m¨¢s internacionalizadas. De hecho, de los centros p¨²blicos es la que m¨¢s grados en r¨¦gimen biling¨¹e ofrecen (un 61%). ¡°Eso nos facilita mucho la relaci¨®n con universidades extranjeras, sobre todo europeas. Ahora queremos ampliar ese c¨ªrculo. Una ampliaci¨®n natural es China, en la que ya trabajamos desde hace tiempo, y ahora Rusia¡±, afirma Juan Romo, rector de la universidad madrile?a, una de las firmantes de la alianza hispano-rusa.

Espa?a ofrece la ventaja del idioma. Y el espa?ol est¨¢ experimentando un boom en Rusia. Los rusos buscan adem¨¢s grados y m¨¢ster que todav¨ªa son muy incipientes en las universidades del pa¨ªs euroasi¨¢tico: como todo lo relacionado con la industria del turismo y el tercer sector. A cambio, las universidades rusas, cuentan con el atractivo de estudios punteros en el sector aeroespacial, de los hidrocarburos y tambi¨¦n en la agricultura. El Gobierno ruso tambi¨¦n quiere fomentar la internacionalizaci¨®n. Se ha propuesto ampliar el n¨²mero de profesores extranjeros y su objetivo es que alcancen el 10% de las plantillas. Las universidades rusas acogen ya miles de estudiantes de todas las rep¨²blicas exsovi¨¦ticas, pero ahora el objetivo es ampliar ese espectro a los pa¨ªses anglosajones, Alemania, Espa?a, Latinoam¨¦rica o China.

En la Universidad Nacional de Ciencia y Tecnolog¨ªa (MISIS) un 25% de los estudiantes son extranjeros, se?ala su rectora, Alevtina Chernikova. ¡°De Espa?a todav¨ªa son pocos, pero esperamos que la cifra crezca con la alianza. Tenemos que estrechar los lazos que unen a ambos pa¨ªses¡±, insiste la rectora, una de las pocas mujeres a la cabeza de una universidad en Rusia. Para solventar el freno que puede suponer el idioma ruso, Chernikova se?ala que, como en muchos otros ¨¢mbitos cient¨ªficos, hay grados y estudios en ingl¨¦s.