La ¨²ltima ecuaci¨®n de Alexandre Grothendieck
El gran matem¨¢tico dej¨® un legado enigm¨¢tico al morir en 2014: 70.000 p¨¢ginas manuscritas dif¨ªciles de descifrar y tasar
A primera vista, no son m¨¢s que unas cajas polvorientas en un s¨®tano mal iluminado en una librer¨ªa de viejo en el barrio de Saint-Germain-des-Pr¨¨s, en Par¨ªs. Nadie dir¨ªa que ah¨ª abajo, al final de las escaleras angostas y el techo bajo que obliga a agachar la cabeza, se encuentra uno de los mayores tesoros de las matem¨¢ticas contempor¨¢neas, o quiz¨¢ un mont¨®n de papeles sin otro valor que el sentimental.
Las 70.000 p¨¢ginas que Alexandre Grothendieck (1928-2014) garabate¨® obsesivamente en los 23 a?os finales de su vida, escondido como un eremita en un pueblo de 243 habitantes en el Pirineo franc¨¦s, son el ¨²ltimo misterio de uno de los grandes matem¨¢ticos del siglo XX. Nadie sabe cu¨¢l es el precio: se mencionan cifras con m¨¢rgenes incongruentes, que van de los 45.000 euros a los cinco millones. Los papeles de Grothendieck ¡ªtodos escritos a mano; algunos, encuadernados; otros, sueltos y desordenados¡ª ofrecen una ventana al mundo ¨²nico del reinventor de la geometr¨ªa algebraica, el precursor del ecologismo radical, un hombre que acabar¨ªa extraviado en los laberintos de su propia mente, una de las m¨¢s privilegiadas de nuestro tiempo.
¡°Es una historia muy francesa¡±, dice en un caf¨¦ parisino el periodista Philippe Douroux, autor del ensayo biogr¨¢fico Alexandre Grothendieck. Tras el rastro del ¨²ltimo genio de las matem¨¢ticas (ediciones Allary, en franc¨¦s). Douroux es una de las personas que m¨¢s y mejor han estudiado su vida y los misterios que le rodean. Un reciente art¨ªculo suyo publicado por el diario Le Monde ha vuelto a poner sobre la mesa la herencia compleja del ge¨®metra.
La historia de Grothendieck es francesa por la arraigada tradici¨®n matem¨¢tica de este pa¨ªs, que cuenta con casi tantos galardonados con la medalla Fields, el Nobel de las matem¨¢ticas, como Estados Unidos. Es francesa ¡ªy muy europea¡ª porque su trayectoria vital se mezcla con los dramas del siglo XX: desde sus a?os de infancia encerrado en un campo cerca de la frontera con Espa?a hasta la deportaci¨®n y muerte de su padre en Auschwitz. Y es francesa porque tambi¨¦n es la historia de un individualista ¡ªun ap¨¢trida hasta que en los a?os setenta se nacionaliz¨® franc¨¦s¡ª en colisi¨®n con las r¨ªgidas estructuras acad¨¦micas y burocr¨¢ticas de la Rep¨²blica, en las que nunca acab¨® de encajar.
En el origen de Internet
Las matem¨¢ticas de Grothendieck escapan a la comprensi¨®n de la mayor¨ªa de personas, pero, como escribe Douroux en su libro, ¡°sus trabajos est¨¢n en el origen de las mayores herramientas de comunicaci¨®n: lo digital, el tel¨¦fono e Internet¡±. ¡°Circulamos en el hiperespacio gracias a las matem¨¢ticas de Grothendieck en los a?os sesenta, setenta, ochenta y noventa¡±, a?ade.
En sus ¨²ltimos 23 a?os de vida, se recluye en una aldea y garabatea compulsivamente
Su influencia es indiscutible. ¡°Cualquier estudiante serio de la geometr¨ªa algebraica debe familiarizarse con el trabajo de Grothendieck, de la misma manera que cualquier pianista debe manejar las sonatas de Beethoven¡±, afirma el profesor de la Universidad de Maryland Harry Tamvakis, que adem¨¢s de matem¨¢tico es pianista.
Grothendieck ¡ªnacido en Berl¨ªn, hijo de revolucionarios, un ruso y una alemana que participaron en la Guerra Civil espa?ola¡ª vivi¨® varias vidas. La del ni?o refugiado. La del joven prodigio, trayectoria que culmin¨® con la medalla Fields en 1966. La de la convulsi¨®n de Mayo de 1968 y su dedicaci¨®n posterior al grupo Vivir y sobrevivir, etapa en la que plante¨® si habr¨ªa que renunciar a la investigaci¨®n cient¨ªfica, pues esta nos estar¨ªa llevando a la cat¨¢strofe medioambiental. En los a?os ochenta compone Cosechas y siembras, un libro de mil p¨¢ginas, no publicado, en el que caben desde fragmentos de memorias hasta reflexiones filos¨®ficas y religiosas, adem¨¢s de matem¨¢ticas.
Corte de amarras
La etapa final comienza en 1991, cuando abandona las clases en Montpellier ¡ªah¨ª est¨¢n buena parte de sus manuscritos redactados hasta entonces¡ª y se instala en la aldea de Lasserre. A la manera de escritores como J.D. Salinger, corta amarras. Y escribe sin parar (no era un gran lector: dicen que el ¨²nico libro que hab¨ªa en su casa era la Encyclopaedia Universalis). Este es el material que hoy se encuentra en el subterr¨¢neo de Saint-Germain-des-Pr¨¨s y que sus hijos descubrieron poco antes de morir ¨¦l, el 13 de noviembre de 2014. Grothendieck quiso que parte del archivo fuera a la Biblioteca Nacional de Francia, pero la legislaci¨®n francesa obliga a dar una parte a los hijos y, para ello, hace falta un precio sobre el que nadie se pone de acuerdo.
Un a?o despu¨¦s de la muerte del matem¨¢tico, el librero Jean-Bernard Gillot recibi¨® el encargo de los hijos de ponerles precio y encontrar comprador. En la noche del 14 al 15 de noviembre de 2015, los transport¨® desde los Pirineos a Par¨ªs, 10 horas de carretera. Los documentos llegaron a Par¨ªs el mismo d¨ªa de los atentados terroristas del Bataclan. Ahora los guarda y busca comprador, fascinado con la historia de Grothendieck, como todos los que se han topado con ella. ¡°Es la m¨¢s bella aventura de mi librer¨ªa¡±, dice Gillot.
Entre sus papeles, hay matem¨¢ticas, f¨ªsica, religi¨®n o astronom¨ªa
Entre los papeles del subterr¨¢neo, redactados en franc¨¦s, alem¨¢n e ingl¨¦s, hay matem¨¢ticas, qu¨ªmica, f¨ªsica, religi¨®n, astronom¨ªa. Uno de los cuadernos es un listado, en letra min¨²scula y con signos incomprensibles, de los jud¨ªos deportados desde Francia a los campos de exterminio nazis, incluido su padre, Sacha Shapiro (¨¦l llevaba el apellido de su madre). Es dif¨ªcil adivinar un orden detr¨¢s de estos textos o pensar que pueda llegar a descifrarse una letra y unos signos a menudo incomprensibles.
¡°Yo pienso que es un tesoro quiz¨¢ no matem¨¢tico, pero s¨ª humano¡±, dice Philippe Douroux. ¡°Es un descenso a los infiernos del cerebro mejor organizado del mundo¡±.
La ¡°teor¨ªa de la relatividad¡± en matem¨¢ticas
Para comprender qu¨¦ supuso la revoluci¨®n ¡®grothedickiana¡¯, es necesario entender qu¨¦ significa la geometr¨ªa algebraica, ¡°una rama de las matem¨¢ticas que combina la geometr¨ªa con el ¨¢lgebra¡±, como explica en un correo electr¨®nico el matem¨¢tico Harry Tamvakis, profesor en la Universidad de Maryland. ¡°La cuesti¨®n es entender c¨®mo las propiedades de los objetos interact¨²an con las propiedades algebraicas de las ecuaciones que los definen. Unir dos ¨¢reas bastante diferentes de las matem¨¢ticas como la geometr¨ªa y el ¨¢lgebra era un desaf¨ªo real, y a mediados de los a?os 50 mucha gente lo intentaba hacer con rigor, de una manera que inclu¨ªa tambi¨¦n temas como la teor¨ªa de los n¨²meros, pero con ¨¦xito limitado¡±.
Fue entonces cuando irrumpi¨® Grothendieck y ¡°conmocion¨® el mundo matem¨¢tico al reescribir de nuevo los fundamentos de la geometr¨ªa algebraica y aplicar su teor¨ªa para resolver antiguos problemas y abrir nuevas v¨ªas de descubrimientos¡±, recuerda el profesor Tamvakis, que compara las aportaciones de Grothendieck con la ¡°teor¨ªa de la relatividad¡±. ¡°La idea es que, m¨¢s que estudiar directamente los objetos que nos interesan, es m¨¢s importante mirar la manera c¨®mo se relacionan entre ellos¡±.
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