El Plan Centro de Sevilla, el precedente de Madrid Central
El popular Zoido hizo uso de su mayor¨ªa absoluta para desmantelar un plan de restricci¨®n de circulaci¨®n en el centro de la ciudad pionero en Europa
La primera gran decisi¨®n que adopt¨® Juan Ignacio Zoido (Partido Popular) tras asumir la alcald¨ªa de Sevilla el 11 de junio de 2011 fue derogar el Plan Centro de restricciones al tr¨¢fico del Casco Antiguo, aprobado a finales del mandato de su antecesor, Alfredo S¨¢nchez Monteseir¨ªn (PSOE), con el apoyo de IU. Era una promesa electoral y su mayor¨ªa absoluta le permiti¨® terminar con lo que se conoci¨® como Plan Centro a trav¨¦s de una resoluci¨®n el 29 de julio, dos semanas antes de que se debatiera en Pleno su derogaci¨®n.
Zoido acababa de manera dr¨¢stica, y hurtando la decisi¨®n al debate pol¨ªtico, con un plan de movilidad pionero en Espa?a y Europa, que se hab¨ªa puesto en marcha en diciembre del a?o anterior y que apenas hab¨ªa estado seis meses en vigor. La iniciativa, de la que hicieron bandera pol¨ªtica tanto PSOE como IU, establec¨ªa la restricci¨®n de la circulaci¨®n de veh¨ªculos privados de los no residentes por las calles del casco hist¨®rico y limitaba su circulaci¨®n a 45 minutos, imponiendo multas de 70 euros para quienes sobrepasaran ese tiempo. El Ayuntamiento distribuy¨® 21 c¨¢maras en las entradas y salidas del per¨ªmetro del casco para controlar las matr¨ªculas de los coches. Se trataba de las primeras medidas de acotaci¨®n temporal que se activaban en un casco hist¨®rico de las dimensiones del sevillano (tres kil¨®metros de norte a Sur y de dos de Este a Oeste), el segundo m¨¢s grande de Europa despu¨¦s de G¨¦nova.
El plan naci¨® envuelto en pol¨¦mica. La principal asociaci¨®n de comerciantes de la capital (Aprocom), la de hosteleros y algunas asociaciones de vecinos del centro se opusieron frontalmente, alegando que las restricciones a la circulaci¨®n mermaban las ventas de sus negocios. Algunas llegaron a interponer un recurso ante los tribunales esgrimiendo que la normativa contraven¨ªa el derecho a la libertad de circulaci¨®n.
Frente a los contrarios al Plan Centro, tambi¨¦n fueron muchas las voces que desde otras asociaciones medioambientales y de vecinos del Casco Hist¨®rico abogaban por la necesidad de aplicar las restricciones de manera inmediata para acabar con el tr¨¢fico, el ruido y la contaminaci¨®n. ¡°El problema, igual que en el caso de Madrid Central, es que en Sevilla el plan se puso en marcha muy tarde y no dio tiempo a que la poblaci¨®n viera sus frutos, a diferencia del proyecto de bicicletas, que s¨ª fue un ¨¦xito¡±, reflexiona Ricardo Marqu¨¦s, f¨ªsico y miembro de la asociaci¨®n ciclista A Contramano.
Reducci¨®n de la circulaci¨®n en un 50%
Pese a que apenas estuvo vigente seis meses, en ese tiempo se redujo en casi un 50% la circulaci¨®n de veh¨ªculos por el centro, rebajando el impacto ac¨²stico, que en algunas zonas llegaba a los 72 decibelios (55 es el nivel aceptable) y las toneladas de mon¨®xido de carbono, de acuerdo con los datos facilitados por el Ayuntamiento socialista antes de finalizar aquel mandato. Las primeras encuestas de opini¨®n que se realizaron entre los vecinos, poco antes de la extinci¨®n del plan, tambi¨¦n arrojaron resultados positivos.
La decepci¨®n por la forma en la que el nuevo alcalde desmantel¨® el plan, provoc¨® la reacci¨®n de muchas entidades, obligando a Zoido a prometer medidas alternativas que jam¨¢s llegaron. En octubre de 2014, el dictamen sobre Movilidad Sostenible del Consejo Econ¨®mico y Social de Sevilla, aprobado por todos los grupos pol¨ªticos a excepci¨®n del PP, concluy¨® que el modelo vigente ¡°era insostenible¡±. En 2015, el socialista Juan Espadas se hizo con la alcald¨ªa, pero sin mayor¨ªa suficiente para gobernar en solitario. La necesidad de apoyos ha determinado que no haya retomado la restituci¨®n de un Plan Centro, tal y como hab¨ªa incorporado a su programa.
En estos ¨²ltimos cuatro a?os se ha limitado la velocidad en el casco a 30 kil¨®metros/hora y a 20 kil¨®metros/hora en algunas calles, priorizando al peat¨®n y las bicicletas en determinadas zonas. ¡°Pero la cantidad de tr¨¢fico en el centro hace que esas limitaciones de velocidad apenas tengan efecto¡±, se?ala Marqu¨¦s, quien recuerda que el adoquinado antiguo de las calles, las v¨ªas estrechas y las aceras angostas que incumplen la normativa de seguridad, contribuyen a la masificaci¨®n.
Sevilla se ha convertido en la tercera gran capital con m¨¢s atascos de Espa?a, seg¨²n el listado de TomTom2018, una circunstancia que Marqu¨¦s atribuye a la congesti¨®n de veh¨ªculos en el centro. ¡°Ten¨ªamos un plan que era pionero y ahora estamos a la cola¡±, se lamenta. La Ley de Transici¨®n Ecol¨®gica impone a los municipios de m¨¢s de 50.000 habitantes la necesidad de restringir su tr¨¢fico rodado, una media que ha hecho que en Sevilla cada vez haya m¨¢s voces que pidan reactivar el Plan Centro.
El Gobierno de Espadas ha llevado a cabo un estudio para la realizaci¨®n de un Plan de Movilidad Urbana Sostenible, que constata que el Casco Antiguo recibe 215.000 desplazamientos diarios, siendo el mayor punto de destino de ocho de los 11 distritos en los que se divide la capital andaluza. Cuando se ide¨® el Plan Centro, eran 100.000 los veh¨ªculos que circulaban diariamente por esas calles. Hay propuestas para peatonalizar m¨¢s v¨ªas en esa zona, una iniciativa que cuenta con el benepl¨¢cito de casi todos los partidos pol¨ªticos y con las reticencias de algunas asociaciones de comerciantes que temen que, si no se habilitan aparcamientos alternativos y rotatorios, la medida les genere p¨¦rdidas.
Un miedo que no avalan las cifras. Durante la ¨¦poca de Navidad, donde se pone en marcha un plan incluso m¨¢s restrictivo que el Plan Centro, las ventas en el centro crecen en torno al 10% y la afluencia de p¨²blico es masiva. La peatonalizaci¨®n de calles del centro como Tetu¨¢n, O?Donnell o Vel¨¢zquez, llevada a cabo en el ¨²ltimo mandato de Monteseir¨ªn, ha revitalizado los negocios de esas v¨ªas, hasta el punto de que se encuentran entre las de mayor cotizaci¨®n comercial de Espa?a, de acuerdo con el informe anual de Acotex.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.