¡°Puede haber alg¨²n repunte que nos obligar¨ªa a cerrarlo todo otra vez¡±
El laboratorio de coronavirus del Centro Nacional de Biotecnolog¨ªa, que ¨¦l dirige, ha desarrollado un sistema para sintetizar el pat¨®geno, primer paso para la vacuna
Si aspiraba a llevar una discreta vida de cient¨ªfico de laboratorio, Luis Enjuanes (Valencia, 75 a?os) eligi¨®, sin saberlo, una mala pareja de baile cuando centr¨® su carrera en los coronavirus. Eso fue hace cuatro d¨¦cadas y todos los expertos apostaban entonces por la gripe como causante de la siguiente pandemia mundial. Para el ser humano, estos pat¨®genos con forma de bomba de Orsini eran entonces algo casi tan trivial como los resfriados. El primer aviso lleg¨® en 2002, con el SARS, que caus¨® en menos de dos a?os 800 muertes. Con la segunda alerta, el MERS, una d¨¦cada m¨¢s tarde, Enjuanes ya era una figura de relevancia internacional. Como director del laboratorio de coronavirus del Centro Nacional de Biotecnolog¨ªa (CNB-CSIC) ha desarrollado un sistema para sintetizarlos, primer paso hacia la ansiada vacuna. Hace dos semanas, en una prueba rutinaria, el cient¨ªfico dio positivo y tuvo que aislarse en su casa. El mi¨¦rcoles, tras un segundo negativo en las pruebas, atendi¨® por tel¨¦fono a EL PA?S.
Pregunta. ?C¨®mo est¨¢?
Respuesta. Muy bien. He estado asintom¨¢tico en todo momento. Di positivo en las pruebas de control que nos hicieron por seguridad en el laboratorio antes de empezar a trabajar con virus infectivos.
P. Hace tres meses un paciente asintom¨¢tico hubiera acaparado toda la atenci¨®n.
R. Eso es lo m¨¢s importante de todo lo que hemos aprendido. Una persona puede estar 14 d¨ªas sin s¨ªntomas, pero contagiando a otros. Esto dificulta mucho el control de la epidemia.
P. ?Hasta qu¨¦ punto la transmisi¨®n asintom¨¢tica no pod¨ªa esperarse?
R. Es un virus nuevo, del que hemos ido descubriendo muchas cosas. El SARS, por ejemplo, daba fiebre en tres o cuatro d¨ªas y eso facilit¨® mucho las investigaciones.
P. ?Quiz¨¢ eso lo deber¨ªan haber detectado antes las autoridades chinas?
R. Yo pienso que fueron un poco perdidas al principio y retrasaron algo la informaci¨®n. Cuando entraron en materia, el virus ya llevaba mucho tiempo circulando y hab¨ªa cientos de afectados. Es lo que posteriormente pas¨® en Italia o Espa?a.
P. Por eso le planteaba si en la gesti¨®n de la epidemia, visto lo ocurrido en China, no se pec¨® de un exceso de confianza¡
R. Bueno, aqu¨ª se sigui¨® mucho la informaci¨®n de China y a lo mejor se cometi¨® el error de cre¨¦rnosla. Sinceramente, creo que al principio ni China se imaginaba lo que iba a pasar. Luego hemos ido cayendo todos los pa¨ªses.
P. China afirma haber sufrido 80.000 casos y 4.000 muertes. Solo Espa?a, Italia y Francia superan el medio mill¨®n de afectados y m¨¢s de 60.000 muertos. ?C¨®mo se explica la diferencia?
R. La respuesta honesta es que no lo s¨¦. Puede haber cierta explicaci¨®n en que el virus haya llegado mejor adaptado para transmitirse. O la poblaci¨®n m¨¢s envejecida¡
P. Hay gente que duda de los datos de China.
R. Hay cosas que no sabemos. Lo que no se sostiene es que ning¨²n laboratorio est¨¦ preparando un pat¨®geno, como se ha dicho, sin tener de antemano la vacuna, porque al primero que se le puede volver en contra es a ese mismo laboratorio.
P. Dice que todos los pa¨ªses han ido cayendo. Pero unos m¨¢s que otros. Alemania y Corea del Sur, por ejemplo, han sido m¨¢s agresivos al identificar casos, aislarlos y rastrear contactos.
R. S¨ª, claro, con la tecnolog¨ªa y el dinero que tienen. Es obvio que pudieron hacerse cosas mejor, pero es f¨¢cil decirlo posteriormente. No tengo claro que haya habido negligencia en pa¨ªses como Espa?a. Otra cosa son las posiciones de los dirigentes de EE UU o el Reino Unido.
P. ?Sabemos algo m¨¢s del origen del virus y desde qu¨¦ especie pudo saltar al hombre?
R. No. No se ha demostrado nada de lo que se dijo de las serpientes, pangolines¡
¡°El virus lleg¨® en temporada de gripe. Eso le permiti¨® pasar desapercibido¡±
P. ?En qu¨¦ punto estamos de la progresi¨®n de la epidemia?
R. Hemos logrado una clara tendencia a la baja, aunque puede haber alg¨²n repunte que nos obligue a cerrarlo todo otra vez. La verdadera apertura, aunque ahora en mayo se flexibilice alguna medida, empezar¨¢ en junio y julio. Con la temperatura, radiaci¨®n solar, espacios abiertos y dem¨¢s los casos deben caer de forma importante.
P. ?Y en oto?o?
R. El virus regresar¨¢, seguramente. Lo normal es que se convierta en un virus estacional.
P. ?Sabemos si genera inmunidad y por cu¨¢nto tiempo?
R. No est¨¢ claro.
P. ?C¨®mo lleg¨® el virus a Espa?a?
R. En plena temporada de la gripe. Eso le permiti¨® pasar desapercibido y dificult¨® mucho la labor de los epidemi¨®logos. Es como la polic¨ªa en un secuestro: lo importante son los primeros momentos, si llegas al sexto d¨ªa te pierdes casi todo. Los epidemi¨®logos necesitan llegar pronto para recabar informaci¨®n fresca.
P. ?C¨®mo va su proyecto de vacuna?
R. En el CNB tenemos dos vacunas en desarrollo. Mariano Esteban y Juan Garc¨ªa Arriaza est¨¢n desarrollando una de las que podr¨ªamos llamar cl¨¢sicas, con un vector de la viruela atenuado. Ahora est¨¢n en pruebas antes de dar el salto a ensayos para humanos, lo que podr¨ªan hacer despu¨¦s del verano.
P. ?Y usted?
R. Nuestro proyecto est¨¢ basado en el propio virus y usamos una tecnolog¨ªa que ya ha demostrado que funciona a nivel experimental con el SARS y el MERS. El virus se multiplica, pero no se disemina, no puede pasar de una c¨¦lula a otra. Es lo que se llama un virus suicida y eso lo hace muy seguro.
¡°Pudieron hacerse cosas mejor, pero es f¨¢cil decirlo luego¡±
P. ?A qu¨¦ vacuna se refer¨ªa el ministro Pedro Duque cuando dijo que estaba muy avanzada?
R. A la de Mariano Esteban. Dijo que ya tenemos el prototipo. Todo el proceso lleva cuatro o cinco a?os, aunque en la situaci¨®n actual puede reducirse a uno o dos.
P. Ustedes han recibido 4,46 millones de fondos p¨²blicos para las vacunas. ?Es eso suficiente?
R. Ese dinero ha servido para financiar las dos vacunas, pero tambi¨¦n a otros grupos que trabajan con antivirales, que desarrollan anticuerpos monoclonales. Otra parte significativa ha ido a reforzar las infraestructuras de alta seguridad biol¨®gica, donde se necesitaba reparar equipos.
P. Con esos recursos, ?pueden competir con proyectos que ya est¨¢n en fase de ensayo y cuentan con cientos de millones de financiaci¨®n?
R. No nos podemos comparar. En el desarrollo de una vacuna hay tres fases. La primera es la invenci¨®n, que es la nuestra y que cuesta equis. Luego est¨¢ el desarrollo, que es realizar los ensayos cl¨ªnicos, que suelen hacerlo compa?¨ªas muy potentes. Esta fase cuesta 10 veces m¨¢s. Y por ¨²ltimo est¨¢ la fabricaci¨®n, comercializaci¨®n y marketing, que cuesta 100 veces m¨¢s.
P. ?Qu¨¦ posibilidades reales hay de que su proyecto acabe en buen puerto?
R. Son reducidas, como cualquier proyecto de estas caracter¨ªsticas en una fase inicial.
P. ?Y cu¨¢l es su objetivo?
R. Conseguir un proyecto de buena calidad que sea desarrollado por alguna compa?¨ªa.
P. ?No hay estructuras p¨²blicas para hacerlo?
R. No. Son las farmac¨¦uticas las que desarrollan esas fases.
P. ?Y c¨®mo revierten en la sociedad los fondos p¨²blicos destinados a la investigaci¨®n?
R. En los acuerdos se impondr¨ªan cl¨¢usulas para que la vacuna cubra las necesidades Espa?a.
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