Espa?a recurre a un impuesto verde para luchar contra el pl¨¢stico

El Ministerio para la Transici¨®n Ecol¨®gica ha desenfundado este martes la que para muchos es la mejor herramienta para luchar contra los problemas medioambientales y para cambiar conductas perniciosas: la fiscalidad. Ha puesto sobre la mesa un nuevo impuesto para reducir los residuos pl¨¢sticos. Esta figura, que prev¨¦ una recaudaci¨®n anual de 724 millones, est¨¢ contemplada dentro del anteproyecto de ley de residuos y suelos contaminados que ha aprobado este martes el Consejo de Ministros y que comienza ahora su tramitaci¨®n. Si se aceleran much¨ªsimo los plazos, la norma estar¨ªa lista definitivamente en el primer semestre de 2021.

Esta ley fija como gran objetivo reducir un 15% la generaci¨®n de todos los residuos del pa¨ªs en 2030 respecto a los niveles de 2010. Y con ella Espa?a se sumar¨¢ a la lucha contra los residuos pl¨¢sticos que iniciaron hace un par de a?os las instituciones europeas. De hecho, una de las razones de ser de la norma es incorporar las dos directivas de residuos y de pl¨¢sticos que la Uni¨®n Europea aprob¨® en 2018 y 2019. Espa?a fijar¨¢ as¨ª por ley el veto a partir de julio de 2021 a la venta de objetos de pl¨¢stico de un solo uso como cubiertos y pajitas. Adem¨¢s, se prohibir¨¢n los micropl¨¢sticos que se a?aden a productos cosm¨¦ticos y detergentes, y se obligar¨¢ a los bares a poner a disposici¨®n de los clientes agua del grifo gratis a partir de la aprobaci¨®n definitiva de la norma. Estas son algunas de las medidas con las que se pretende contribuir a la lucha global contra esta contaminaci¨®n. Al a?o llegan a los oc¨¦anos ¡°ocho millones de toneladas de pl¨¢stico¡±, ha recordado este martes la vicepresidenta y ministra para la Transici¨®n Ecol¨®gica, Teresa Ribera.

El Gobierno establecer¨¢ un impuesto sobre los envases de pl¨¢stico para reducir su uso

Pero el anteproyecto va m¨¢s all¨¢ de las directivas al fijar ese nuevo impuesto y recurre a una f¨®rmula ya empleada, por ejemplo, para luchar contra la obesidad en muchos pa¨ªses a trav¨¦s de grav¨¢menes sobre bebidas azucaradas. El impuesto propuesto ahora ser¨¢ de car¨¢cter indirecto y recaer¨¢ sobre ¡°la fabricaci¨®n, importaci¨®n o adquisici¨®n intracomunitaria

de envases de pl¨¢stico no reutilizables que vayan a ser objeto de utilizaci¨®n en el mercado espa?ol¡±, seg¨²n detalla el Ministerio para la Transici¨®n Ecol¨®gica. Ribera ha justificado este impuesto y el resto de medidas de la ley en el ¡°uso absolutamente desmedido, irracional e irresponsable¡± que se hace de los envases pl¨¢sticos.

El ministerio ha explicado que el nuevo gravamen es ¡°similar al que se pretende implantar en otros pa¨ªses¡± como el Reino Unido e Italia. ¡°El tipo impositivo ser¨¢ de 0,45 euros por kilogramo de envase¡±, a?ade. Teniendo en cuenta los ¨²ltimos datos disponibles, correspondientes al ejercicio 2017, el Gobierno estima que se podr¨ªan recaudar anualmente cerca de 724 millones de euros.

Ribera ha admitido las grandes carencias que tiene Espa?a en cuanto a los impuestos medioambientales. La Comisi¨®n Europea y organismos internacionales como la OCDE o el FMI llevan a?os instando a Espa?a a que acometa una reforma de su fiscalidad verde para aumentar su recaudaci¨®n y penalizar m¨¢s las actividades contaminantes. El ministerio ha recordado este martes que, seg¨²n los datos de 2017, el pa¨ªs ¡°tiene el quinto porcentaje m¨¢s bajo de ingresos medioambientales respecto al PIB de la UE¡±. En concreto, ¡°los ingresos derivados de la fiscalidad verde supusieron apenas el 1,83% del PIB, frente a una media de la UE del 2,40%¡±, ha a?adido este departamento. ¡°Espa?a cuenta con un margen muy alto de actuaci¨®n en materia de fiscalidad verde¡±, ha resumido la vicepresidenta.

A principios de a?o el Gobierno abri¨® una consulta p¨²blica sobre fiscalidad medioambiental. Anunci¨® la posibilidad de poner en marcha un impuesto sobre los envases de pl¨¢stico de un solo uso. Finalmente, ese tributo se ha incluido en la ley de residuos y suelos contaminados. Paralelamente, se abri¨® otra consulta sobre otra nueva tasa sobre el transporte a¨¦reo. Eso fue en febrero, antes de que la pandemia golpeara con especial virulencia al sector de la aviaci¨®n; nada se sabe de ese tributo, que bien se podr¨ªa haber incluido en el proyecto de ley de cambio clim¨¢tico que aprob¨® recientemente el Gobierno y que se tramita ya el Congreso. Aunque no se hizo.

La Comisi¨®n Europea lleva un par de a?os barajando poner en marcha un impuesto para los pl¨¢sticos. Bruselas calcula que podr¨ªan recaudarse en toda la UE entre 3.000 y 9.000 millones seg¨²n su alcance y esos fondos servir¨ªan tambi¨¦n para financiar la recuperaci¨®n tras la crisis econ¨®mica de la covid-19. Pero Bruselas todav¨ªa no ha dado luz verde a ese impuesto. La primera propuesta que difundi¨® en 2018 la Comisi¨®n abogaba por una tasa ¨²nica para la UE de 0,8 euros por kilogramo de envases no reciclados.

No solo las instituciones internacionales ped¨ªan a Espa?a una reforma fiscal verde. Las principales organizaciones ecologistas ¡ªGreenpeace, Ecologistas en Acci¨®n, WWF, SEO/Birdlife y Amigos de la Tierra¡ª llevan muchos a?os proponiendo usar estas herramientas para gravar las actividades m¨¢s da?inas. ¡°Nos parece genial que se ponga en marcha un impuesto para que se pague el coste ambiental¡±, ha valorado este martes Julio Barea, de Greenpeace. ¡°Pero que sea un coste real¡±. Barea se queja as¨ª del gravamen tan bajo que se propone a su entender, esos 45 c¨¦ntimos por kilo.

En el lado absolutamente opuesto est¨¢ Luis Cediel, director general de Anaip, la Asociaci¨®n Espa?ola de Industriales de Pl¨¢sticos. ¡°No podemos estar m¨¢s en contra del impuesto¡±, resume. Su asociaci¨®n ya aleg¨® contra este gravamen cuando se abri¨® la consulta p¨²blica y lamenta la ¡°demonizaci¨®n¡± del pl¨¢stico que se hace, ya sea de un solo uso o de otro tipo. Anaip considera que la tasa propuesta es ¡°discriminatoria¡±, ya que solo grava un solo uso de pl¨¢sticos y no de otros materiales, e ¡°injusta¡±, ya que ¡°socava la competitividad y pone en peligro la supervivencia¡± de un sector que genera 93.000 empleos directos.