Barcelona avanza contra la poluci¨®n y Madrid hacia el negacionismo

Mientras la capital catalana, que este jueves estren¨® una de las Zonas de Bajas Emisiones (ZBE) m¨¢s grandes de Europa, avanza contra la contaminaci¨®n atmosf¨¦rica con el respaldo de sus instituciones ¡ªAyuntamiento, ?rea Metropolitana de Barcelona (AMB) y Generalitat¡ª, Madrid se dirige al negacionismo: la presidenta regional, Isabel D¨ªaz Ayuso, neg¨® el d¨ªa 1 que la poluci¨®n genere mortandad, unas declaraciones que no ha corregido a pesar de que en estos dos d¨ªas cient¨ªficos e instituciones le han mostrado que estaba equivocada. Mientras, el alcalde de la capital, Jos¨¦ Luis Mart¨ªnez-Almeida, que prometi¨® eliminar Madrid Central y no pudo hacerlo por los varapalos judiciales, ha aprobado una moratoria para que algunos veh¨ªculos m¨¢s contaminantes puedan seguir accediendo a la capital, y adem¨¢s ha reabierto dos calles antes restringidas y ha criticado el plan barcelon¨¦s como ¡°una enga?ifa¡±. La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, le respondi¨® ret¨¢ndole en Twitter: ¡°A ver qui¨¦n reduce m¨¢s la contaminaci¨®n¡±.

La entrada en vigor de la ZBE de la capital catalana, que proh¨ªbe a los veh¨ªculos m¨¢s contaminantes ¡ªlos que no tienen etiqueta de la DGT¡ª circular por la ciudad y cuatro municipios colindantes, se sald¨® este jueves con una reducci¨®n del tr¨¢fico en los accesos del 7,5% respecto al 2 de enero del a?o pasado. El d¨ªa del estreno, de siete a diez de la ma?ana, entraron a la ciudad 6.000 veh¨ªculos menos y salieron 4.900 menos, seg¨²n el Servicio Catal¨¢n de Tr¨¢fico. El gobierno municipal de Ada Colau habl¨® de una reducci¨®n del 15% del tr¨¢fico en los accesos y del 11% dentro de la ciudad, pero compar¨® la fecha de este jueves con el pasado 23 de diciembre, en v¨ªspera a Nochebuena, cuando la ciudad se llena de repartidores y compradores de otras localidades.

El concejal de Emergencia Clim¨¢tica, Eloi Badia, pidi¨® ¡°cautela¡± ante los datos, al ser el 2 de enero un laborable en plenas vacaciones escolares, aunque sac¨® pecho de la ZBE. ¡°Es pionera en el Estado ¡ªsu ¨¢rea comprende 95 kil¨®metros cuadrados¡ª y sit¨²a Barcelona como ciudad valiente y precursora en pol¨ªticas ambientales y de salud¡±. Badia tambi¨¦n record¨® que cuando apreciar¨¢n los efectos de la ZBE ser¨¢ a partir del 8 de enero, cuando la ciudad recupere la actividad normal, y, sobre todo, el 1 de abril, cuando se comenzar¨¢ a multar a los infractores. Este primer a?o se permite circular sin etiqueta a furgonetas, camiones y autocares.

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La jornada de estreno de la restricci¨®n en Barcelona transcurri¨® sin incidentes. El control de matr¨ªculas, para verificar si los coches tienen etiqueta ambiental, se realiza con 36 c¨¢maras en puntos estrat¨¦gicos de la ciudad. Y no hubo ni informadores ni Guardia Urbana parando a los infractores. El veto al coche contaminante afecta a unos 115.000 veh¨ªculos (85.000 turismos y 30.000 motocicletas), seg¨²n el AMB, que agrupa la capital y los 35 municipios de su entorno. El c¨¢lculo se basa en el parque de veh¨ªculos que circula por la zona.

Cada vez que se pone en marcha una medida de estas caracter¨ªsticas hay voces que claman contra los cambios. Ya pas¨® hace un a?o con Madrid Central, cuando oposici¨®n y comerciantes avisaron de que la ciudad se colapsar¨ªa con las restricciones. No ocurri¨®, su entrada en vigor fue un ¨¦xito c¨ªvico. En Barcelona, la ZBE recibe cr¨ªticas por parte de ecologistas y vecinos, que apuestan por endurecer las restricciones; y por parte de patronales, que piden flexibilizarlas. Este jueves, mientras la Plataforma por la Calidad del Aire exig¨ªa un peaje disuasorio de entrada a la ciudad, la Asociaci¨®n General de Aut¨®nomos Transportistas de Catalu?a denunci¨® que la ZBE es ¡°inasumible¡± para el sector, a pesar de tener un a?o de moratoria, y alert¨® de que ¡°miles de aut¨®nomos y pymes se ver¨¢n condenados a dejar la profesi¨®n¡±. Mientras, el Gremio del Motor asegur¨® que en los ¨²ltimos tres meses las ventas de coches en la zona de la ZBE han crecido un 20%.

Las Administraciones impulsoras recuerdan que este tipo de medidas se toman porque la poluci¨®n genera unas 10.000 muertes prematuras en Espa?a, seg¨²n c¨¢lculos de la Organizaci¨®n Mundial de la Salud (OMS). Los niveles de contaminantes m¨¢s altos se dan en Madrid y Barcelona, por eso la Comisi¨®n Europea ha amenazado a Espa?a con una multa millonaria si no se toman medidas en ambas ciudades. Madrid lo hizo el 30 de noviembre de 2018 (los tres primeros meses, sin sanciones) y Barcelona lo hace ahora. Las multas por acceder indebidamente a la capital catalana se aplicar¨¢n a partir de abril. Las de Madrid Central ¡ªque arrancaron el pasado 16 de marzo¡ª superan ya las 375.000 (datos hasta septiembre), seg¨²n el Ayuntamiento de la capital.

El alcalde de Madrid calific¨® este jueves de ¡°enga?ifa¡± el proyecto de la capital catalana, pues es ¡°menos restrictiva que Madrid Central¡±. ¡°[La ZBE de Barcelona] es mucho menos restrictiva que Madrid Central. Estamos en una zona de restricci¨®n muy amplia (en lo relativo al per¨ªmetro) que proh¨ªbe la entrada de coches sin etiqueta, pero no todos los d¨ªas, aparte de que luego tienen 10 d¨ªas de permiso laborables¡±, dijo.

A pesar de sacar pecho por la medida estrella de Manuela Carmena, el regidor no ha cejado en su empe?o de descafeinarla. Dos calles hasta ahora incluidas en las restricciones (peque?as pero que concentraban muchas multas) reabrieron al tr¨¢fico el pasado 1 de enero, con lo que se recorta el per¨ªmetro, mientras se aplicar¨¢ un a?o de moratoria para que los veh¨ªculos m¨¢s contaminantes de varios colectivos puedan seguir accediendo al centro. M¨¢s graves son los mensajes que los miembros del Consistorio lanzan peri¨®dicamente contra Madrid Central ¡ª¡°no funciona¡±, repiten¡ª, que han impulsado que el tr¨¢fico y las multas aumenten en el centro en los ¨²ltimos meses. En septiembre, Almeida anunci¨® que cambiar¨ªa el nombre de la zona de bajas emisiones por el grandilocuente Madrid 360, un cambio que implicar¨ªa dejar entrar libremente a los veh¨ªculos con etiqueta C en el ¨¢rea, es decir, relajar las restricciones. Sin embargo, todav¨ªa no ha podido aprobar esa iniciativa, que requiere de modificar la Ordenanza poniendo de acuerdo a sus socios de gobierno, Ciudadanos y el ultraderechista Vox.

Mientras, D¨ªaz Ayuso sigui¨® este jueves sin rectificar sus declaraciones del d¨ªa 1 de que ¡°nadie ha muerto¡± por la contaminaci¨®n, a pesar de las numerosas pruebas de que est¨¢ equivocada y los testimonios de enfermos cuyas dolencias se agravan por la poluci¨®n. Hasta su consejero de Transportes, ?ngel Garrido, reconoci¨® que ¡°es evidente que hay una correlaci¨®n directa entre mortalidad y la contaminaci¨®n¡±, algo que ¡°por supuesto que la presidenta tambi¨¦n sabe¡±. Achac¨® la frase a un d¨ªa ¡°desafortunado¡±.

En Barcelona, el estreno evidenci¨® las alternativas por las que han optado los conductores afectados por el veto a la contaminaci¨®n. Familias que ten¨ªan varios coches y dar¨¢n uno de baja. Otras que lo cambiar¨¢n por un turismo tambi¨¦n antiguo pero no tanto o aquellas que han optado por uno nuevo. Motoristas que se han comprado una moto reci¨¦n salida de f¨¢brica. Y algunos que todav¨ªa no saben c¨®mo sortear¨¢n la prohibici¨®n cuando lleguen las multas.

La ciudadan¨ªa aplaude actuar contra la contaminaci¨®n, pero las cr¨ªticas llegan por c¨®mo se ha materializado la ZBE: a quien m¨¢s perjudica es a quienes no pueden cambiar el veh¨ªculo. Entre los defensores de la ZBE se cuentan algunos de los casi 6.000 ciudadanos que se han acogido a la oferta de desvalijar su coche antiguo a cambio de una tarjeta de transporte ilimitado por seis zonas. Se llama T-Verde y tiene una duraci¨®n de tres a?os, siempre que el titular no se compre otro coche.