L¨®pez Miras: ¡°En Murcia no hay adoctrinamiento en ning¨²n aula¡±
El presidente murciano cree que la pol¨¦mica sobre el veto parental es "una cortina de humo" y acusa a Pedro S¨¢nchez de actuar como el "t¨ªpico abus¨®n del patio"
El presidente de la Regi¨®n de Murcia, el popular Fernando L¨®pez Miras (Murcia, de 36 a?os), recibe a EL PA?S en su despacho para hablar del veto parental (¨¦l dice ¡°autorizaci¨®n familiar¡±). Asegura que no se trata de una condici¨®n impuesta por Vox, sino que ¨¦l mismo lo defendi¨® en campa?a en aras de la libertad de los padres. El derecho de los menores a una formaci¨®n completa, apunta, ya la garantizan los maestros. L¨®pez Miras considera la pol¨¦mica "una cortina de humo" de Pedro S¨¢nchez para tapar lo que denomina "el pin judicial": el nombramiento de Dolores Delgado como fiscal general del Estado.?
Pregunta. Defiende que antes de implantar el veto, no hab¨ªa adoctrinamiento en las aulas murcianas. ?Por qu¨¦ son necesarias las autorizaciones??
Respuesta. En la regi¨®n no se est¨¢ produciendo adoctrinamiento en ning¨²n aula de ning¨²n centro. La neutralidad ideol¨®gica de los maestros y profesores de Murcia es impecable. Nadie mejor que ellos para formar y educar a nuestros hijos,?pero cuando alguna persona ajena al centro [imparta un contenido] que los padres lo sepan y puedan decidir libremente.?
P. ?Qu¨¦ pasa con el derecho de los hijos a recibir formaci¨®n? ?Qu¨¦ pasa cuando un padre machista no deja a su hijo asistir a una charla de prevenci¨®n de la violencia de g¨¦nero o de igualdad?
R. Para concienciar a nuestros hijos de la lacra que supone la violencia de g¨¦nero y concienciar y ense?ar valores tan importantes como la diversidad y la igualdad, confiamos plenamente en nuestros profesores.
P. El sentido de las asignaturas complementarias es precisamente que una persona experta en una materia pueda ampliar conocimientos, dar una perspectiva m¨¢s amplia de temas que est¨¢n en el curr¨ªculo?y son valores constitucionales.
R. ?Cu¨¢l es el problema de que un padre o madre sepa que alguien ajeno al colegio va a entrar en el aula de sus hijos a hablarle de religi¨®n o de pol¨ªtica? Podemos darle las vueltas que quiera, pero no veo nada extra?o ni sorprendente. Los maestros son perfectamente capaces de transmitir esos conocimientos si as¨ª lo entienden en su libertad de c¨¢tedra. Si para ello requieren de personal ajeno al centro educativo, que los padres lo sepan y lo autoricen.
P. Los padres ya ten¨ªan conocimiento de esas charlas, las publican los centros escolares. La autorizaci¨®n puede privar a algunos alumnos de acceder a ese contenido que, adem¨¢s, es obligatorio.
R. Le pongo un ejemplo. En Murcia la Semana Santa es muy importante, forma parte de la cultura, la identidad y el patrimonio. Si un d¨ªa se quiere organizar una actividad con un representante de la Semana Santa de un municipio, que nada tiene que ver con la formaci¨®n que imparten los profesores, los padres deben conocerlo.
P. ?Pone al mismo nivel la Semana Santa con actividades orientadas a la promoci¨®n de valores constitucionales como la tolerancia a la diversidad o la educaci¨®n afectivo-sexual?
R. No voy a entrar en el discurso de quienes intentan radicalizar la autorizaci¨®n. Estamos hablando de todas las materias y todas las actividades, no de autorizar o no charlas LGTBI.
P. La medida se aprob¨® porque fue una de las imposiciones de Vox en su acuerdo de investidura, y ahora la han repetido para firmar el acuerdo de presupuestos.
R. No responde a ning¨²n compromiso firmado para los presupuestos. Durante mi campa?a y en mi discurso de investidura yo me compromet¨ª con esto.
P.??Vox les ha robado la idea?
R. Yo nunca lo he defendido con el nombre que se le llama ahora, lo que he defendido desde siempre es una autorizaci¨®n familiar.
P. Los decretos 198/2014 (Primaria) y 220/2015 (Secundaria), que ustedes mismos aprobaron, establecen que esas actividades complementarias son obligatorias y evaluables. ?C¨®mo har¨¢n para que la orden de la consejer¨ªa sobre la autorizaci¨®n familiar no entre en contradicci¨®n con los decretos?
R. La autorizaci¨®n ya se est¨¢ haciendo, no hay que hacer nada.
P. Cuando se aprob¨® la orden en septiembre fue recurrida por el sindicato educativo STERM y la Federaci¨®n de Asociaciones de Padres de Alumnos Juan Gonz¨¢lez. El Gobierno central les ha dado un plazo de un mes para retirarlo.
R. El Gobierno central es muy valiente con los padres de la Regi¨®n de Murcia, me recuerda al t¨ªpico abus¨®n que se mete con los que son m¨¢s peque?os en el patio del colegio. No es tan valiente con los golpistas catalanes, ni es tan r¨¢pido a la hora de establecer acciones judiciales contra los que quieren romper Espa?a o contra aquellos que son amigos de ETA.?
P. Yo le pregunto por la posible contradicci¨®n legal entre las autorizaciones y los decretos de educaci¨®n.
R. Esta decisi¨®n se toma ampar¨¢ndose en la Constituci¨®n, en el derecho de los padres a elegir la formaci¨®n moral de sus hijos, en el art¨ªculo 26 de la carta de las Naciones Unidas sobre Derechos Humanos y, por supuesto, las instrucciones est¨¢n en vigor desde septiembre y tienen informes de los servicios jur¨ªdicos y la inspecci¨®n educativa. Si hubi¨¦ramos tenido alg¨²n informe en contra, no se habr¨ªa aplicado.
P. Entonces, ?no van a hacer ning¨²n cambio en ese mes de plazo que les da el Gobierno central?
R. El Gobierno de Espa?a puede hacer lo que estime pertinente, e ir¨¢ sabiendo a cada paso de lo que somos capaces los murcianos.
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