Los voluntarios, pieza clave en la aprobaci¨®n de las vacunas

Mientras las vacunas contra la covid de Pfizer y Moderna ya est¨¢n siendo inoculadas, miles de voluntarios permanecen en los estudios m¨¢s rezagados. Ernesto Herrera es uno de ellos. Este mexicano, de 51 a?os, lo tuvo claro cuando el entonces ministro de Sanidad, Salvador Illa, anunci¨® en agosto que parte de los estudios cl¨ªnicos de Janssen, propiedad de la multinacional estadounidense Johnson & Johnson, se desarrollar¨ªan en Espa?a. Se inscribi¨® en el hospital madrile?o La Princesa para participar y recibi¨® las dos dosis en noviembre. ¡°Tengo dos opciones: deprimirme como todo el mundo o encontrar una motivaci¨®n y ayudar a los dem¨¢s¡±, cuenta Herrera, que contin¨²a bajo control m¨¦dico.

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Isabel Sola, vir¨®loga e investigadora del Consejo Superior de Investigaciones Cient¨ªficas (CSIC) explica que los voluntarios ¡ªque no reciben compensaci¨®n econ¨®mica o perciben solo el equivalente a desplazamiento y dietas¡ª son la clave de la investigaci¨®n de las vacunas. La mayor¨ªa de estos estudios emplean el m¨¦todo de doble ciego. Es decir, ni los participantes ni los m¨¦dicos saben qui¨¦nes reciben la vacuna y qui¨¦nes una sustancia inocua. Jos¨¦ Ram¨®n Arribas, coordinador nacional del estudio en fase tres de Janssen en Espa?a, explica: ¡°Si no tenemos un grupo con el que comparar y hay un efecto adverso, no sabemos si se debe a algo natural o a la vacuna¡±.

Hasta el momento, la Organizaci¨®n Mundial de la Salud ha registrado 173 proyectos de vacuna, de los que 16 se encuentran en la etapa final, la fase tres. Esta suele durar dos a?os y contar al menos con 30.000 participantes, explica Sola. De cumplirse esa cifra, habr¨ªa m¨¢s de 400.000 personas involucradas en los estudios en fase tres. Sin embargo, algunas compa?¨ªas, como Novavax, alertan de que con la llegada de las primeras vacunas seguras ha aumentado el abandono de voluntarios. Una deserci¨®n masiva obligar¨ªa a reformular o incluso suspender los ensayos, seg¨²n Arribas. ¡°No podr¨ªamos asegurar que la vacuna funcione¡±.

La decisi¨®n de Raquel V¨¢zquez es firme: ¡°Necesitamos seguir investigando para tener m¨¢s opciones¡±. Cordobesa, de 42 a?os y afincada en Madrid, nunca hab¨ªa participado en un ensayo. A mediados de diciembre se inscribi¨® en la ¨²ltima fase del estudio de Janssen. Tras una revisi¨®n m¨¦dica, la emplazaron el 30 de diciembre para hacerle una prueba PCR y otra de ant¨ªgenos ¡ªpara comprobar que no hab¨ªa pasado el coronavirus¡ª y le aplicaron la primera dosis. Ahora espera la segunda. ¡°Formamos parte de algo que va a cambiar la vida de muchos¡±, expone. No ha sufrido efectos adversos. Tampoco tiene miedo, aunque a veces piensa: ¡°Por favor, que no sea placebo¡±.

La aprobaci¨®n de las primeras vacunas plantea, sin embargo, problemas ¨¦ticos. Sola lo expone as¨ª: ¡°Ahora que hay vacuna segura y eficaz, ?es ¨¦tico neg¨¢rsela a alguien que ha recibido el placebo y no est¨¢ protegida?¡±. Arribas lo tiene claro: ¡°Los voluntarios tienen el derecho a beneficiarse de las vacunas aprobadas y abandonar el estudio cuando quieran¡±. En ese caso, se desvela si han recibido vacuna o placebo. Tres de los 759 inscritos se han retirado, seg¨²n Arribas, de los ensayos de Janssen en Espa?a, algunos de ellos son sanitarios que ya han recibido las vacunas aprobadas. El estudio se desarrolla con 30.000 voluntarios en varios pa¨ªses y sigue en fase de reclutamiento.

Concienciaci¨®n social

Evelyn Herrera vive en Lima y se inscribi¨® en los ensayos que el laboratorio chino Sinopharm hace en Per¨². ¡°Soy voluntaria para la vacuna porque he visto a mucha gente morir por coronavirus¡±, sentencia. Es hemat¨®loga en el hospital Edgardo Rebagliati, donde varios de sus pacientes que estaban superando una leucemia han fallecido por covid. El plan de inmunizaci¨®n no ha comenzado en el pa¨ªs, pero el Gobierno ha firmado este mes contratos con Sinopharm y AstraZeneca. Como sanitaria, ser¨ªa una de las primeras en recibirla y lo tiene claro. Al contrario que V¨¢zquez prefiere ponerse una vacuna con la efectividad probada. ¡°Estoy expuesta al virus y tengo miedo de ser un riesgo para mi hijo de cinco a?os y mi madre, que tiene sobrepeso e hipertensi¨®n¡±, aclara por tel¨¦fono.

¡°Si nuestra aportaci¨®n sirve para que la gente se conciencie de que las vacunas son seguras, yo me doy por satisfecha¡±, revela la voluntaria Raquel V¨¢zquez

Sola defiende la importancia de no abandonar los estudios de otras vacunas pese a la autorizaci¨®n de las de Pfizer, Moderna y AstraZeneca. Al menos, hasta que la distribuci¨®n de vacunas alcance a toda la poblaci¨®n. ¡°Necesitamos m¨¢s dosis para inmunizar a todo el mundo. Adem¨¢s, puede haber vacunas m¨¢s eficaces que otras para algunos colectivos y no conocemos la inmunidad a largo plazo¡±, explica. El voluntario Ernesto Herrera lo ilustra con el ejemplo de su mujer, que sufri¨® c¨¢ncer de mama hace siete a?os. ¡°Ahora est¨¢ sana gracias a que otros voluntarios se ofrecieron para encontrar una cura¡±, cuenta.

V¨¢zquez resalta otra cualidad de los voluntarios en el proceso de vacunaci¨®n: ¡°Si nuestra aportaci¨®n sirve para que la gente se conciencie de que las vacunas son seguras, yo me doy por satisfecha¡±. Con ella coincide Evelyn Herrera, quien se muestra tajante con aquellos que temen vacunarse: ¡°M¨¢s miedo deber¨ªan tener al coronavirus, porque nos puede dejar secuelas, nos puede matar y nos deja hu¨¦rfanos¡±.