Los obispos empiezan a admitir casos de pederastia: ya reconocen 45, una veintena in¨¦ditos hasta ahora

La Iglesia espa?ola sigue siendo una excepci¨®n en el mundo cat¨®lico occidental a la hora de afrontar el esc¨¢ndalo de los abusos de menores. Mientras en Estados Unidos, Francia, Holanda, Irlanda o Alemania se han emprendido investigaciones generales y exhaustivas del pasado, y han salido a la luz miles de v¨ªctimas, en Espa?a la pasividad y el silencio parecen ser la norma. La Conferencia Episcopal (CEE) se ha negado a hacer una investigaci¨®n del pasado y despu¨¦s de que las di¨®cesis abrieran, por orden del Papa, unas oficinas de atenci¨®n a las v¨ªctimas, tampoco ha querido dar informaci¨®n. Solo dijo hace tres meses que las denuncias recibidas eran ¡°cero o muy pocas¡±. Ante la falta de datos y respuestas, EL PA?S ha preguntado a las 70 di¨®cesis espa?olas sobre los casos de abusos de los que tienen constancia, un a?o despu¨¦s de la apertura de esas oficinas. El resultado, que se puede consultar en el gr¨¢fico situado m¨¢s abajo, supone un primer y t¨ªmido avance en la ruptura del silencio: al menos 38 han contestado y 32 de ellas han aceptado informar del n¨²mero de denuncias que han recibido, aunque la mayor¨ªa no contabilizan ninguna. Pero la novedad es que ya hay 15 obispados que admiten 45 casos, entre las denuncias nuevas y las del pasado, 19 de ellas desconocidas hasta ahora por no haber trascendido en los medios.

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El alcance de este peque?o paso se mide tomando como referencia una primera ronda de consulta que realiz¨® este peri¨®dico en octubre de 2018: los casos que admiten se han multiplicado por diez. Entonces solo reconoc¨ªan cuatro. Siguen siendo cifras que no resisten la m¨¢s m¨ªnima comparaci¨®n con la media del esc¨¢ndalo en todos los pa¨ªses ¨Dsolo los jesuitas espa?oles han reconocido 81 v¨ªctimas¨D, pero ya es un peque?o avance respecto a lo que las mismas di¨®cesis admit¨ªan hace dos a?os. En 2018, cuando EL PA?S empez¨® su investigaci¨®n sobre los abusos de menores en la Iglesia, el balance de ese primer cuestionario fue a¨²n m¨¢s insignificante: la gran mayor¨ªa de las di¨®cesis ni respondi¨®, solo contestaron 18 y, de ellas, ¨²nicamente cuatro admitieron un caso (Oviedo, Plasencia, Guadix y Vic). Otras cinco afirmaron no tener ninguno registrado y las otras nueve eludieron las preguntas. Los 20 nuevos casos de pederastia en el clero que ahora salen a la luz, del que por otro lado las di¨®cesis se niegan a dar ning¨²n detalle, elevan el total de los conocidos en Espa?a a 243, con cerca de 550 v¨ªctimas, seg¨²n la contabilidad que lleva EL PA?S, ante la absoluta ausencia de datos eclesi¨¢sticos y oficiales. La mayor¨ªa de los abusos se han producido en ¨®rdenes religiosas.

La contabilidad de casos en Espa?a de EL PA?S: 243 desde 1986

EL PA?S contabiliza por primera vez los casos de abusos conocidos, lo que incluye sentencias, investigaciones period¨ªsticas y denuncias p¨²blicas que hayan destapado los posibles delitos de un religioso espa?ol.

En Navidad de 2018, en pleno auge del esc¨¢ndalo en Espa?a, el Papa Francisco agradeci¨® a los medios de comunicaci¨®n su trabajo para ¡°desenmascarar a estos lobos y dar voz a las v¨ªctimas¡± y advirti¨® a los obispos: ¡°La Iglesia pide que no se guarde silencio y que salga a la luz de forma objetiva, porque el mayor esc¨¢ndalo en esta materia es encubrir la verdad¡±. Dos a?os despu¨¦s, la Iglesia espa?ola a¨²n est¨¢ lejos de cumplir el deseo del Papa. La Conferencia Episcopal argumenta que no tiene ning¨²n poder ejecutivo, solo de coordinaci¨®n, y todo depende de cada obispo, que es el due?o absoluto de su di¨®cesis. En la reacci¨®n al cuestionario enviado a veces hay un abismo entre unas y otras en cuanto a sensibilidad con el problema. En la mayor¨ªa es dif¨ªcil siquiera saber de la existencia de la oficina de atenci¨®n a las v¨ªctimas en su web. EL PA?S tambi¨¦n ha preguntado si van a investigar sus archivos para revisar el pasado y solo cinco lo han hecho o lo est¨¢n haciendo: Bilbao, Zamora, Cartagena, Ourense y Solsona. M¨¢s Barcelona, que no obstante solo ha llegado hasta 1985. Los obispos siguen siendo muy reticentes a ser transparentes sobre la gesti¨®n de los abusos: solo nueve revelan los casos del pasado de los que tienen constancia. Madrid es la di¨®cesis que m¨¢s se ha volcado en la cuesti¨®n, aplica la transparencia al comunicar sus datos por propia iniciativa y, de hecho, es donde m¨¢s casos han salido a la luz, ocho nuevos y uno registrado en el pasado.

Este peri¨®dico ha preguntado adem¨¢s a las di¨®cesis si indemnizar¨¢n a las v¨ªctimas que lo reclamen y 11 estar¨ªan abiertas a estudiarlo. Tambi¨¦n, si apoyar¨ªan una investigaci¨®n general del pasado promovida y coordinada por la Conferencia Episcopal, como en Alemania o Francia (en ambos pa¨ªses han surgido m¨¢s de 3.000 v¨ªctimas): lo har¨ªan apenas 10. La entidad que representa a los obispos espa?oles, reunida este martes y este mi¨¦rcoles en su comisi¨®n permanente, sigue esquivando esta pregunta tanto en las ruedas de prensa como en las llamadas que les hacen los medios: ¡°No tenemos poder sobre las di¨®cesis¡±, repiten. La carta apost¨®lica del Papa de mayo de 2019, Vosotros sois la luz del mundo, que reforz¨® las medidas contra la pederastia en el clero, no menciona nada al respecto, aunque s¨ª incluye la posibilidad de que las conferencias episcopales ¡°puedan establecer un fondo destinado a sufragar el coste de las investigaciones¡±. Sobre indemnizaciones la CEE tampoco quiere hablar. El m¨¢ximo ¨®rgano de la Iglesia espa?ola cre¨® en octubre de 2018 una comisi¨®n antipederastia cuya actividad se desconoce. Deb¨ªa actualizar los anacr¨®nicos protocolos contra los abusos vigentes desde 2010 pero a¨²n no lo ha hecho.

La mitad de las di¨®cesis no han respondido al cuestionario de este diario, despu¨¦s de tres semanas. El obispado de Oviedo, por ejemplo, con acusaciones de encubrimiento sobre dos de sus obispos (Jes¨²s Sanz y Carlos Osoro), se ha negado a hacer ninguna declaraci¨®n. En Pamplona, Maite Quintana, directora de la Comisi¨®n de Prevenci¨®n de abusos, ha respondido: ¡°Consideramos que, en el momento adecuado, desde la Iglesia diocesana, informaremos y rendiremos cuentas de nuestro trabajo a la sociedad navarra, a la cual nos debemos en primer lugar. Desde ah¨ª podr¨¢n hacerse eco de la informaci¨®n emitida¡±. Navarra es un caso muy significativo, porque han salido a la luz casi medio centenar de casos en dos a?os en la prensa, pero la di¨®cesis apenas reconoce ninguno, simplemente porque no han ido a presentar una denuncia can¨®nica.

Este es un pretexto al que se han agarrado muchas di¨®cesis, y que precisamente quiso erradicar el Papa en su carta apost¨®lica de 2019. En su art¨ªculo 3 se?ala: ¡°Cada vez que un cl¨¦rigo o un miembro de un Instituto de vida consagrada o de una Sociedad de vida apost¨®lica tenga noticia o motivos fundados para creer que se ha cometido alguno de los hechos (...), tiene la obligaci¨®n de informar del mismo sin demora¡± al obispo. Tener noticia incluye tambi¨¦n la prensa, seg¨²n se?alan los expertos can¨®nicos consultados. Ya nadie puede mirar para otro lado. El documento papal tambi¨¦n ordena comunicar los casos que no sean de una di¨®cesis al obispo correspondiente o al superior de la orden religiosa involucrada.

El Gobierno y las instituciones tambi¨¦n guardan silencio en Espa?a, al contrario que en otros pa¨ªses, donde han impulsado la creaci¨®n de comisiones de investigaci¨®n ante la alarma social. Hay algunas excepciones. En Navarra el Gobierno foral, muy activo en el apoyo a la asociaci¨®n de v¨ªctimas que se ha formado en la comunidad, ha reprochado su inacci¨®n al obispo de Pamplona, Francisco P¨¦rez: ¡°Debo lamentar que no se haya hecho nada o casi nada. Debo lamentar que se apostase solo por un anuncio p¨²blico que no ha estado acompa?ado de mecanismos efectivos y reales de denuncia e investigaci¨®n¡±, dijo el consejero de Pol¨ªticas Migratorias y Justicia, Eduardo Santos, la semana pasada en la presentaci¨®n de un libro sobre abusos.

¡°Se siguen tapando unos a otros¡±

A pesar de las reformas del papa Francisco, las v¨ªctimas denuncian que los obispados y la Congregaci¨®n para la Doctrina de la Fe, el ¨®rgano disciplinario del Vaticano, siguen evitando que la informaci¨®n sobre los casos del pasado salga a la luz. Es la queja, por ejemplo, de Javier, v¨ªctima de Jos¨¦ Manuel Ramos Gord¨®n en el seminario de La Ba?eza (Le¨®n, di¨®cesis de Astorga). Desde que en diciembre de 2019 el Vaticano levant¨® el secreto pontificio en los casos de pederastia, este afectado no ha dejado de solicitar la documentaci¨®n de su caso. Pero tanto la di¨®cesis de Astorga como la Doctrina de la Fe se lo han denegado. Alegan que la decisi¨®n papal ¡°no tiene car¨¢cter retroactivo¡±, por lo que los casos denunciados antes de 2019 siguen blindados en los archivos eclesi¨¢sticos. ¡°No quieren d¨¢rmelo y estoy en mi derecho. Mi proceso fue un fraude¡±, explica Javier.

La pena al sacerdote fue de un a?o de apartamiento y fuentes de la investigaci¨®n afirmaron a EL PA?S que, en un principio, la pena impuesta era mucho m¨¢s dura, pero que el obispo, Juan Antonio Men¨¦ndez, decidi¨® cambiarla en el ¨²ltimo momento antes de enviar la sentencia a Roma. Algo que, como autoridad de la di¨®cesis, pod¨ªa hacer. ¡°Tienen miedo a que salga la mierda y veamos que a¨²n se siguen tapando unos a otros¡±, acusa esta v¨ªctima. Javier fue uno de los primeros afectados en Espa?a en llevar su caso a la prensa, a La Opini¨®n de Zamora, lo que desencaden¨® un aluvi¨®n de denuncias contra el mismo sacerdote. Men¨¦ndez, que falleci¨® en 2019, fue nombrado presidente de la comisi¨®n antipederastia de la CEE, una designaci¨®n que fue pol¨¦mica por la gesti¨®n de ese caso.

Si conoce alg¨²n caso de abusos sexuales que no haya visto la luz, escr¨ªbanos con su denuncia a abusos@elpais.es