Espa?a se asoma a la normalidad
La incidencia acumulada a 14 d¨ªas alcanza el m¨ªnimo en m¨¢s de un a?o. Las comunidades rebajan restricciones en la restauraci¨®n y el ocio nocturno, pero los expertos piden no bajar la guardia y relajar medidas de forma progresiva
Espa?a avanza hacia la vieja normalidad. En una semana en la que los estudiantes han vuelto masivamente a las aulas en su segundo inicio de curso pand¨¦mico y la presencialidad se abre paso en la oficina ¡ªel Gobierno quiere que los funcionarios abandonen el teletrabajo el 1 de octubre¡ª, las autonom¨ªas apuran tambi¨¦n a flexibilizar las restricciones que pesan sobre la calle. La evoluci¨®n epid¨¦mica acompa?a: la incidencia de casos de covid a 14 d¨ªas ha alcanzado este viernes los 91,21 casos por 100.000 habitantes, la cifra m¨¢s baja desde agosto de 2020. Aunque de forma paulatina, sin grandes desescaladas y cada comunidad a su ritmo, el descenso de la curva y la alta cobertura vacunal ¡ªel 75% de los espa?oles han completado la pauta¡ª anima a las autonom¨ªas a flexibilizar aforos y horarios en la restauraci¨®n y la cultura y a abrir la mano, incluso, con el ¨²ltimo gran basti¨®n de restricciones: el ocio nocturno. As¨ª, el Pa¨ªs Vasco dio este viernes luz verde a la reapertura de discotecas y a partir del lunes, Madrid levantar¨¢ las limitaciones horarias y ampliar¨¢ el aforo en este sector. El aval del Tribunal Supremo al uso del pasaporte covid en la hosteler¨ªa gallega tambi¨¦n da alas a algunas autonom¨ªas, como Galicia o Catalu?a, para estudiar su utilizaci¨®n como salvoconducto para relajar medidas. Los expertos, no obstante, piden precauci¨®n con las desescaladas.
La pandemia no se ha terminado, insisten los epidemi¨®logos consultados. Pero la situaci¨®n epid¨¦mica da un respiro despu¨¦s del intenso azote de la quinta ola. Tambi¨¦n la presi¨®n hospitalaria ha remitido: hay poco m¨¢s de un millar de pacientes con covid en cuidados intensivos, una cifra cinco veces menor a la registrada en los peores d¨ªas de la tercera ola, el pasado febrero. Los indicadores son todos favorables: la velocidad de transmisi¨®n del virus (la Rt, que mide a cu¨¢ntas personas contagia de media un positivo) estaba a principios de mes (¨²ltima fecha de la que se tienen datos) en 0,77, esto es, por debajo de 1, como recomiendan las autoridades sanitarias para mantener a raya la transmisi¨®n. Y, adem¨¢s, la positividad de las pruebas diagn¨®sticas que se realizan (unas 585.000 en la ¨²ltima semana) est¨¢ por debajo del 5% (4,77%), el umbral que usa la OMS para considerar que la pandemia est¨¢ bajo control.
Hay otros datos positivos. Este viernes hab¨ªa 3.809 hospitalizados por covid frente a los 30.000 de enero. En algunas autonom¨ªas, adem¨¢s, pasan varios d¨ªa sin registrar un solo muerto y tienen menos de 100 hospitalizados. Los fallecimientos en residencias han ca¨ªdo a la mitad en un solo mes. Eran 176 a la semana a mediados de agosto y 76 la semana pasada.
Elena Vanessa Mart¨ªnez, presidenta de la Sociedad Espa?ola de Epidemiolog¨ªa, pide, sin embargo, no bajar la guardia: ¡°Estamos yendo bien, pero hay que tener cautela. Tenemos que estar atentos porque el virus se va a encontrar en una situaci¨®n nueva para ¨¦l: le costar¨¢ m¨¢s transmitirse [por la alta cobertura vacunal en Espa?a] y este invierno, adem¨¢s, aparecer¨¢n de nuevo los otros virus estacionales y hay que ver c¨®mo se comporta el coronavirus con ellos aqu¨ª¡±. Coincide Jos¨¦ Mart¨ªnez Olmos, profesor de la Escuela Andaluza de Salud P¨²blica: ¡°Avanzamos hacia el control funcional de la pandemia en nuestro medio, que nos permite una convivencia con el virus. Estamos en una situaci¨®n esperanzadora, con cierta expectativa de relajaci¨®n de medidas, pero hay riesgo de una nueva ola: hay casi siete millones de personas sin vacunar, la incidencia a¨²n es alta y no estamos libres de una nueva variante¡±.
Con todo, mascarilla mediante y distancia social presente, la vida prepandemia intenta hacerse hueco en la calle. Los colegios e institutos ya han arrancado el nuevo curso y, aunque el virus sigue acechando, el escudo vacunal que proporcionan las inyecciones contra la covid dan aliento en las aulas, sobre todo en los institutos ¡ªel 65,8% de los j¨®venes de 12 a 19 a?os ya han completado la pauta vacunal¡ª.
Tambi¨¦n la presencialidad en los puestos de trabajo gana terreno. De hecho, seg¨²n un informe de Red.es, una entidad p¨²blica adscrita al Ministerio de Asuntos Econ¨®micos y Transformaci¨®n Digital, en el segundo trimestre de 2021 solo un 9,4% de las personas ocupadas trabajaron desde su domicilio particular habitualmente ¡ªm¨¢s de la mitad de los d¨ªas de su jornada laboral¡ª, dos puntos menos que el trimestre anterior (11,2%). Elena Garriga, de 40 a?os, trabaja en la sede corporativa de BBVA como analista de riesgo de cr¨¦dito de grandes corporaciones y este mes de septiembre ha vuelto a su puesto presencial: la mascarilla es obligatoria y tambi¨¦n la distancia social, pero puede tomar caf¨¦ con los compa?eros, explica. ¡°La vuelta a la normalidad no me apetece mucho, la verdad. Antes de la pandemia, no conoc¨ªamos la realidad de trabajar en remoto. Lo c¨®modo que es trabajar en casa, no gastar tiempo en desplazamientos, no tener que comer fuera sistem¨¢ticamente¡ No sab¨ªamos que esa era una opci¨®n viable y c¨®moda. La calidad de vida la he visto reducida. Pierdo dos horas de mi d¨ªa en llegar al trabajo, m¨¢s los atascos, m¨¢s el consumo de carburante¡±, lamenta Garriga.
Los buenos datos de evoluci¨®n de la pandemia tambi¨¦n han empujado a las comunidades a flexibilizar las restricciones que pesan sobre algunas de las actividades sociales. Los gobiernos auton¨®micos han ampliado los horarios de apertura de la restauraci¨®n, los comensales por mesa y los aforos de interiores. Madrid, que ha tomado la avanzadilla en la desescalada, levantar¨¢ a partir del lunes todas las restricciones horarias en restaurantes, bares, cines, teatros y ocio nocturno, y elevar¨¢ el aforo m¨¢ximo en la restauraci¨®n al 75% en interiores (con un m¨¢ximo de 10 personas por mesa), aunque no se podr¨¢ consumir en la barra ni usar la pista de baile en las discotecas.
Tambi¨¦n el Pa¨ªs Vasco aprob¨® este viernes ampliar el aforo en la restauraci¨®n y en los eventos deportivos: con las nuevas medidas que entran en vigor a partir de este fin de semana, los actos deportivos tendr¨¢n hasta un 60% de ocupaci¨®n y los actos culturales y sociales pasar¨¢n a permitir el 75%, al igual que el sector de la hosteler¨ªa. En la Comunidad Valenciana, tras las Fallas en Valencia, se han relajado restricciones: el 7 de septiembre desapareci¨® el toque de queda y la limitaci¨®n de reuniones a 10 personas; los estadios de f¨²tbol o pabellones deportivos pueden estar al 60% de su aforo al aire libre y al 40% en interiores.
Andaluc¨ªa, que mantiene el cierre de bares a las 2.00 y el de discotecas a las 3.30, ha ampliado el n¨²mero de comensales por mesa y el aforo en interiores al 75%. Adem¨¢s, se puede bailar con mascarilla en todas las pistas de baile que est¨¦n al aire libre. Las restricciones tambi¨¦n se han eliminado en cines, teatros, auditorios, celebraciones religiosas y eventos deportivos al aire libre, donde se permite el 100% de la ocupaci¨®n. Pero lo m¨¢s aplaudido por los andaluces esta semana es la autorizaci¨®n de celebrar procesiones con normalidad. De hecho, este mismo jueves procesion¨® la imagen de la Virgen de los Milagros, patrona del Puerto de Santamar¨ªa (C¨¢diz), la primera tras el levantamiento de las restricciones, y en Sevilla ya se preparan este domingo para ver en sus calles a las primeras im¨¢genes despu¨¦s de dos a?os.
Ocio nocturno
La tendencia de las comunidades es a ceder tambi¨¦n con el ocio nocturno, un sector que, seg¨²n la patronal Spain NightLife, suma p¨¦rdidas por valor de 30.000 millones de euros desde el inicio de la pandemia por los cierres continuados que ha sufrido. Cada comunidad, eso s¨ª, lo hace a su ritmo y a su manera. Adem¨¢s de Madrid, que es la m¨¢s aperturista en cuanto a horarios y aforo, el Pa¨ªs Vasco anunci¨® este viernes la reapertura de discotecas tras 13 meses con la persiana bajada de forma casi ininterrumpida: los aforos ser¨¢n del 50%, pero se podr¨¢ usar la pista de baile con mascarilla. Tambi¨¦n Asturias abri¨® la semana pasada y Navarra y Arag¨®n ampliaron horarios de apertura esta semana. Solo Baleares y Catalu?a permanecen con el ocio nocturno cerrado a cal y canto.
Joaquim Boadas, secretario general de Spain NightLife, critica las ¡°medidas desiguales¡± que hay entre las comunidades: ¡°Parece que hay 17 pandemias¡±, protesta. Y exige que se aplique un protocolo com¨²n para generar ¡°entornos seguros en el ocio nocturno¡±, esto es, directrices comunes que impliquen la solicitud del pasaporte covid para entrar a los locales de ocio.
Los j¨®venes tambi¨¦n tienen ganas de la vuelta a la vieja normalidad. Marc Reyes, que tiene 24 a?os y trabaja en el servicio de atenci¨®n al cliente de una compa?¨ªa, apunta al hartazgo de la poblaci¨®n: ¡°La gente est¨¢ muy quemada y se nota. Necesitan poder acudir a un concierto que haya organizado el Ayuntamiento, celebrar alguna fiesta de la ciudad como anta?o¡ Es necesario volver a todas esas cosas que parecen tonter¨ªas, pero hacen a la poblaci¨®n un poquito m¨¢s feliz¡±, opina.
Precisamente, el aval del Tribunal Supremo a exigir el pasaporte covid para acceder a restaurantes y discotecas en Galicia abre la puerta a emplear el certificado de vacunaci¨®n como un filtro para acceder a determinados espacios y flexibilizar las medidas generales que pesan sobre algunas actividades. De hecho, Canarias aprob¨® el jueves ampliar los horarios de cierre de aquellos negocios del ocio nocturno que, de forma voluntaria, exijan a sus clientes el certificado covid para acceder a su interior. Catalu?a, por su parte, estudia su uso para evitar nuevos cierres en caso de otra ola.
En Galicia, el ocio nocturno funciona a medio gas en funci¨®n de la incidencia del municipio (en las zonas con menos contagios el aforo interior es del 50% y del 100% en terraza). Pero la decisi¨®n del Tribunal Supremo, que pill¨® a la comunidad en pleno despliegue de un plan alternativo de medidas para la hosteler¨ªa, puede tener su utilidad en las discotecas: el Gobierno auton¨®mico est¨¢ ahora negociando un nuevo sistema inspirado en el modelo de la hosteler¨ªa ¡ªlos aforos no depender¨¢n de la incidencia, sino de las medidas de control que aplique el due?o¡ª, pero la Xunta siempre dijo que el pasaporte covid era perfecto para el ocio nocturno.
Boadas asegura que un pasaporte covid incentivar¨ªa la vacunaci¨®n entre un grupo de poblaci¨®n donde todav¨ªa queda margen de mejora en cuanto a pinchazos ¡ªel 70% de los veintea?eros y el 63% de los chavales de 12 a 19 a?os han completado la pauta vacunal¡ª. ¡°Es un motivo para que gente que no se vacuna o que no se ir¨ªa a hacer un test, lo haga¡±, apunta el portavoz de la patronal del sector.
Cautela
Los expertos en salud p¨²blica, por su parte, son m¨¢s cautelosos. Joan Cayl¨¤, miembro de la Sociedad Espa?ola de Epidemiolog¨ªa, admite que el uso del pasaporte covid ¡°puede ser un incentivo¡±, pero alerta de que la incidencia sigue siendo elevada y el riesgo de repunte tambi¨¦n: ¡°Ser¨ªa mejor usar el pasaporte covid que abrir las discotecas sin m¨¢s en toda Espa?a. Eso ser¨ªa un estropicio. Pero la pandemia no ha acabado y aunque la vacunaci¨®n es una ventaja, hay un 25% de poblaci¨®n no vacunada. Eso es un terreno abonado para que haya una sexta ola¡±. El epidemi¨®logo invita a ¡°aprovechar la disminuci¨®n de la incidencia para mejorar la prevenci¨®n y el control de la covid, especialmente el estudio de contactos y favoreciendo el cumplimiento de cuarentenas y aislamientos¡±.
Por su parte, Alberto Infante, profesor em¨¦rito de Salud Internacional de la Escuela Nacional de Sanidad del Instituto de Salud Carlos III, duda de la viabilidad de pedir el pasaporte covid a la entrada de una discoteca: ¡°Si abrimos el ocio nocturno, estamos facilitando que haya m¨¢s contagios. No hay m¨¢s vueltas que darle, aunque la gravedad ser¨ªa menor por el efecto de la vacunaci¨®n¡±, agrega.
Mart¨ªnez insta a retirar las restricciones de forma progresiva y paulatina, asegurando el control de la situaci¨®n epid¨¦mica en cada paso adelante. ¡°Vamos por buen camino. Pero con la incidencia que tenemos, tenemos que ir con un poco m¨¢s de cautela¡±, apostilla.
Con informaci¨®n de Eva Saiz, Cristina V¨¢zquez, Juan Navarro, Mario de Jaime Moleres, Sonia Vizoso, Guillermo Vega, Luc¨ªa Boh¨®rquez y Luc¨ªa Foraster.
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