Bibiana A¨ªdo: ¡°Me toc¨® caerme y levantarme unas cuantas veces¡±

¡°What the fuck!¡±, suelta Bibiana A¨ªdo. Estamos sentados en los sof¨¢s de piel de un s¨®tano de Bogot¨¢. Una chimenea caldea la habitaci¨®n. El rumor de unas cascadas de agua que rodean el edificio hab¨ªa generado un momento zen que se ha quebrado. A¨ªdo (Alcal¨¢ de los Gazules, 1977) cae en la cuenta de que lleva un buen rato hablando de algo en lo que no suele explayarse, su pasado. En 2008, el presidente Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero le convoc¨® a la Moncloa. La escuch¨® durante una hora. Al acabar le inform¨® que ser¨ªa la ministra m¨¢s joven de la historia, a sus 31 a?os, y que lo har¨ªa a cargo de algo totalmente nuevo, el Ministerio de Igualdad. A¨ªdo entr¨® en shock. Espa?a, tambi¨¦n. Sobre ella se escribieron toda clase de insultos y tergiversaciones que, vistos hoy, 13 a?os despu¨¦s, sonrojan a cualquiera. A¨ªdo representa ahora mismo a ONU Mujeres en Colombia.

Pregunta. De ni?a cantaba La Internacional...

Respuesta. Ten¨ªa seis o siete a?os, me sab¨ªa el estribillo. No era lo com¨²n entre la gente de mi edad.

P. ?Le prepararon para tener un horizonte pol¨ªtico como hacen algunos padres con los ni?os futbolistas?

R. No, jam¨¢s. De hecho a mi hermana menor no le interesa nada la pol¨ªtica.

P. Le apadrinaron Felipe Gonz¨¢lez, Manuel Ch¨¢ves. Le llamaban La Ni?a.

R. Era m¨¢s una leyenda creada en la ¨¦poca. No creo que influyeran en absoluto en mi nombramiento. De por s¨ª son amigos y referentes, pero nunca los he visto como padrinos, ni pienso que ellos me hayan visto como ahijada. Entonces me dec¨ªan La ni?a porque era muy jovencita y estaba muy involucrada en pactos pol¨ªticos, en las juventudes socialistas. Hoy tenemos mayor conciencia de cierto estereotipo de g¨¦nero que se usa con el lenguaje, en las expresiones, en la manera de tratar a la gente. Ya no se referir¨ªan a m¨ª como la ni?a.

P. Y su familia, ?C¨®mo llev¨® su tiempo en pol¨ªtica?

R. Fue una ¨¦poca dura, la observo con mucha distancia. Sin arrepentimientos, porque yo tengo mucha vocaci¨®n de servicio p¨²blico y tuve la oportunidad de servir a mi pa¨ªs durante ese periodo, creo que se hicieron muchas cosas, entonces tengo satisfacci¨®n y orgullo por lo que realizaba en ese momento. Pero lo veo sin ninguna a?oranza tambi¨¦n y creo que en mi familia nadie tiene tampoco a?oranza hacia aquella ¨¦poca.

P. Dijo en este peri¨®dico, al poco de ser nombrada, que iba a ser la mosca cojonera del gobierno. ?Lo fue?

R. Se consiguieron determinadas cosas por la insistencia. No todo era alianzas. Ten¨ªamos un compromiso muy claro por parte del presidente Zapatero, que s¨ª era un convencido de la agenda de la igualdad de g¨¦nero. Mar¨ªa Teresa Fern¨¢ndez, tambi¨¦n. Hab¨ªa detractores dentro. Y la sociedad espa?ola no estaba en el nivel de compromiso y de conciencia social de ahora. Los movimientos feministas son mucho m¨¢s fuertes, m¨¢s inspiradores, realmente est¨¢n desafiando esas asimetr¨ªas de poder que han llevado al mundo a punto de crisis en que estamos hoy.

P. ?Sigue habiendo muchos se?oros en Espa?a?

R. La pol¨ªtica sigue siendo un espacio muy masculino, aunque hemos avanzado, est¨¢ m¨¢s equilibrado que en aquella ¨¦poca.

P. ?Lleg¨® a la pol¨ªtica con diez a?os de adelanto?

R. No, creo que me toc¨® romper algunos esquemas. Caerme unas cuantas veces, levantarme, tratar de quitar la piedra del camino para que no cayeran otras que ven¨ªan detr¨¢s. Veo esa etapa de mi vida sin ninguna nostalgia, pero con la satisfacci¨®n y certeza de haber hecho las cosas lo mejor que pude.

P. He revisado las hemerotecas de los peri¨®dicos y hab¨ªa burlas hacia usted casi a diario. ?Se sinti¨® acosada?

R. La exposici¨®n p¨²blica forma parte de la vida pol¨ªtica. En el caso de la mujer esa exposici¨®n viene cargada de estereotipos de g¨¦nero. Sigue existiendo un alt¨ªsimo nivel de violencia pol¨ªtica sobre las mujeres, no solo en Espa?a, sino que es global. Tenemos datos de la uni¨®n interparlamentaria de 2018 que hablan que m¨¢s del 80% de las mujeres parlamentarias sufren violencia psicol¨®gica, casi el 45% de las mujeres parlamentarias sufre amenazas, violaciones, violencia f¨ªsica; y casi el 50% teme por su seguridad y la de su familia.

P. ?Eso es un s¨ª?

R. Ya le he contestado.

P. Acu?¨® una frase en esa ¨¦poca contra sus detractores: ¡°Que ladren¡±.

R. La resistencia se hace m¨¢s fuerte mientras m¨¢s avanzamos. El conflicto nunca est¨¢ entre quienes tienen el poder y quienes no lo tienen; sino entre quienes tienen el poder y quienes est¨¢n accediendo a ¨¦l. El machismo sabe que le queda poco tiempo, que est¨¢ perdiendo la batalla, por eso ladra con m¨¢s rabia que nunca.

P. ?Qu¨¦ opina de la ministra Irene Montero?

R. Tengo toda la empat¨ªa por la labor que desarrolla y toda la sororidad frente a los ataques que recibe.

P. ?Se guasapea con Zapatero?

R. Est¨¢ muy preocupado y ocupado por Am¨¦rica Latina. Para m¨ª es un referente en pol¨ªtica, honesto, transparente. Gran amigo.

P. No se ha ganado muchos por su mediaci¨®n en Venezuela.

R. All¨ª desarrolla una labor responsable sin importarle el qu¨¦ dir¨¢n, sin importarle su imagen.

P. ?Se merec¨ªa Zapatero la andanada que le propin¨® Felipe Gonz¨¢lez en el ¨²ltimo Congreso del PSOE?

R. (Piensa unos 20 segundos). Felipe sigue siendo una persona muy influyente, con un gran liderazgo y que dice lo que quiere y cuando quiere. Solo que a veces sus palabras pueden ser muy dolorosas.